Sendero del Escomite-Sierra de Filabres

Nombre: Sendero del Escomite -Sierra de Filabres

Fecha: 09/05/2015

Distancia recorrida: 16km (07:51)

Tiempo en movimiento: 03:56

Altura Mínima: 1414m

Altura Máxima: 1784m

Ganancia Altitud: 784m

Pérdida Altitud: -783m

El recorrido parte desde las estribaciones del Collado del Conde y en su mayor parte discurre por antiguos senderos de herradura que enlazaban Poblados de la Sierra de Filabres (Los Sapos, Los Canos, Los Morcillos, Los Carrascos). El sendero nos lleva desde el Mirador del Escomite por la vertiente este del Barranco de la Olapra hasta descubrir el verdadero corazón de los Filabres.



ITINERARIO:
Balsa de los Carrascos, pista forestal, cortafuegos, mirador del Escomite, cortafuegos loma del Escomite, pino dormido, Barranco de la Olapra, Encina de las Elenas, Barranco de las Morcillas, Los Carrascos, Balsa

Como llegar al punto de inicio:
Desde Almeria: nos dirigimos por la Autovía hasta Gergal y después tomamos la carretera A-1178 (ojo en Google Maps aparece como A-339) entre Gergal y Serón, en el punto kilométrico 22,8 de la misma se encuentra el Collado del Conde. En este punto hay un cruce de pistas forestales. De los dos caminos a la izquierda de la carretera, tomamos el de la derecha que es el que va hacia el cortijo del Conde. El de la izquierda lleva a Arroyo Berruga.
Una vez que tomamos la pista forestal, a poca distancia de la carretera pasando por el entorno del Cortijo del Conde llegamos a un edificio donde hay unos caños de agua potable. Después de seguir la pista durante unos 2km llegamos hasta la balsa de los Carrascos. Hay una construcción que actualmente está habilitada para los pastores. En la lejanía se observa el observatorio astronómico de Calar Alto, y también podemos observar desde este mismo punto la Cortijada de Los Carrascos. Dejamos los coches en este lugar.

Descripción del recorrido.
Iniciamos el recorrido desde este punto, por la pista forestal que conduce hasta la cortijada de los Sapos y bordea la cueva del Collado y el Calar de los Sapos. Aproximadamente a 2km del recorrido, abandonamos la pista para continuar por el cortafuegos que aparece a nuestra izquierda. Ascendemos por el cortafuegos y a poco más de 1km nos desviamos a la izquierda para acceder hasta el mirador del Escomite (1778m) Desde este punto las vistas del Calar y Barrando de la Golapra (Olapra para la gente del lugar) son impresionantes.
Volvemos sobre nuestros pasos para regresar al cortafuegos de la Loma del Escomite y continuar por este descendiendo suavemente, entre zona de pinos de repoblación. Continuamos hasta llegar a un singular ejemplar en medio del cortafuegos. Se trata de un pino cuyo tronco esta acostado, se le conoce como “el pino dormido” y es referencia para este recorrido.
Unos metros más abajo aparece a nuestra izquierda un senderito que discurre por la vertiente este del Barranco de la Olapra y nos conduce, entre encinas milenarias, pinos gigantes, fresnos, cerezos, majuelos, saucos y antiguos frutales en flor, al verdadero corazón de los Filabres.
Este antiguo sendero de herradura enlazaba los Poblados de la Sierra de Filabres (Los Sapos, Los Canos, Los Morcillos, Los Carrascos). Fue rehabilitado por mujeres de Bacares y de Seron, herederas de las viejas cortijadas que en sus ratos de ocio dedicaron 4 meses a su rehabilitación.
El sendero es bastante estrecho y cerrado se va vislumbrando a medida que avanzamos. Hay que estar pendiente para no confundirse con otros trazos dejados por animales. Continuamos avanzando y a la altura de la confluencia de los barrancos del Negro y barranco de las Morcillas nos encontramos con un magnifico ejemplar de encina milenaria, ubicada en el paso del sendero y como invitando a hacer una parada para descanso y recreo de la panorámica. Esta encina se le conoce como de las Elenas.
Continuamos ahora paralelos al barranco de las Morcillas hasta llegar a las ruinas de las aldeas Las Morcillas. El sendero recorre toda la cortijada y continúa descendiendo hasta el Barranco de las Morcillas. El arroyo proporciona agua a una abundante vegetación de ribera, y un bue sitio para descansar y comer algo.
Desde aquí continuamos el último tramo del recorrido. Continuamos por el camino paralelo al arroyo hasta las ruinas de un molino. En este punto iniciamos una subida en zigzag con pendiente bastante pronunciada que nos llevará directamente hasta las ruinas de la cortijada de los Carrascos.
Tras cruzar las ruinas continuamos subiendo campo a través hasta alcanzar el punto donde dejamos los coches.