Sendero Secadero - Los Nogales - Ermita Virgen del Rosario del Campo (Casares)

Sendero realizado el 9 de mayo de 2021.

Para llegar al punto de partida nos dirigimos hacia San Martín del Tesorillo y en la localidad de El Secadero, perteneciente al municipio de Casares, justo en la esquina de la farmacia El Secadero, en la calle Gaucín, aparcamos nuestro vehículo.

Iniciamos la caminata en la zona conocida como El Tejar, por un largo carril para viandantes situado en el lateral izquierdo de la carretera, donde encontramos grandes extensiones de arboleda de cítricos, pistachos y aguacates, que serían una constante casi en la totalidad del sendero. También contemplamos abundantes flores silvestres y algunas que otras rosas que proporcionaban un agradable aroma a este tramo del recorrido.

Alcanzamos el Cortijo El Papudo, frente al cual se ubica un enorme vivero de cristaleras transparentes, y caminando por la Vereda de los Pescadores, pasamos por el Cortijo de La Chata hasta llegar a un cruce de caminos con indicaciones de otros senderos pertenecientes al municipio de Casares.

Continuamos en línea recta, ahora por pista de grava compactada, en paralelo a la enorme finca ocupada por el Club de Polo Valey.

Atravesamos la Finca Pacheco donde pudimos contemplar unos bonitos caballos; también pasamos por el Cortijo de Majada Vieja con una gran extensión de tierra que estaba siendo regada y con un gran rebaño de ovejas al otro lado de la carretera.

Llegamos a la zona conocida como Los Nogales, lugar donde se unen los ríos Guadiaro y Genal, este último como afluente del primero, y donde existe un pequeño bosquete formado por sauces, fresnos y tarajes.

En esta zona, en la antigüedad, se situó un embarcadero hasta el que llegaban los barcos fenicios, desde el Mediterráneo y río arriba, para comerciar con los habitantes de la zona. En aquellos tiempos el río era navegable. Un poco más al norte, siguiendo el curso del río, los romanos construyeron una ciudad, fortaleza militar, llamada Lacipo (pueden visitarse sus ruinas a través de un sendero), para dominar este importante punto estratégico, que era una de las entradas a la Bética Romana. Años más tarde y justo aquí también hubo una venta de caminos, Venta Los Nogales, lugar de paso de viajeros y contrabandistas procedentes de Gibraltar, que llegó a albergar un pequeño destacamento estable de carabineros.

Una vez disfrutado el lugar, continuamos hacia la zona conocida como la Aguzadera, donde encontramos otras indicaciones de senderos. Giramos a la izquierda, en dirección al sendero de la ermita.

Nos descalzamos y cruzamos el río Genal; ascendimos un discreto repecho y llegamos a la ermita de la Virgen del Rosario del Campo, lugar donde las gentes de Jimena, San Martín del Tesorillo y Casares se reúnen en romería en honor de dicha Virgen.

Visitados el exterior y los alrededores de la ermita, seguimos, ahora en descenso, hasta un nuevo cruce de caminos. Giramos a la izquierda y llegamos, nuevamente al río Genal. Volvimos a cruzarlo y accedimos a la pista por la cual habíamos realizado el camino de ida.

Anduvimos un kilómetro, aproximadamente, y nos desviamos a la derecha para conectar, de nuevo, con el río. En esta ocasión con el río Guadiaro. Recorrimos un corto tramo siguiendo el mismo y, a través, del barranco de las Culebras, salimos a la pista por la que ya habíamos caminado, pero ahora la haríamos en sentido inverso hasta llegar a nuestro vehículo.

Os dejamos algunas fotografías para animaros a realizar esta ruta.

Y recuerda: deja el sendero como te gustaría encontrártelo.

PUNTO DE ÉNFASIS

La valoración que cada persona hace de una ruta después de realizada la misma es muy subjetiva, dado que esta depende de muchos factores: edad, preparación física, preparación técnica, equipo requerido, características del terreno, condiciones climáticas, etc.; por tanto, es necesario que hagamos constar que lo descrito en este relato y los parámetros que en él figuran (tiempo, distancia, grado de dificultad, tracks para GPS y waypoints) son meramente informativos / orientativos y, por ello, queda bajo la responsabilidad de quien quiera realizarla tomar las medidas oportunas.