Senz, aigüeta de Viu y ermita de San Roque, circular por PR-HU 120

Sencilla ruta senderista la cual nos permitirá recorrer bonitos bosques del barranco de Viu.

El recorrido se inicia en la misma localidad de Senz.

Bajamos unos metros por la carretera hasta encontrar un camino junto a una nave ganadera, hay en la pared una señal del PR (blanca y amarilla).

Descendemos por el camino que traza algunas lazadas, este lugar no es demasiado bonito porque hay bastante porquería de la granja ó nave anterior (cuerdas y plásticos diversos).

Llegamos a un gran prado, en medio hay una casita de piedra. Nos sorprenden un grupo de corzos, que se marchan rápidamente hacia el bosque, una deliciosa escena propia de las tempranas horas que son, pues apenas está saliendo el Sol.

Hay que estar atentos en la parte baja del prado que bordeamos, ya que el sendero tiene un quiebro a la izquierda, pasando por detrás de un muro de piedra.

Recorremos el sendero bastante vestido durante unos minutos hasta adentrarnos en el bosque, lugar donde precisamente el estrecho sendero se hace más visible y cómodo de recorrer.

Avanzaremos por este tramo muy hermoso y lleno de verdor, hasta alcanzar una división de sendas, justo donde hay que cruzar el barranco de San Roque por unas piedras.

Pasamos el cauce con la pequeña dificultad de las aguas crecidas de las recientes lluvias, y desviamos momentáneamente a la derecha para visitar una gorga o badina con cascada que haría las delicias en verano.

Hacemos fotos en este curioso y fresco lugar y retomamos el sendero remontando el barranco de San Roque por su margen izquierda orográfica, primero por un tramo lleno de hierba entre un tupido pinar, y luego por un camino que sube bastante hasta el encuentro con la senda que va a Viu.

Hemos disfrutado durante un rato de algunas pozas en el barranco y de bonitos bosques que deleitan nuestros sentidos, la ermita de San Roque está ya cerca y la hallaremos precisamente a unas decenas de metros de un merendero que hay junto al camino, junto a una gran pradera rodeada de arbolado.

El lugar es especialmente bonito, aunque la ermita está cerrada a cal y canto. Cogemos unas manzanas de un árbol asilvestrado que hay cerca y continuamos por el camino de antes hasta salir a la carretera de Senz a Viu.

Por este tramo de asfalto regresamos a Senz sin mas complicaciones, en verano el asfalto está caliente pero ahora en otoño no supone mayor problema.

Al llegar a Senz aprovecharemos a comprar unos quesos en la quesería del pueblo, muy bien atendida por Mari Carmen. Qué delicia de productos artesanales.