Serralada de Marina: La Casa del alemán Can Mora Torrente Pregón fuente Amigó Poblado Maleses San Jeroni La Miranda,

La casa del alemán

Ca l'Alemany es una antigua masía del barrio de Canyet de Badalona (Barcelona), situada en el valle de Belén o de San Jerónimo, cerca de la colina de Montigalà, a medio camino entre la ciudad, marcada por la B-20, y el monasterio de San Jerónimo de la Murtra. Actualmente sólo quedan ruinas, la parte mejor conservada de las cuales son el lavadero del patio y los arcos que lo acompañan. A pesar de su estado, actualmente está protegida como Bien Cultural de Interés Local. Una excavación arqueológica constató la presencia de una villa romana anterior, que habría dejado paso, posteriormente, en la masía. A pesar de su estado, sigue siendo un elemento característico del paisaje del valle de San Jerónimo. La masía original era del siglo XV, tuvo reformas y ampliaciones posteriores; estaba construida con tapial y la fachada de levante era de mampostería. Los dinteles y las jambas eran hechos de piedra. Actualmente los restos del edificio principal están muy degradadas y tampoco quedan las cubiertas. Sin embargo, aún es visible la balsa o lavadero cuadrado rodeado de un reducido patio y una galería de arcos de medio punto hechos con ladrillo Situada sobre una villa romana, excavada inicialmente en 1975 por Marta Prevosti y colaboradores del Museo de Badalona, ​​donde se encontraron restos ibéricos y romanos. Era un edificio acomodada de época del Alto Imperio; constaba de nueve habitaciones, tenía una piscina adosada que contenía restos de pinturas con motivos de delfines y unas salas termales. Entre finales del siglo ii y mediados del siglo iii, se inutilizan las salas termales y se instala un horno metalúrgico, correspondiente a la transformación de la parte de la villa residencial en productiva. Como en otros casos similares, la masía se superpondrá a la villa. Las primeras referencias documentales de la masía son de 1300, cuando se menciona el Mas Carcereny. Su nombre cambiará según el propietario; en 1418 es documentada como Mas Navidad de Abajo, y desde 1619 como Ca l'Alemany, el cual ha terminado conservante. Fue propiedad de esta última familia y luego pasó a los marqueses de Llió, que también eran propietarios de Can Mora. En 1717 se convirtió en una masía señorial, se repuso y mejorar, y se le añadirá la balsa y las glorietas. La masía quedó abandonada a finales del siglo XX. Víctima de varios actos vandálicos, en primer lugar fue arrasado su interior y mobiliario, después fue destruida el tejado y el techo se hundió. Poco después el edificio era quemado totalmente y la bodega también quedaba afectada. El Ayuntamiento consiguió salvar únicamente una prensa de vino fechada del año 1830, que fue desmontada y trasladada al Museo

Can Mora

Can Mora es una masía catalogada como bien cultural de interés local del municipio de Badalona (Barcelona). Se trata de una edificación con volumen paralelepipédica reformada en algunos elementos. Consta de planta baja, piso y desván, en parte con galería de arcos de medio punto. Las aberturas de los balcones de la planta principal tienen unos pequeños arcos delgados de ladrillo que las protegen de las inclemencias del tiempo. Ante la fachada hay una amplia era. En el interior se conserva una capilla, con obras del siglo xviii. Fue construida para el marqués de Llió el siglo XVIII, sobre un emplazamiento prehistórico (silo con restos hallstattianies).

Orreo gallego

Un hórreo es una construcción destinada a guardar y conservar los alimentos alejados de la humedad y de los animales para mantenerlos en un estado óptimo para su consumo.1​ Se caracteriza por mantenerse levantado sobre pilares para evitar la entrada de humedad y de animales (especialmente ratones y otros roedores) desde el suelo y por permitir la ventilación a través de ranuras en las paredes perimétricas. En 1918 el antropólogo polaco Eugeniusz Frankowsky registra el uso de graneros aéreos en la península ibérica, región de los Alpes, península Escandinava, área de los Balcanes, África subsahariana, Persia, Sureste Asiático, Japón, península de Kamchatka y áreas del estrecho de Bering, empleados para la conservación del cereal.2​ La especificidad del hórreo como tipología reside en su unión con el cultivo del maíz y a su maduración y secado en zonas de clima atlántico. El uso del hórreo se extiende por buena parte del norte de la península ibérica. Actualmente son especialmente abundantes en Galicia y parte de Asturias, aunque también se cuenta con ejemplos en las provincias de León y Zamora, en Cantabria y en algunas zonas del País Vasco y norte de Portugal. En estas zonas el uso del hórreo se explica por la pronta llegada de un invierno largo, frío y húmedo que antaño obligaba a realizar cosechas tempranas.

Hípica / Can Pujol

Can Pujol es un edificio protegido como bien cultural de interés local en Badalona (Barcelona). Es un importante conjunto, bien mantenido y con contenido de interés (mobiliario, pinturas, tapices, etc.) El edificio consta de planta baja, piso y desván, y presenta varios anexos, uno de los cuales aloja la Hípica Badalona. Al subsuelo hay restos romanos. De origen medieval (siglo XIII), tomó su imagen actual en el siglo xviii.

Puente Mas Oliver

El Mas Oliver, o Can Ribó, es una antigua masía, hoy vivienda, de la ciudad de Badalona, ​​situada en el barrio de Canyet. Es un edificio de tipología basilical, con planta baja, piso y desván. En la planta baja encontramos el portal de arco de medio punto, con dovelas todas del mismo tamaño y bien trabajadas. A ambos lados hay una ventana rectangular con rejas. El primer piso cuenta con un balcón con ventanas rectangulares a cada lado con antepecho y dovelas de piedra. La buhardilla tienen tres ventanas iguales de arco de medio punto, hechas con ladrillos. La fachada ha sido encalada, presenta unos pequeños faroles a cada lado de la puerta y un reloj de sol a la izquierda del balcón. El tejado, realizada con teja árabe, tiene un amplio alero. En la construcción original, se le añadieron unos cuerpos laterales de dos plantas, el de la izquierda sobresale del resto del edificio. La planta superior es de doble terraza. Alrededor de la casa hay un jardín orientado al mar. Por otra parte, el interior de la casa tiene objetos y mobiliario de gran valor, principalmente uno de los dormitorios y una sala isabelina. La antigua bodega ha sido restaurado conservando las barricas, y las cuadras se han convertido en garajes. El apellido Oliver aparece en los fogajes de Badalona de 1553. Probablemente, el nombre concreto Mas Oliver, proviene de la unión de dos familias en el siglo XVIII, Bernat Mas marido de Eulalia Oliver; antiguamente la masía era llamada Can Mas Oliver. Posteriormente, se hace referencia a un tal Pau Mas Oliver, vecino de Badalona, ​​maestro de hacer carros y coches, como propietario de la finca. En 1835, con motivo del incendio de San Jerónimo de la Murtra, los propietarios guardaron la imagen del Santo Cristo. La finca terminó en manos de la familia Ribó, que fueron también propietarios de la antigua Cordelería Ribó, a Canyadó. Las obras de reforma y ampliación de la casa se hicieron en el siglo XX, en 1930, y se encarga el arquitecto Joan Padrós y Fornaguera

Sendero de arbolada camino de Mas Oliver

Pasar por el medio de esta arboleda es una experiencia única, pues es como si estuvieras entrando a un túnel. Disfrutamos mucho caminar por aquí.

Entrando al sendero

Torrente Pregon

El torrente Hondo, llamada popularmente riera de Canyet, es el arroyo más larga de Badalona. Nace en la vertiente sur de la montaña de la Amigó en la Sierra de Marina, y desemboca en el mar al pasar por debajo de la avenida Martí Pujol recorriendo el municipio de Badalona. El caudal constante que lleva proviene de las fuentes de montaña (fuente del Amigó, fuente del Medio, fuente de Abajo, fuente de Arriba, fuente de la Rosa, entre otros). Pero es cuando llueve torrencialmente cuando su caudal aumenta de manera abrupta e importante, pudiendo ocasionar algunos problemas. De la autopista C-31 hasta el mar también recibe el nombre de arroyo de Folch, aunque actualmente se está perdiendo el topónimo. La riera de Canyet atraviesa el barrio badalonés de Canyet. A medida que se acerca hacia el mar aparecen por la izquierda el torrente de Can Mas, así como dos pequeñas torrenteras que bajan del Cerro de Montigalà. A continuación tenemos, a la izquierda, el último afluente del arroyo, el Torrent de Can Ferrater (o de la Calabaza). Desde este punto hasta la playa es una gran avenida que es una de las arterias principales de Badalona. Si bien tiene el nombre oficial de Avenida de Martí Pujol, esta calle es conocido como "la Riera". En 1960, tras unas obras bastante complicadas, se enterró y se canalizó el tramo de la autopista C-31 y hasta la playa para evitar las inundaciones que ocasionaba de vez en cuando en la parte baja de la villa. A principios de los años 90, el soterramiento del arroyo se prolongó hasta la autopista B-20, convirtiéndola en una avenida y un eje viario muy importante de la ciudad, y no fue hasta principios del actual siglo XXI cuando la canalización llegó hasta Can Navidad para facilitar los accesos a los caseríos que hay alrededor del curso fluvial. A pesar de los esfuerzos para minimizar los efectos de las riadas, aún hoy en día, en los momentos de máxima intensidad de las precipitaciones puede llegar a causar algunos dolores de cabeza tal como ocurrió el 28 de abril de 2011 o el 14 de septiembre de 1999, cuando cayeron hasta 96 litros por metro cuadrado. A su cabecera domina la vegetación de ribera, y en su curso medio los plataneros que se plantaron hace más de 50 años. También se encuentra cañas con abundancia, una especie invasora pero ya típica de los paisajes del Maresme

Torrente fuente del Amigó

Desde que empezamos a caminar por esta zona hasta llegada a la fuente, vamos por el lado izquierdo del torrente. Con árboles frondosos y un agradable olor a verde y natural hace que sea muy placentero caminar por este sendero húmedo.

Fuente del Amigó

Unos bancos de piedra y el sonido relajante del agua brotando, hacen de este lugar un sitio excelente para descansar. Destacan la gran cantidad de especies de mariposas que viven en esta vertiente del parque.

Torrente de la fuente del Amigó

Pasamos por este sendero torrente, es muy estrecho pero divertido.

Subiendo sendero hasta el Coll de Llica

Coll de Llica, sendero valles oriental a la izquierda

Yacimiento íbero de Les Maleses

El poblado íbero de Les Maleses se encuentra en la cima de la colina que lleva el mismo nombre. Esta cima, a la vez, sirve de límite municipal entre los términos de Moncada y Reixach y San Fausto de Campcentellas. Se trata de una elevación de 462 m de la Sierra de Marina, desde donde se puede dominar visualmente todo el Vallés, parte del Barcelonés y parte del Maresme. Asimismo tiene buena visibilidad sobre los macizos del Montseny, Montserrat y Prepirineo. El yacimiento ibérico de Les Maleses ha sido objeto de diversas intervenciones desde el año 1928, momento en el que la sección de Arqueología e Historia de la Agrupación Excursionista de Badalona realizó una primera intervención. Posteriormente las tareas de excavación fueron continuadas por la Unió Excursionista de Cataluña de Gracia. En los años 1943-1948 y 1955-1956 interviene en el yacimiento JMCuyás y posteriormente Font i Cussó, J. Fàbregas Bagué, la agrupación de AGES de Santa Coloma de Gramanet y el Centro Excursionista de Montcada Bifurcación. En 1982 se publican dos artículos referentes al yacimiento de Las Maleses: El primero de ellos está firmado por Antonio Velasco y comenta la excavación de tres habitaciones. El segundo está firmado por Mercedes Durán y se corresponde con la memoria científica de la campaña realizada el año 1980. La excavación se planteó en la zona sureste del yacimiento y permitió documentar cinco habitaciones, un bancal y posiblemente un silo. 1982-1985, se reanudan las campañas de excavación en el yacimiento, esta vez bajo la dirección de las doctoras Mercedes Durán y Elisabeth Huntingford. Noviembre y diciembre de 1998, se realizaron tareas de consolidación de todas las estructuras excavadas a lo largo de los años. A partir del año 2000, Mercedes Durán y Gemma Hidalgo asumen la gestión, coordinación y dirección de un programa de investigación en Les Maleses, que ha venido desarrollando hasta la actualidad un total de nueve campañas de excavación.

Coll de la Malesa

Vamos cruzando un frondoso bosque de pinos muy agradable.

Coll de la Vallensana

El collet de la Vallensana es un pequeño paso de montaña que se encuentra en la Sierra de la Marina de la costa barcelonesa uniendo Montcada y Reixac con Badalona. Aquí hacemos una derecha por un sendero.

Turó de en roda soques

Ruinas

Ni, idea de lo que era antes, pero a pesar de que es unas ruínas con pocas paredes en pié, nos paramos a disfrutar el entorno e imaginarnos que pasado habrá tenido.

Árbol con flores

Torrente de la Font Santa

Se siente un agradable fresquito, y olor a naturaleza, camina por el lado de este torrente fué muy agradable.

Fuente Santa de Baix

Ya no queda nada de la fuente sólo ruinas con un mal olor dentro y cubierto por la vegetación.

Monasterio de San Jeroni de la Murtra

El monasterio de San Jerónimo de la Murtra (Sant Jeroni de la Murtra en catalán) es un antiguo cenobio de la Orden Jerónima construido en estilo gótico a principios del siglo XV. Se emplaza en el entorno natural de la Sierra de la Marina, en el municipio de Badalona de la Provincia de Barcelona (Cataluña, España). El primer cenobio fue fundado en 1413 cerca de San Pedro de Ribas, en la comarca catalana del Garraf, en la misma provincia de Barcelona, siendo trasladado tres años más tarde, en 1416, por el mercader barcelonés Bertran Nicolau, quien dispuso su reedificación sobre la antigua casa rural de La Murtra, entre Badalona y Santa Coloma de Gramanet. A partir de esta primitiva casa se construyeron la iglesia, las celdas, el claustro, el refectorio, la cocina y otras dependencias monásticas. Consta documentalmente que en 1431 San Jerónimo de la Murtra tenía catorce monjes que por dificultades económicas quisieron fusionarse con el también jerónimo monasterio del Valle de Hebrón de Barcelona. Denegada la fusión y gracias a la protección de Juan II, el Monasterio se fue consolidando y consiguiendo favores bajo los reinados de los Reyes Católicos y del rey Carlos I, que se hicieron cargo de la realización de grandes obras en el monasterio. Testimonio de estas mercedes son los retratos de Fernando y de Isabel en la galería de poniente del claustro, junto con sus escudos de armas; también se encuentra el nombre de Juan II grabado en el refectorio. Probable retrato de Cristóbal Colón en el claustro. Cuando Fernando el Católico, el 7 de diciembre de 1492, resultó herido por el regicida Juan de Cañamares en las escaleras del Palacio Real Mayor de Barcelona, el monarca pasó unos días recuperándose en el Monasterio junto con su esposa Isabel de Castilla. Fue allí donde los Reyes Católicos recibieron en audiencia a Cristóbal Colón de regreso de su primer viaje a América. Este acontecimiento histórico tuvo lugar en abril de 1493. Durante los siglos XV y XVI se edificaron las partes más importantes y dispuso de una gran biblioteca.1Su prior Pere Benejam fue consejero de los reyes y de los duques de Cardona. Los jerónimos mantuvieron desocupado el Monasterio entre 1811 y 1820. Con motivo de la Desamortización de Mendizábal de 1835, fue exclaustrado, asaltado e incendiado. Tras muchas décadas de abandono y de cambios de propietarios, San Jerónimo de la Murtra fue declarado Monumento Histórico-Artístico de interés nacional el 20 de diciembre de 1974 (declaración publicada por el B.O.E. el 14 de enero de 1975). El edificio se remonta al siglo XV, con reformas de ampliación realizadas durante el siglo XVI. Constaba originalmente de una sola nave de tres tramos con arcos ojivales, ábside de cinco caras en su cabecera y seis capillas laterales. Su constructor conocido fue Tomàs Bersa, maestro de obras del Patio de los Naranjos del Palacio de la Generalidad de Cataluña. En el incendio del año 1835 se derribó gran parte de la iglesia, quedando solamente una parte del muro de la parte derecha y el ábside. La Capilla de San Sebastián, que había sido realizada en 1491, fue reconstruida a mediados del siglo XIX. Dependencias monacales Claustro del Monasterio. Situado en el ala norte del claustro se encuentra el refectorio de los monjes, con una planta de veinte por seis metros, cubierto con tres bóvedas de crucería cuyas claves de bóveda fueron policromadas por el monje Gabriel Andreu entre los años 1483 y 1486. La clave central representa a Sant Jeroni y en otra puede leerse la leyenda: Rex Joannes me facit, en referencia al rey Juan II, benefactor del Monasterio. Otras dependéncias son la sala capitular, la cocina, la bodega y el lavadero. Claustro Se sitúa en el centro del conjunto monacal, como es propio en los monasterios. El claustro consta de dos pisos de galerías cubiertas con bóvedas góticas nervadas que en su arranque en los modillones muestran retratos y escudos de armas de sus benefactores y de otros personajes relacionados con el Monasterio, como los Reyes Católicos, Carlos I, Colón y Ramon Llull. Las claves de bóveda representan santos y temas heráldicos. En el piso superior se observan quince arcos escarzanos rebajados. En el jardín del patio hay un gran arbusto de una murtra, que es como se llama en catalán a la planta del mirto o arrayán, y un surtidor de forma de estrella ochavada hecho en 1502, decorado con cabezas de león.

Ermita la Miranda

La ermita de la Miranda fue un pequeño oratorio situado en Badalona, ​​en la sierra de Marina. Pertenecía a los monjes del monasterio de San Jerónimo de la Murtra. Hoy sólo permanecen restos de los muros de pie. Situada a medio camino del monasterio de San Jerónimo, en el vecindario de Canyet. El edificio se construyó a finales de siglo XVII y se le dio el nombre de ermita del Santo Cristo (en otros documentos llamada de San Jerónimo), si bien todo el mundo la llamó siempre la Miranda, para que desde allí había buena vista. Desde 1784 sustituyó la ermita de San Onofre como lugar de celebración y bendición durante la fiesta de la Santa Cruz, celebrada cada año el 3 de mayo por parte de la comunidad de monjes jerónimos. La razón no fue otra que la edad avanzada de algunos ellos, que hacía muy difícil su ascenso hasta San Onofre, que corona una de las montañas de la sierra. Durante la quema de monasterios de 1835, los monjes observaron desde la Miranda el humo del fuego de iglesias y conventos de Barcelona, ​​y controlaban los caminos de acceso al monasterio. Sin embargo, poco después fueron expulsados ​​del cenobio. A principios de siglo XX era un lugar muy conocido para hacer meriendas y excursiones en verano, porque, además, disponía de un porche y un pozo. Sin embargo, la ermita fue destruida por un incendio en 1936, sólo quedaron en pie las cuatro paredes. Durante la década de 2010 se han hecho trabajos de limpieza y clasificación de material localizado en algunas excavaciones. restos arqueológicos Alrededor de la ermita se han encontrado restos arqueológicos, principalmente una habitación o depósito de época romana, si bien también se han localizado algunos restos de cerámica ibérica

Cruz

Aquí nos encontramos con la cruz que separa los pueblos de Santa Coloma y Badalona, por aquí hacemos una derecha para bajar al acueducto de la casa del alemán.

Aqüeducte de Ca l'Alemany

Entre la masía y el monasterio de San Jerónimo de la Murtra está el acueducto de ca del Alemán. Fue construido probablemente en el siglo XIX o principios del siglo XX. Es una estructura hecha de piedra de seis arcos realizados en ladrillo. A través de una tubería enterrada se transportaba el agua desde la mina de ca del Alemán hasta una caseta, hoy en ruinas, desde donde se distribuía al resto de la masía. El Acueducto Ca l'Alemany, está situado bajo la colina de Montigalà, entre el Monasterio de San Jerónimo de la Murtra y la masía de Ca l'Alemany, hoy en día totalmente en ruinas. Este Acueducto llevaba el agua a la masía de Ca El Alemán, un canalón subterránea la llevaba a una pequeña caseta de distribución que estaba mas elevada que la masía, desde allí salía otra canalón hasta la Masía y su gran Bassa El Acueducto, actualmente conserva la estructura de seis arcos de piedra, donde hace el terreno una pequeña hondonada. Tenemos que tener en cuenta que ahora todo se baldío, y hace más de 100 años atrás, debería estar todo cultivado, podría ser que hubieran viñedos para aquella época ...

Final de la ruta

Tras 13 KM y una divertida mañana con buena compañia, llegamos al final de la ruta donde habíamos empezado unas horas antes, sin saber toda la historia y aventura que nos esperaba.