Serrat Voltor

En el extremo oriental de la Serra del Verd, encontramos un espectacular mirador, el Serrat Voltor, desde el que tendremos una preciosas vistas de la Serra del Verd en su totalidad, así como del Pedraforca y la cara Sur de la Serra del Cadí.

Intentando buscar algo de nieve, pero no muy lejos de casa, decidimos acercarnos a la Serra del Verd para ascender al Serrat Voltor, pero en lugar de hacerlo por las clásicas rutas de la cara Norte, esta vez lo haríamos por la cara Sur.

Para la ocasión me iban a acompañar Fernando y Arnau, así que quedamos temprano para ir en busca del aparcamiento de Conjunt Pelontològic de Fumanya, donde se encontraron restos de dinosaurios en unas antiguas minas, allí encontramos un centro de interpretación, donde nos dan información sobre el yacimiento y también podemos realizar visitas guiadas en vagoneta por las minas.

Desde el aparcamiento cogemos un ancho camino que nos lleva por encima de la cantera en suave pero constante ascenso hasta realizar un giro que nos adentra en un frondoso bosque, momento en el que la inclinación aumenta.

El sendero va siguiendo las marcas de un PR mientras se alternan tramos bajo árboles con zonas abiertas que nos regalan unas vistas brutales hacia Berga y si nos giramos, hacia el cordal rocoso de la Serra d'Ensija, por la que transitaremos en un rato.

Continuamos el ascenso por este bonito sendero, en el que nos encontramos con algunos restos de nieve, y que poco a poco nos irá llevando hasta el Pla Ensija, donde nos desviaremos para subir nuestro primer objetivo del día, el Serrat Voltor.

Aquí ya tenemos bien a la vista la cima del Serrat Voltor, así que nos dirigimos hacia él por una planicie moteada de abetos y nieve que nos permite avanzar rápido hasta adentrarnos en el bosque que nos lleva en busca de una canal y varias trepadas que nos hacen ganar el cordal que nos ha de llevar hasta hoyar la cima del Serrat Voltor.

Desde aquí las vistas son brutales, teniendo como principales protagonistas el Pedraforca, la Serra del Cadí y la Serra d'Ensija, sin olvidarnos del Montseny, La Mola o Montserrat, e incluso el Mediterráneo, todo un deleite para la vista.

Tras un rato en la cima emprendemos el descenso hacia el Pla d'Ensija, no sin antes realizar una parada técnica para comer alguna cosilla y calentarnos con un café con leche o una infusión, todo a gusto del consumidor.

Una vez con el cuerpo caliente nos vamos en busca de la cima de la Creu de Ferro, que ganaremos por una pala nevada con una inclinación no excesivamente dura pero sí muy sostenida donde tendremos que batallar con el hielo que aflora en algunos puntos, pero que con cuidado no nos ha de obligar a poner los pinchos.

De nuevo, las vistas son brutales, con el imponente Pedraforca llevándose todo el protagonismo pero sin olvidarnos de la cercana Tosa d'Alp, que tantas veces hemos subido, así como la zona del Port del Compte, Montserrat y La Mola, nuestra montaña fetiche.

Continuamos recorriendo el cordal de la Serra d'Ensija, ahora para ir en busca del Collet dels Rasos d'Ensija, para nuevamente ascender e ir en busca de la cima del Pla de les Tores, un mirador brutal del Cap de la Gallina Pelada, donde nos quedamos un buen rato mirando su vertiginoso descenso por la vertiente Oeste, donde discutimos con Fer si será posible acceder a ella por esa canal, así que de cara al invierno que viene nos tocará investigar a ver si es posible.

Ya con el cordal recorrido desandamos nuestros pasos hasta el Collet dels Rasos d'Ensija, donde empezaremos a descender por el Torrent de les Pedregoses, con un buen grueso de nieve, así que valoramos si ponernos o no los crampones, pero finalmente, al estar la nieve tan trasformada no fue necesario calzarlos, siendo un descenso muy cómodo, y quitado algún rincón puntual donde encontrábamos alguna placa de nieve dura, no presentaba mayor complicación.

Conforme descendemos la nieve va desapareciendo, facilitándonos mucho el avance hasta dar con el Pla de la Creu de Fumanya, donde cruza la carretera. En este punto, en lugar de avanzar por ella, decidimos seguir por una pista que avanza paralela y que nos permite contemplar la Casa de la Creu de Fumanya, poco antes de volver a la carretera, y tras pocos metros, retornar al coche y dar por finalizada la ruta.

De nuevo, las rutas por el Pre-Pirineo de Barcelona no defraudan, y es que todo el entorno que rodea el Pedraforca es espectacular y acostumbra a no estar masificado, ya que casi todo el mundo se acerca al mismo y deja el resto de montañas más solitarias y disfrutonas.

A continuación os hago un pequeño resumen de los números de la ruta:

Tipo de ruta: Circular
Dificultad técnica: Media
Dificultad física: Fácil
Distancia: 11,88 Km
Punto más alto: 2.297m
Punto más bajo: 1.547 m
Desnivel positivo: 985 m
Desnivel negativo: 985 m
Desnivel acumulado: 1.970 m
Cimas ascendidas: 3
Tiempo empleado: 5 horas 17 minutos
Tiempo en movimiento: 3 horas 40 minutos
Velocidad media: 2,25 Km/h
Ritmo: 26:40 min/Km

Podéis ver más detalles en la crónica de mi blog, en el enlace de abajo.