SEVARES (140) (Piloña)-PEÑA PRIEDE (615) (Circuito)

SEVARES (140) (Piloña)-PEÑA PRIEDE (615) (Circuito)

DATOS TÉCNICOS:

RECORRIDO: 12,5 k.
ALTURA MÁXIMA: 622 m.
ALTURA MÍNIMA: 140 m.
ASCENSO TOTAL: 555 m.
TIEMPO EN MOVIMIENTO: 4,15 h.
FECHA DE REALIZACIÓN: Diciembre de 2018.

SEVARES (140) es parroquia piloñesa situada en el extremo oriental del concejo, limitando con Parres por oriente y con Ponga por el mediodía. El lugar en su zona baja es atravesado por la N-634, que discurre paralela a la vía férrea y al río Piloña, donde desembocan los ríos Color y Tendi al oeste y este respectivamente de la población, y dista 9 kilómetros de Infiesto, capital del municipio. Su iglesia parroquial, bajo la advocación de San Pedro, fue construida a finales del siglo XVIII, pero sus antecedentes, según la diplomática medieval, se remontan al 1090, año en que fue donado por Elo Gutiérrez a la iglesia de Oviedo el “Monasterio de San Pedro de Sevares”, sobre cuyos restos se erigió el actual templo.

PEÑA PRIEDE (615), situada unos cinco kilómetros al sur de Sevares, es el caso típico de topónimo que suscita opiniones discordantes sobre su verdadero nombre y ubicación exacta del mismo. Tras la consulta de distintas fuentes, entre ellas la voz de lugareños, concluimos que Peña Priede es el conjunto de la inmensa masa montañosa compuesta por roca y matorral, sobre la que se levantan dos cimas, PICO LOS FOYOS (606) al norte -en esto parece haber bastante consenso- y PICO CUERVU (615) al mediodía, según alguna referencia. Por tanto, salvo criterio de mayor autoridad, seguiremos estas pautas en la descripción de la ruta.

Aparcamos el vehículo en el recinto anexo a la iglesia, donde se accede tomando el primer desvío a la derecha viniendo de Villamayor. Rumbo sur salimos del recinto y cruzamos la calle por la que, según señalización vertical, discurre la “Etapa 5 (Villamayor-Cangas de Onís) de ASTURIAS INTERIOR GR-109 y GR-105”. Tomamos la bocacalle inmediata en dirección a las afueras de la zona alta del pueblo, pasando junto a hermosas viviendas con hórreos y paneras bien conservados, alguna de ellas con su tejo protector. Ya desde los primeros compases se impone a nuestras espaldas la SIERRA DEL SUEVE (1.159), referente continuo a lo largo del itinerario.

Saliendo de la población, el track nos conduce, siempre rumbo al mediodía, por la PISTA DE PONGAYO, pista de tierra bien acondicionada, siguiendo en ascenso paulatino junto a la margen izquierda del reguero Pipón. Atravesamos bellísimos parajes de cromatismo otoñal con robles centenarios, praderías y pomaradas, más cabañas y cuadras restauradas, junto a alguna de las cuales crecen plantaciones de arándanos, a la sazón con hojas de intenso tono rojizo. Estas construcciones abundan en la zona de EL PIPÓN.

Llegamos a una primera encrucijada. A la izquierda, una pista dirección a la población de Priede (370) con bifurcación a Samalea (280). A la derecha, un caserío y explotación ganadera, PEREDA (375), según cartografía del IGN. Nosotros continuamos en ligero ascenso por la vía del medio, divisando al poniente la SIERRA DE PESQUERÍN, con los picos Torre (817) y La Cárcaba de Tebrandi (869) como cotas destacadas, más la aldea homónima (400) a los pies de la misma, nueva referencia a lo largo del recorrido.

Poco después, una segunda encrucijada. Optamos por la derecha cruzando una rústica portilla. Senda herbosa, que continúa dirección sur sorteando por su cara occidental Sienra l´Antena (441) y seguidamente Cabezu la Trana (454), pequeños cerros, pasando en ligero descenso junto a un abrevadero. Aparece ya, por primera vez al sureste, la cara norte de Peña Priede. En seguida, giro al este del camino para dar vista al COLLADO EL CABEZU (416), con diferentes cabañas, algunas asentadas sobre las faldas de Llosa Callada (445) a nuestra izquierda y algunos árboles.

Tras cruzar una portilla, en pocos minutos el camino llano nos conduce hasta dicho collado. Al noreste en bajada vemos próximo Priede (370) pueblo, por donde regresaremos. Se aprecia asimismo cómo el Cabezu, la pradería el Campu contigua al sur y peña Priede enfrente dividen las cuencas del río Tendi al este y del río Color al poniente. Nueva portilla y pasamos a la mencionada campera, con matorral en algunos tramos, y la vista puesta en el sendero más directo que subiendo desemboca en la base nororiental del pico.

El ascenso al mismo se afronta por una estrecha vereda visible y muy marcada que rodea su cara este, COVAÑIGRA. Toda esa zona suele estar muy embarrada. En los primeros pasos, antes de comenzar la subida, conviene tomar una variante a la izquierda que sortea el matorral de tojo enlodado. La cuesta es pindia, sobre todo en el tramo final, y guardar el equilibrio sin pisar fango requiere cierta destreza más apoyo en los bastones. Termina en la COLLAÍNA DE LOS PRAÍNOS (550). Tras pocos metros, el sendero gira hacia poniente para abordar cómodamente el resto de la subida desembocando en el COLLADO LOS FOYOS (600), que separa ambas cimas.

Unos pasos al norte y coronamos PICO LOS FOYOS (606), marcado con buzón, cruz y bandera de Asturias. Soberbias panorámicas por los cuatro costados. Al este, las SIERRAS DE BODES (668) y DE LA FRECHA (702) con EL CORNIÓN (2.596) en el horizonte, precedido por el majestuoso CANTU CABRONERO (1.998). Al sureste, MOTA CETÍN (1.137) seguido del CORDAL DE PONGA, donde destacan Pierzu (1.552), Zorru (1.844) y peña Ten (2.145). El sur inmediato lo ocupa el Cuervu (615) la otra cima de peña Priede. Al oeste, la ya mencionada SIERRA DE PESQUERÍN (869). Al norte, la omnipresente SIERRA DEL SUEVE (1.159), a la que siguen por el noreste el MOFRECHU (904) y SIERRA DEL CUERA (1.317).

En escasos minutos atravesamos de nuevo el collado los Foyos para acceder seguidamente al CUERVU (615), techo de Peña Priede, sin marca distintiva. Se repiten muchas de las vistas ya señaladas. Añadimos, a nuestros pies, el pico LA CUESTA (496) con los valles de los ríos Color y Tendi, que parecen confluir, separados apenas por la collada donde se ubica LA MATOSA (300), aldea piloñesa. Más al sur, el pico FRESNÉU (963) con el CUNIO (1.265) (Sierra de Tameces) de fondo, seguido al suroeste por el MAOÑO (1.439) y VÍZCARES (1.421) (Sierra de Aves).

Por el mismo itinerario regresamos hasta collado el Cabezu (416). Aquí seguimos una amplia pista a la derecha que, tras pasar junto a la cabaña de la Pipa, desciende para terminar en PRIEDE (370), pasando antes por su barrio alto conocido como la Vallina. Se trata de lugar con alguna casa blasonada, ejemplo típico de caserío tradicional, asentada sobre fértiles fincas de labrantío con pomaradas y praderías. A partir de aquí una carretera secundaria, la PI-12, de poco más de dos kilómetros, baja pasando junto a SAMALEA (280) –pueblo pintoresco con algún ejemplar de tejo- hasta Teyera, en el entronque con la N-634. Otra carretera, conocida como de la Rebollada, que discurre paralela a la nacional, nos devuelve dirección poniente al punto de partida.

Ruta no muy larga, sin dificultades técnicas, con desnivel asequible que se afronta paulatinamente, salvo en el tramo de Covañigra, donde la pendiente se acentúa, con el inconveniente de vereda estrecha embarrada. Tomando las debidas precauciones no es un obstáculo de especial problemática. La peña impone vista por su cara norte y es modesta en altitud. Pero tanto el recorrido como las panorámicas desde la cumbre sorprenden muy gratamente. Baste repasar el elenco de sierras, picos y valles referidos. Se encuentra justo en el lugar adecuado. A nosotros nos faltó quizás acertar con el momento oportuno. Nieblas lejanas obstaculizaban la contemplación de tanta belleza.