Sierra de los Guájares: subida al pico Giralda (1431 m) desde Albuñuelas en recorrido casi circular (with English versión)

El atractivo de hacer senderismo por la sierra de los Guájares y de coronar el pico Giralda, el más alto de la misma, queda ensombrecido por el hecho de que la zona fue en gran medida arrasada por el tremendo incendio que tuvo lugar en septiembre de 2022.

Dejamos el vehículo en un amplio aparcamiento en Albuñuelas. Ahí se encuentra un cartel informativo de varios senderos. Nosotros vamos a seguir durante un buen trecho el PR-A 309 “El Pozuelo”. Callejeamos por el pueblo y salimos del mismo en descenso para atravesar el río Saleres por un puente. Remontamos la otra vertiente, volviendo la vista atrás de vez en cuando para maravillarnos de la belleza paisajística del barranco que escarba el río y de la morfología de la población, acostada a lo largo del barranco. Atravesamos unos cultivos hasta la rambla del barranco de las Cabezuelas, donde llaman la atención unos apriscos horadados en las paredes de roca. Seguimos la rambla hacia arriba, un buen rato, hasta que se estrecha. Tomamos un cortafuegos, a la derecha, que nos conduce hasta el carril de la Giralda. Este punto nos ofrece una espectacular visión panorámica de todo el entorno, eclipsada por los estragos del incendio de septiembre de 2022, que se llevó para adelante gran parte de los pinares de la sierra de los Guájares. Un mirador contiene un panel que nos informa de los nombres de los diferentes picos de los alrededores que pueden verse. Ya se divisa la Giralda y hacia allí dirigimos nuestros pasos, dejando, en este punto, el PR-A 309, que toma el sentido contrario. El carril nos sitúa a los pies del pico. Ahí, tomamos un cortafuegos hasta la cumbre (1431 m).
En la cima, el vértice geodésico está coronado por una urna de metacrilato que contiene una imagen de la virgen de la Antigua y la leyenda “líbranos de las llamas”. Es triste leerla cuando todo a nuestro alrededor está quemado como consecuencia del pavoroso incendio acontecido en septiembre de 2022. El pico ofrece magníficas vistas: al este, Sierra Nevada, donde destaca, en primer plano, el pico del Caballo, y la sierra de Lújar, y, hacia el oeste, a lo lejos, la Maroma y las sierras de Tejeda y Almijara y, más cercana, la sierra de Enmedio, coronada por el Alto del Rayo y el cerro del Muerto.
Iniciamos el descenso por la arista del pico, siguiendo los hitos existentes. Pronto, la bajada se torna abrupta y muy vertical, debiendo extremar las precauciones para no resbalar y caer (si no se tiene destreza por este tipo de terrenos tan empinados, mejor bajar por donde se ha hecho la subida). Conectamos con el carril de ida en el collado del Cerro Alto. Lo seguimos en dirección contraria, un tramo. Al poco, lo dejamos para tomar una senda poco marcada a la derecha que nos conduce a un barranco. Descendemos durante varios kilómetros por el propio barranco, que se mantiene seco la mayor parte del tiempo. El barranco tiene algunos puntos de cierta dificultad: desniveles que hay que destrepar con cuidado debido a que la piedra está muy lavada y puede ocasionar resbalones. El barranco desemboca en un carril que recorre huertas de almendros y que conduce hasta el barranco de las Cabezuelas, que recorrimos a la ida y, desde ahí, desandando el camino de ida, volvemos a Albuñuelas.
En la población, nos desviamos por las callejuelas para visitar la torre defensiva del Tío Bayo, declarada BIC, de época nazarí (s. XIV), junto al lavadero homónimo, del s. XIX y aún en uso, y la iglesia parroquial de El Salvador, del s. XVIII.

English versión: The attraction of hiking through the Sierra de los Guájares and crowning the Giralda peak, the highest of it, is overshadowed by the fact that the area was largely devastated by the tremendous fire that took place in September 2022.

We left the vehicle in a large parking lot in Albuñuelas. There is an information sign of several trails. We are going to continue the PR-A 309 "El Pozuelo" for a long time. We wander through the town and leave it downhill to cross the Saleres River over a bridge. We go up the other side, looking back from time to time to marvel at the scenic beauty of the ravine that digs into the river and the morphology of the population, lying along the ravine. We cross some crops to the promenade of the Cabezuelas ravine, where some damps pierced in the rock walls attract attention. We continue the promenade upwards, for a long time, until it narrows. We take a firewall, on the right, that leads us to the Giralda lane. This point offers us a spectacular panoramic view of the entire environment, eclipsed by the ravages of the fire of September 2022, which carried out much of the pine forests of the Sierra de los Guájares. A viewpoint contains a panel that informs us of the names of the different peaks in the surroundings that can be seen. You can already see the Giralda and there we direct our steps, leaving, at this point, the PR-A 309, which takes the opposite direction. The lane places us at the foot of the peak. There, we took a firewall to the summit (1431 m).

At the top, the geodesic vertex is crowned by a methacrylate urn that contains an image of the Virgin of Antigua and the legend "free us from the flames." It is sad to read it when everything around us is burned as a result of the terrifying fire that occurred in September 2022. The peak offers magnificent views: to the east, Sierra Nevada, where stands out, in the foreground, the Pico del Caballo, and the Sierra de Lújar, and, to the west, in the distance, the Maroma and the Sierras de Tejeda and Almijara and, closer, the Sierra de Enmedio, crowned by the Alto del Rayo and the Cerro

We begin the descent by the edge of the peak, following the existing milestones. Soon, the descent becomes abrupt and very vertical, and precautions must be taken not to slip and fall (if you do not have dexterity because of this type of steep terrain, it is better to go down where the climb has been made). We connect with the one-way lane on the Cerro Alto hill. We follow it in the opposite direction, a stretch. Shortly after, we leave it to take a slightly marked path to the right that leads us to a ravine. We descend for several kilometers through the ravine itself, which stays dry most of the time. The ravine has some points of some difficulty: unevenness that must be carefully striped because the stone is very washed and can cause slipping. The ravine flows into a lane that runs through almond orchards and leads to the Cabezuelas ravine, which we traveled on the way and, from there, going down the way out, we return to Albuñuelas.

In the town, we deviate through the streets to visit the defensive tower of Tío Bayo, declared BIC, from the Nasrid period (s. XIV), next to the homonymous laundry, from s. XIX and still in use, and the parish church of "El Salvador", of the s. XVIII.