SL-C 122 Puig del Far (100 Cims FEEC)

Esta amplición de la lista dels 100 Cims de la FEEC nos está descubriendo auténticas joyas de nuestro territorio, hoy hemos disfrutado mucho recorriendo esta comarca (Osona) tan preciosa con los grandes muros alrededor de Vilanova de Sau, un Cim el del Puig del Far espectacular, con unas vistas inolvidables y con una caída que más vale no arrimarse mucho al borde, nos ha encantado la ruta, y para subir a la cima hemos seguido el SL-C 122, que nos ha llevado por parajes extraordinarios, unos rincones que tendréis que descubrir vosotros mismos, seguramente esta no es la mejor época para hacer esta ruta (en verano), en otoño o en primavera debe ser aún más increíble, en definitiva seguimos sumando experiencias y nos vamos con muy buen sabor de boca, después de la ruta nos hemos acercado al Pantà de Sau, que aunque no tiene mucha agua siempre es espectacular.
A continuación os dejo la descripción de la ruta copiada del folleto de la página de la diputación de Barcelona:

https://view.gooltracking.com/dibaparcs/routes/view/2943?&lang=es_ES

Los bosques y las panorámicas sobre los riscos de Vilanova son los protagonistas de este itinerario circular que recorre rincones y miradores donde sólo se llega a pie. Los riscos rojizos que coronan el Espacio Natural de las Guilleries-Savassona son uno de los elementos de su paisaje más característicos. Mirados desde abajo, sus paredes nos parecen inaccesibles y los bosques que cubren sus faldas son tan densos y agrestes que sólo los antiguos bandidos atrevían a adentrarse.

El itinerario utiliza dos de los pocos senderos que actualmente permiten acceder a lo alto de los riscos de Vilanova de Sau. Como auténticos bandoleros tendremos que hacer piernas para vencer un desnivel considerable, pero el esfuerzo se verá compensado por la inmensidad de las vistas desde el mirador del Puig del Far.

A medio itinerario se encuentran las ruinas de la antigua ermita de Santa Margarita de Ardola, que fue abandonada durante años y que recientemente ha sido recuperada.

Del área recreativa Els Vernets de Ca la Marta hasta Santa Maria

Salga por el sendero paralelo al torrente de la Polleda y tome la pista asfaltada hasta Vilanova de Sau, donde la iglesia de Santa Maria le dará la bienvenida. Sus muros de piedra rojiza muestran las fases constructivas: el cuerpo central, del siglo XI; la capilla lateral norte, del siglo XVI; y la portalada neoclásica, el sobrealzamiento de la nave del ábside y el campanario, de 1870.

De Santa Maria hasta la llanura de Santa Margarida y el estanque de Sabaters

Salga del pueblo por el sendero coincidente con los GR 2 y GR 151 y a pocos metros tenga cuidado cuando cruce la carretera N-141d. La ascensión comienza por una pista entre bancales de cultivo que en primavera se encuentran salpicados de flores silvestres y mariposas.
Sobre la panorámica de los campos se alzan los riscos de Vilanova con un color rojizo; este color siempre ha singularizado la procedencia de los habitantes de Vilanova de Sau, conocidos como «camaroigs» (patirrojo en español) por los pueblos vecinos.
Poco después, el camino entra en un bosque densamente poblado por robles, encinas, castaños, pinos rojos y pinos marinos. Las piñas pequeñas del pino rojo son las favoritas de las ardillas, a las que podemos sorprender si nos mantenemos en silencio.
De repente, el sombrío y retorcido sendero de subida desemboca en una pista amplia y soleada. A nuestros pies ya no encontraremos arena rojiza, sino el estrato de gres que yace encima de ésta. Puede celebrarlo, ya está en lo alto del risco. A poca distancia, a mano izquierda, encontrará el estanque de Sabaters.

De la llanura de Santa Margarida y el estanque de Sabaters hasta Santa Margarida d’Ardola

Siga la pista de la derecha y poco después entrará en un bosque denso de encinas, robles y pinos rojos que guarda los restos de la ermita románica de Santa Margarida d’Ardola, documentada por primera vez en el año 1064. Según la historia oral, en 1935 el muro orientado a mediodía se hundió, y más tarde, todo el tejado. Un año después, fue incendiada.

De Santa Margarida d’Ardola hasta el Puig del Far

El último tramo de subida recorre un sendero entre grandes bloques de gres y grutas que debieron servir de buen refugio para los antiguos bandoleros de Vilanova de Sau. Mucho antes, protegido por estas grutas, se asentó un poblado ibérico, probablemente llamado Ardola.
Después de una pequeña ascensión entre diferentes refugios de roca, encontrará el mirador del Puig del Far, una espectacular atalaya de casi 360 grados a 832 metros de altitud. El mirador no tiene barandillas, así que no se acerque demasiado al acantilado.

Desde el Puig del Far hasta Els Vernets de Ca la Marta

Ahora debe bajar un pequeño sendero hasta el estanque de Santa Margarida . Un bonito rincón para sentarse y sentir croar a las ranitas meridionales y las ranas verdes.
Más adelante encontrará la pista del GR 151, que pronto dejará para coger el sendero del Cargol, que era el camino antiguo para ir a Santa Margarida d’Ardola desde Vilanova de Sau y que le conducirá a la Vileta Grossa. 8
Al final de la pista asfaltada debe cruzar de nuevo la carretera N-141d y poco después encontrará el sendero de vuelta al área de esparcimiento.