SL-MU 20 Sendero de Punta de Aguilones (Cartagena)

Toda el área de Escombreras, Alumbres, Portmán, La Unión, Llano del Beal, etc. tiene un ambiente tan repulsivo como fascinante. El aspecto "chernobilesco" de Escombreras, con ese hedor a gas y a petróleo; el estado de desolación que los estragos de la minería ha dejado en estos parajes; la baterías de costa desmanteladas, pero aún lo suficientemente en pie como para dar testimonio de un pasado reciente muy doloroso; una naturaleza exuberante arrasada por la explotación desmedida y que se muestra derrotada y casi moribunda; ruinas por doquier; todo ello me provoca una mezcla de rechazo y atracción simultáneas.

Aquí, en esta zona cero, hay un buen número de senderos homologados, desde los PR-MU 1, 2, 3 y 88 hasta el GR 92. El más reciente es el SL-MU 20, y es mi autorregalo de Reyes, porque después de este corto y fácil trayecto voy a visitar (por fin) la Iglesia de Escombreras y su cementerio, ambos abandonados y en ruinas. Pero eso lo cuento en la siguiente ruta.

Ésta nos asciende, siguiendo las marcas blanquiverdes, a las baterías de Aguilones y Conejos. En realidad todo el recorrido es coincidente con el GR 92, aunque no encontraremos ninguna señal hasta arriba del todo.

El itinerario es de lo más sencillo: aparcamos en una amplia explanada y tomamos la carretera que va ascendiendo en zigzag. No hay posibilidad de perderse.

A medida que nos elevamos ganamos amplitud de vistas. Escombreras es un panorama casi omnipresente, es decir, ineludible. La línea de costa que hacia el oeste va del Castillo de San Julián, Algameca, Roldán, Muela y Cabo Tiñoso, siempre está manchada por la Dársena de Escombreras, que ya casi toca la Isla de Escombreras.

Al terminar el asfalto, después de una humilde área recreativa, el camino es de tierra y enseguida llegamos al desvío que, a la derecha, nos introduce en la Batería de Aguilones. Aquí podremos deambular a nuestro sabor. Todas las estancias están vandalizadas y son accesibles. Podremos satisfacer nuestra curiosidad adentrándonos aquí y allá, y por supuesto subiendo a los puestos donde estaban los cañones, con el Mediterráneo a nuestros pies.

La zona inferior de esta batería es de carácter más recreativo. Encuentro unas duchas y baños, una pequeña piscina junto a un bar, en cuyo exterior el suelo tiene unos interesantes mosaicos que representan emblemas nacionales. Otro mosaico en una pared encima del bar muestra una águila negra y una Cruz de Santiago.

Es interesante recrearse y pasear por aquí. Esta batería es mayor que la de Conejos, a la que nos encaminamos ya. Para ello habremos de atravesar un pasillo artificial tallado a una roca y que ofrece a la vista un brutal tajo. Al salir, la panorámica a ambos lados es sobrecogedora: a la derecha, el mar; a la izquierda la terrorífica visión de Escombreras, cuya pestilencia llega hasta aquí. Allá abajo distinguimos también la Iglesia de Escombreras, absolutamente fuera de lugar.

En la Batería de Conejos veremos una caseta de TVE, edificaciones de uso militar, puestos de defensa y varios huecos de cañones. Al pasar el primer edificio el camino hace un fuerte giro a la derecha. Justo al inicio de esa curva empieza la Senda de los Carabineros, por donde va el GR 92. La sierra a la que se dirige es la de la Fausilla, escarpada donde las haya. En realidad todo nuestro recorrido está dentro de esta sierra, pero la moya son los picos vertiginosos que se alzan sobre el mar.

Pues bien, hace justo cuatro años, en enero de 2018, hice el GR 92, y la etapa entre Portmán y Cartagena la hice en compañía de tres buenos senderistas cartageneros que me llevaron por ese sendero, que discurre a media ladera. Hubiera sido incapaz de hacer yo solo esa etapa, dado lo escarpado de la zona, y sobre todo por el paso de la viga.

Dudo mucho que esta alma vuelva a pisar la Senda de los Carabineros en su vida, aunque sí quiero subir al vértice geodésico desde la cara interior. Ya lo contaré.

Por lo que respecta al SL, sólo queda volver por el camino de ida. La vuelta es una gozada si miras al mar, aunque la vista también se irá a Escombreras y esa fascinante estampa que ofrecen las chimeneas, torres eléctricas, tuberías, depósitos gigantes, barcos y demás.