Sobreiras do Arnego

Una magnifica ruta, con pasos preciosos y paisajes espectaculares. Vamos a observar las Sobreiras del río Arnego y subir al alto de la Pena Maior con vistas grandiosas. En gallego, la sobreira es el árbol de alcornoque, cuya corteza se utiliza para hacer corchos. Conforme vamos a recorrer los senderos, se pueden ver los árboles pelados de corteza.

Iniciamos el recorrido en el merendero del río Arnego, bueno, uno de ellos. Aquí cruzamos un puentecito de piedra y empezamos a seguir el río por una pista forestal. Cruzamos la carretera y seguimos, atentos a los giros. Seguimos subiendo hasta llegar al pueblo de A Feira Nova. Lo cruzamos y seguimos subiendo. Aquí es donde vamos a encontrar un obstáculo importante que hay que tener en cuenta.

Llegados a una construcción solitaria en el bosque, giramos a la derecha, y aquí es donde hay que prestar atención: la pista gira a la izquierda, de vuelta a la construcción, pero es preciso seguir subiendo para llegar al campo de arriba. La subida no presenta dificultad, pero es en el campo donde vamos a encontrar el obstáculo: la senda esta cubierta de maleza, las zarzas. Dependiendo del tiempo de año, habrá más o menos maleza, a finales de agosto, y sin que nadie la desbroce, es bastante abundante, pero aun así se puede pasar. Atentos a cada paso y levantando bien los pies, seguimos atravesando la maleza, pero solo por unos metros. Aproximadamente a la altura de los eucaliptos, acaba la zarza y empieza el toxo, pero ya es mucho más fácil de cruzar. Después de una buena espesura de toxo (paso por la izquierda), por fin llegamos a una senda despejada.

Bajamos un poco y tomamos la carretera en subida. Pronto, a la izquierda aparecerá el desvío a la Pena Maior: vamos a subir y volver. Subimos por el sendero hasta llegar al pico señalado. Allí observamos vistas impresionantes a todos el parque natural.

Ahora vamos a bajar. Volvemos a la carretera y seguimos varias sendas y pistas en bajada. Cerca del río vamos los carteles que señalan la ruta Goza da Ulla, las vamos a seguir por un rato. Cruzamos un puentecito de madera y seguimos bordeando el río, salimos a una carretera y cruzamos el río. En el puente, atentos a la izquierda, donde se ve los restos del pilar del antiguo puente. Alcanzamos un merendero, y aquí hay que prestar atención: el camino asfaltado es el que vamos a tomar más adelante, pero ahora podemos seguir por un sendero a la derecha, pero hay que tener en cuenta que llegados al final de dicho sendero, habrá que subir de vuelta a la carretera atravesando un campo privado y abriendo y cerrando la puerta de la entrada. No tuvimos ningún problema para hacerlo, pero si no se quiere arriesgar, se puede seguir la pista asfaltada desde el merendero.

Una magnifica ruta, con pasos preciosos y paisajes espectaculares. Vamos a observar las Sobreiras del río Arnego y subir al alto de la Pena Maior con vistas grandiosas. En gallego, la sobreira es el árbol de alcornoque, cuya corteza se utiliza para hacer corchos. Conforme vamos a recorrer los senderos, se pueden ver los árboles pelados de corteza.

Iniciamos el recorrido en el merendero del río Arnego, bueno, uno de ellos. Aquí cruzamos un puentecito de piedra y empezamos a seguir el río por una pista forestal. Cruzamos la carretera y seguimos, atentos a los giros. Seguimos subiendo hasta llegar al pueblo de A Feira Nova. Lo cruzamos y seguimos subiendo. Aquí es donde vamos a encontrar un obstáculo importante que hay que tener en cuenta.

Llegados a una construcción solitaria en el bosque, giramos a la derecha, y aquí es donde hay que prestar atención: la pista gira a la izquierda, de vuelta a la construcción, pero es preciso seguir subiendo para llegar al campo de arriba. La subida no presenta dificultad, pero es en el campo donde vamos a encontrar el obstáculo: la senda esta cubierta de maleza, las zarzas. Dependiendo del tiempo de año, habrá más o menos maleza, a finales de agosto, y sin que nadie la desbroce, es bastante abundante, pero aun así se puede pasar. Atentos a cada paso y levantando bien los pies, seguimos atravesando la maleza, pero solo por unos metros. Aproximadamente a la altura de los eucaliptos, acaba la zarza y empieza el toxo, pero ya es mucho más fácil de cruzar. Después de una buena espesura de toxo (paso por la izquierda), por fin llegamos a una senda despejada.

Nota: si el paso está cerrado completamente, se puede volver a la carretera y subir sobre una pista asfaltada.

Bajamos un poco y tomamos la carretera en subida. Pronto, a la izquierda aparecerá el desvío a la Pena Maior: vamos a subir y volver. Subimos por el sendero hasta llegar al pico señalado. Allí observamos vistas impresionantes a todos el parque natural.

Ahora vamos a bajar. Volvemos a la carretera y seguimos varias sendas y pistas en bajada. Cerca del río vamos los carteles que señalan la ruta Goza da Ulla, las vamos a seguir por un rato. Cruzamos un puentecito de madera y seguimos bordeando el río, salimos a una carretera y cruzamos el río. En el puente, atentos a la izquierda, donde se ve los restos del pilar del antiguo puente. Alcanzamos un merendero, y aquí hay que prestar atención: el camino asfaltado es el que vamos a tomar más adelante, pero ahora podemos seguir por un sendero a la derecha, pero hay que tener en cuenta que llegados al final de dicho sendero, habrá que subir de vuelta a la carretera atravesando un campo privado y abriendo y cerrando la puerta de la entrada. No tuvimos ningún problema para hacerlo, pero si no se quiere arriesgar, se puede seguir la pista asfaltada desde el merendero.

Seguimos los caminos rurales hasta llegar a la iglesia de Santo André. De aquí vamos a iniciar la última subida del día, que ya se hace un poco larga. No perderse el desvío a la derecha. Llegados a una bifurcación, vamos a iniciar el descenso por la senda de la derecha. En la bajada hay bastantes zarzas, hay que tener cuidado. Casi debajo de todo tenemos la posibilidad de observar un magnifico bosque de pinos con el suelo totalmente despejado por unos metros. Seguimos bordeando el río hasta llegar a la carretera por la que hemos venido. A unos metros más alcanzamos el merendero del inicio.