Subida al pico Carbonero de los Ibores.
near Navalvillar de Ibor, Extremadura (España)
Viewed 2638 times, downloaded 40 times
Trail photos
Itinerary description
Los Ibores en Cáceres forman parte del Geoparque Villuercas-Ibores-Jara,el Carbonero con sus 1428 metros es una de los miradores naturales para este hermoso Geoparque,de hecho hay una caseta de la junta, de vigilancia contra incendios en lo alto.
La califico de moderado porque decidimos subir por la pedriza en vez de por el camino para que fuera más entretenido,aunque no es demasiado complicado.
Nos juntamos Jesús y yo con la intención de explorar algún sitio cerca de Guadalupe,lugar de culto del senderismo,desde Guadalupe fuimos dirección Navalvillar de Ibor y nos desviamos por la carretera que va a Navatrasierra,a unos 9 kilómetros en una curva cerrada antes del puerto del hospital sale una pista que va a La Calera,en un recodo donde pasa un arroyo que viene del collado de Carboneros dejamos el coche.
Aquí hay que ser respetuoso como siempre, y más sabiendo que son fincas particulares,tenemos que tratar todo como si fuera nuestro,y en cierto modo al disfrutarlo lo es.
Hay una puerta para paso de ganado a la izquierda mirando de frente, nos metemos,y hay un arroyo que lleva a una fuente y una charca llena de ranas. A partir de aquí subimos por las veredas de ganado hasta llegar a la pedriza. Decidimos afrontar directamente el Carbonero aunque podríamos haber tomado la dirección del collado. Son piedras grandes, una autopista, muy entretenida.
Vamos subiendo por dónde nuestros ojos nos dan a entender hasta llegar al pie del último risco,lo afrontamos por debajo y a la izquierda, hay una vereda de ganado y pequeñas zonas de trepe,no hay que complicarse la vida para nada,salvo que tengas ganas de escalar un poco que también se puede.
Tras hora y pico llegamos arriba, allí estaba Juanjo con su perro en la caseta,un forestal de los que tanto debemos los montañeros,encargado de la custodia de nuestros tesoros más preciados.
Juanjo nos trató como si fuéramos de su familia,de allí de Castañar de Ibor, nos deleitó con sus explicaciones de todo el horizonte que podíamos abarcar ,estabamos en la confluencia de Cáceres-Toledo-Ciudad Real y Badajoz y en días claros se puede ver Huelva y Madrid,pero hoy no era claro,tampoco está mal.
Tras un buen rato de fotos y vistas,decidimos bajar de vuelta,tras ver algunas rocas repletas de fósiles que tanto abundan en la zona, cogimos una veredita que salía al borde del camino por indicación de Juanjo,está casi perdida, pero al poco rato enganchamos la pista que baja al puerto del Hospital y ya no la dejamos,el paisaje de robles con castaños es fresco y cándido. Llegamos a una verja junto a la carretera,sin candado,ya que esta pista es propiedad de la Junta de Extremadura, para el acceso a la caseta.
La vuelta por carretera donde nos cruzamos con una hermosa víbora hocicuda que estaba expulsando algo por detrás y nos encaraba con muy malas intenciones,les hicimos unas fotillos y la sacamos de la carretera, no fuera a ser atropellada.
Finalmente llegamos al coche por la pista tras una corta pero intensa jornada que no olvidaremos.
La califico de moderado porque decidimos subir por la pedriza en vez de por el camino para que fuera más entretenido,aunque no es demasiado complicado.
Nos juntamos Jesús y yo con la intención de explorar algún sitio cerca de Guadalupe,lugar de culto del senderismo,desde Guadalupe fuimos dirección Navalvillar de Ibor y nos desviamos por la carretera que va a Navatrasierra,a unos 9 kilómetros en una curva cerrada antes del puerto del hospital sale una pista que va a La Calera,en un recodo donde pasa un arroyo que viene del collado de Carboneros dejamos el coche.
Aquí hay que ser respetuoso como siempre, y más sabiendo que son fincas particulares,tenemos que tratar todo como si fuera nuestro,y en cierto modo al disfrutarlo lo es.
Hay una puerta para paso de ganado a la izquierda mirando de frente, nos metemos,y hay un arroyo que lleva a una fuente y una charca llena de ranas. A partir de aquí subimos por las veredas de ganado hasta llegar a la pedriza. Decidimos afrontar directamente el Carbonero aunque podríamos haber tomado la dirección del collado. Son piedras grandes, una autopista, muy entretenida.
Vamos subiendo por dónde nuestros ojos nos dan a entender hasta llegar al pie del último risco,lo afrontamos por debajo y a la izquierda, hay una vereda de ganado y pequeñas zonas de trepe,no hay que complicarse la vida para nada,salvo que tengas ganas de escalar un poco que también se puede.
Tras hora y pico llegamos arriba, allí estaba Juanjo con su perro en la caseta,un forestal de los que tanto debemos los montañeros,encargado de la custodia de nuestros tesoros más preciados.
Juanjo nos trató como si fuéramos de su familia,de allí de Castañar de Ibor, nos deleitó con sus explicaciones de todo el horizonte que podíamos abarcar ,estabamos en la confluencia de Cáceres-Toledo-Ciudad Real y Badajoz y en días claros se puede ver Huelva y Madrid,pero hoy no era claro,tampoco está mal.
Tras un buen rato de fotos y vistas,decidimos bajar de vuelta,tras ver algunas rocas repletas de fósiles que tanto abundan en la zona, cogimos una veredita que salía al borde del camino por indicación de Juanjo,está casi perdida, pero al poco rato enganchamos la pista que baja al puerto del Hospital y ya no la dejamos,el paisaje de robles con castaños es fresco y cándido. Llegamos a una verja junto a la carretera,sin candado,ya que esta pista es propiedad de la Junta de Extremadura, para el acceso a la caseta.
La vuelta por carretera donde nos cruzamos con una hermosa víbora hocicuda que estaba expulsando algo por detrás y nos encaraba con muy malas intenciones,les hicimos unas fotillos y la sacamos de la carretera, no fuera a ser atropellada.
Finalmente llegamos al coche por la pista tras una corta pero intensa jornada que no olvidaremos.
Waypoints
Comments (1)
You can add a comment or review this trail
Quisiera saber si por el camino hay pinares porque iré con mis perros y no quiero que se vean afectados por las orugas.