[Circular] Subida hasta casi La Pinareja (cabeza de la Mujer Muerta)

Ruta preciosa y asequible por la ladera segoviana de la Montaña de la Mujer Muerta, concretamente la zona de La Pinareja (la cabeza). La subida se hace desde el pueblo La Losa donde pronto se entra a una zona de bosque con amplias pistas forestales. Gran parte del recorrido se hace caminando cerca de la orilla del arroyo de la Pedrona. Se puede recorrer el camino GR88 hasta su giro a la derecha (como aparece en el track) y luego bajar campo a través para cruzar el río. Otra opción más accesible es cruzar el río en el primer encuentro con él más abajo.

Una vez se abandona el GR88, la subida se va haciendo cada vez más empinada, pero nada demasiado difícil.

Cuando se alcanza el punto más alto de la pista forestal, veréis el arroyo caer desde un mar de piedras inmenso (¡la Pedrona!), coronado por la Pinareja (2.197m). Nosotres subimos por ahí y aprovechamos para tomar el almuerzo entre las rocas. El terreno supone un pequeño reto, en cada pisada hay que estar pendiente. No obstante, subimos un buen trecho solo para explorar y descubrimos que no resulta tanto peligro como pudiera parecer. De hecho, nos encontramos con una pareja de senderistas que nos dijo que la subida hasta el Peñotillo y la cabeza no era para tanto. ¡Habrá que probar la próxima vez!

La bajada, para hacerla circular, la hicimos continuando por el sendero por el que veníamos. Sin embargo, podréis ver que este se acaba en mitad del bosque y obliga o a volverse para atrás o a cruzar campo a través. Unos 500m por el bosque con algunas bajadas algo resbaladizas y alguna que otra breve zona de sortear arbustos de 1 o 2m de alto. Bastante entretenido si os gusta perderos. Finalmente se encuentra de nuevo el GR88 y una pista forestal muy recta que nos lleva directa a donde comenzamos.

• Ruta accesible hasta el mar de piedras (solo hay que aguantar un poco el desnivel).
• Las botellas de agua se pueden rellenar en los arroyos durante casi toda la ruta.
• Seguro que os encontráis algunas vacas por el camino.
• No temer demasiado a las zonas pedregosas, son más estables de lo que parecen.