Sur directa a Peña Lusa y sorpresas por la cara Norte.

Subida directa al Peña Lusa por la cara Sur. Arrancamos la ruta en la curva del Poviso, donde unos hitos nos indican el inicio de la ruta que asciende por senderos precarios entre hayas. En esta primera parte la ruta se encuentra bastante bien señalizada mediante hitos.
Poco antes de llegar a la Colladía de Lusa salimos del hayedo. Los hitos desaparecen y buscamos el mejor camino entre argomas y brezo hasta el Collado. Tras admirar el monolito situado en el Collado, bordeamos la pared sur De la Peña e ignoramos la canal por la que se asciende normalmente hasta toparnos con otra más estrecha y mucho menos transitada. Subiendo por la misma hay que trepar un par de bloques que se superan fácilmente. Existe peligro de desprendimiento de rocas si se hace en grupos grandes. La canal nos deja justo debajo de la cima de Peña Lusa.
Tras disfrutar de la cima bajamos al Collado situado inmediatamente al Este y después seguimos un cordal que sale hacia el Norte y nos acerca a la Peña del Rendijón, con su gran hendidura. Luego seguimos descendiendo en dirección Norte hasta dos hoyas. En una de ellas se encuentran las entradas a Torca Fría y al sistema Cueva Fría-Cueva del Lobo, uno de los de más desarrollo del Macizo. En la otra encontramos restos de antiguas construcciones pastoriles. Desde Peña Lusa hasta aquí no existe ningún camino. El tránsito fuera de senderos por aquí encarna cierto peligro de torcedura de tobillo para gente no habituada.
Tras tomar un Piscolabis tomamos dirección Noroeste siguiendo veredas de ganado hasta el Portillo de las Escalerucas. Se trata de un corte en la Peña que nos baja sin dificultad hasta el hayedo de Busturejo. Seguimos bajando el hayedo siguiendo hitos hasta salir del mismo y buscamos los postes que señalan el sendero de Pequeño Recorrido dé Busturejo. Este sendero que nos conduce hasta el alto del Cuadro entre hayedos, discurre por un antiguo camino que asciende en dirección Suroeste.
Desde el Alto del Cuadro cogemos la ruta de la Vuelta a Lunada hacia la derecha. Siguiendo las marcas blancas y azules llegamos a la carretera del Portillo de Lunada. Luego nos dirigimos al Refugio del Castro Valnera a tomar otro piscolabis y, finalmente volvemos al coche por el camino que cruza el cabañal de Lunada, situado al Sur del Refugio.