Tajo-Hoz Seca-Los huecos

De nuevo os subo una ruta mágica dentro de la Guadalajara más indómita y desconocida. Dentro del termino municipal de Checa haremos una circular donde la variación de paisajes y caminos es la norma, IBP 104. Esta ruta la hemos hecho en dos temporadas diferentes, en Verano donde el vadeo es más o menos sencillo y en invierno que es la que subimos donde los vadeos son permanentes. Mi recomendación para cuando se espera mucho agua en el Tajo (o Tejete como lo llaman en ese tramo los oriundos) es llevar zapatillas de treking para los vadeos y hacer esos 400 metros sin cambiarte de calzado, hay muchos tramos mixtos y se pierde mucho tiempo, nosotros decidimos andar en seco con los escarpines y nos hicimos daño en los pies.
Yendo en coche por la CM-2106 a la altura del km 66.800 veremos un refugio y alguna edificación, de enfrente sale una pista que es la que cogeremos con el coche hasta parar donde consideremos oportuno. Nosotros no quisimos bajar mucho por si hubiera lluvias durante el día que pudieran bloquearnos el coche.
El inicio es bastante cómodo por una pista entre pinares y vistas al alto de la campana, preludio de lo que va a ser una ruta llena de aventura. Pese a la existencia de esta pista la vegetación nos transmite sensaciones de parajes solitarios, de muy poca o casi ninguna presencia humana.
En un momento dado la pista se acaba comenzando un camino que se irá deteriorando poco a poco hasta convertirse en senda. En este tramo podremos disfrutar de nuestras primeras vistas al Tajo. Al final, ya casi a cota del río una zona de antiguos tilos nos avisa que en nada llegaremos a la hoz que tendremos que vadear y avanzar por su interior para poder cumplir con la ruta prevista.
Llegamos al vadeo, tramo de 400 metros, incluso de 1000, hasta la zona marcada como bocata en la que hay que buscarse la vida, elegir entre mojarse, trepar, apostar por un trazado o por otro, aquí cada uno debe hacerlo como más seguro se sienta. Así lo hemos hecho nosotros las dos veces y no han coincidido, las condiciones y tu estado físico-emocional te mandan por un sitio o por otro. Si destacar que es toda una aventura de soledad, de sentirte insignificante dentro de esa naturaleza tan poderosa, de inteligencia y excitación buscando el mejor paso. Nosotros las dos veces hemos tenido tendencia a progresar por el lado este del río, en la última ocasión pudios observar que había a media ladera del lado Oeste una pequeña senda.
Continuamos por la senda paralela al Tajo ya en un ambiente mucho menos hostil y más bucólico, daremos un descanso a nuestro cuerpo y sobre todo a nuestras tensiones, para llegar definitivamente al río de la Hoz Seca. Hasta aquí habremos tenido tres cambios de paisajes claramente diferenciados, y de nuevo iremos a por un cuarto cambio. Es lo magnifico de esta ruta, la tremenda variedad de vistas, paisajes y naturaleza que te hacen sentir que hacer 10 rutas en sólo una.
La Hoz seca la visitaremos en esta ocasión desde arriba, los paisajes se abrirán y nuestros ojos podrán mirar al infinito dándonos sensaciones de libertad.
La vuelta hacia el Sur la haremos por una pista cómoda y muy rápida. Nuestra primera idea era subir al alto Campana y crestear hasta el Arroyo de los Huecos. La proximidad a la noche nos hizo decidir seguir la pista hasta el propio Arroyo. En caso de subir por los altos os recomiendo bajar a la pista cuando podáis cerca de los Huecos ya que este arroyo es muy bonito y merece la pena seguirlo desde el inicio.