Taús - Roques Agudes - Les Piques (100 Cims FEEC) - l'Artic - Ermita Mare de Déu de la Guia - Els Castells - Molí dels Castells

Salimos del pequeño pero muy bonito pueblo de Taús, para realizar el Cim nº 204 en nuestra lista de los 100 Cims de la FEEC.
Comenzamos atravesando el pueblo y poco a poco vamos dejando atrás sus casas, poco después de abandonar el pueblo nos damos cuenta de que hoy va a ser una ruta solitaria, por unos parajes muy amplios, preciosos, con una sensación de soledad muy grande.
Vamos subiendo por un camino que claramente es transitado por animales ya que nos encontramos con todo tipo de huesos y pelaje, en toda la ruta de hoy tendremos presente la valla para los animales, la cruzaremos muchas veces, en este primer tramo de subida pasamos por un par de barracas en ruinas y tenemos qué usar el GPS ya que el camino no está muy claro, hoy será fundamental el uso del GPS, ya que en muchos tramos no tenemos sendero ni camino, seguimos subiendo con fuerte inclinación, los parajes son cada vez más solitarios, ya hemos perdido de vista Taús y vemos por donde hemos subido, realmente subimos por rampas muy inclinadas, nos hace esforzarnos a fondo en este tramo.
Poco después llegamos a las Roque Agudes el primer Cim del día, unas rocas muy bonitas con unas vistas impresionantes, lástima que hoy no podemos ver más lejos de lo que las nubes nos permiten ya que desde aquí normalmente se podría ver el Pedraforca, el Cadí y Port del Compte, pero hoy no nos lo permite la climatología.
Seguimos hacia un pequeño montículo que tenemos detrás y lo coronamos, ahora bajamos hacia el Pla de l'illa donde el prado verde es espectacular, ya estamos viendo nuestro gran objetivo de hoy, Les Piques, que aparece entre las nubes, seguimos subiendo pegados a las vallas de los animales, llegamos a un cruce de caminos con un poste informativo que nos dice que estamos en el Camí Vell de les Valls d'Aguilar, ya tenemos muy cerca Les Piques, solo nos queda un último esfuerzo y estaremos arriba en la cima.
Es una cima preciosa con el vértice geodésico subido a unas rocas que hacen que esté en la cima, encima de la cima, no sé si me explico, lo normal hubiera sido tener unas vistas espléndidas del Pirineo, hoy solo nos deja ver una pequeña parte pero estamos muy satisfechos de estar en este punto ya que nos sentimos privilegiados de poder hacer este tipo de rutas, hace frío, está nublado, pero muy satisfechos de conseguir una nueva cima, realmente me hubiera gustado ver todo lo que desde allí se puede ver pero no se puede luchar contra la climatología, después de disfrutar de Les Piques, iniciamos el descenso, ahora bajamos sin camino, sin sendero, cosa poco común en nosotros ya que no nos gusta mucho caminar por campo a través, es una bajada fácil, no muy inclinada, puedes ver en todo momento por dónde vas, pero tenemos que seguir el track para no desviarnos de nuestro siguiente objetivo, que no es otro que una pequeña encima que se llama l'Artic, llegamos a una cima secundaria y desde allí vemos las rocas que conforman el Cim verdadero de l'Artic, este es un punto que no es necesario visitar puesto que desde esta pequeña y secundaria cima se podría bajar hacia la pista pero nosotros queremos subir ya que nos llaman mucho la atención, de esta manera nos dirigimos hacia las rocas que conforman l'Artic, y después de un par de grimpadas fáciles llegamos al punto más alto, es una serie de rocas muy bonitas que se notan que no han estado muy transitadas, solitarias en medio de la nada, nos sentimos también muy privilegiados de estar allí, si hacéis esta ruta y queréis subir a l'Artic, deciros que tendréis que buscar el paso más oportuno, puesto que no hay ni sendero ni camino, desde aquí vemos nuestro próximo objetivo qué es la ermita de la Mare de Déu de la Guia, pero aún nos queda un rato para llegar, justo al lado de la cima bajamos por el lado contrario y tampoco tenemos ningún tipo de sendero, avanzamos entre los árboles y siguiendo el GPS, cuando lo vemos oportuno giramos hacia la izquierda para bajar campo a través entre los árboles, aquí también hay que buscar el mejor paso posible, no es complicado pero sí que nos hará poner nuestros cinco sentidos para no tener problemas, poco a poco bajaremos hasta la pista, básicamente desde Les Piques no tenemos ni sendero, ni hitos, ni referencias, tendremos que seguir el GPS, algo que en nosotros no es normal, pero que esta vez así lo hemos hecho, no es complicado pero siempre hay que poner más atención de lo normal. De esta manera llegamos a la pista, y avanzamos unos kilómetros hasta llegar al Coll de les Esglésies, que está muy cerca de la ermita de la Mare de Déu de la Guia una pequeña ermita preciosa que visitamos en su interior ya que está abierta, hasta aquí se podría llegar es coche, ya que la pista llega hasta aquí.
Después de visitar la ermita salimos de la pista y seguimos unos postes amarillos, llegamos a una balsa de agua y a partir de aquí, habrá que poner mucha atención siguiendo las marcas amarillas y los postes ya que a veces desaparecen, el sendero tampoco está muy claro, poco a poco va apareciendo Els Castells, un pueblo medio en ruinas y medio restaurado, cuesta conseguir las marcas pero vamos bajando y llegamos a Els Castells, cruzamos sus ruinas y después de la parte restaurada nos metemos otra vez en zona hervada y encharcada, llegamos a un precioso salto de agua al lado del Molí dels Castells, realmente es un salto de agua muy pequeño pero muy bonito el lugar es encantador. A partir de aquí seguimos el Cami Venll de Taús a Els Castells, las marcas amarillas siguen presentes, el sendero es muy evidente, hay momentos que el sendero está muy encharcado, en algunos puntos hay pasarelas de madera para salvar el barrizal, y hasta vacas por el sendero, cosa que nos obligó a esquivar como pudimos la vaca ya que nos la encontramos de frente y tuvimos que pasar por debajo del sendero durante unos metros ya que la vaca lógicamente invadía todo el camino.
Así de esta manera llegamos de nuevo a Taús, terminamos una ruta en la cual nos hemos tenido que emplear a fondo, no es que sea especialmente difícil, pero al haber tramos sin sendero, ni referencias, siempre cuesta más, el último tramo bastante encharcado tampoco puso fáciles las cosas, el frío, el viento, en definitiva una ruta muy completa por parajes muy solitarios y abrumadores que no olvidaremos nunca, hemos disfrutado de lo lindo.