Tenerife: Circular Mirador de Chipeque - La Crucita - Los Órganos (GR-TF 131)

Es una ruta que tanto por tramos de la misma, su duración y el desnivel acumulado que conlleva, la categorizo de Dificil. Pero si te toca un día despejado, las vistas y los paisajes son tan cambiantes, que enamora.

Una ruta para crestear por la montaña de Ayosa (donde hay panorámicas muy hermosas para ambas vertientes) y bajada desde la Crucita hasta los Órganos de la Orotava, para luego subir al Mirador de Chipeque.

La ruta empieza desde los aparcamientos en el Mirador de Chipeque. Antes de empezar, aprovechamos para ver una panorámica del Teide.
Comienza volviendo por la carretera asfaltada rumbo a la carretera general, y luego se desvía a la izquierda, por una ladera con un sendero desaparecido pero limpio de vegetación hasta llegar a un cruce de pistas en la Gollada del Pino. Se toma una pista a la izquierda hacia la montaña de Joco, y también por pista hasta llegar a la Gollada Ayesa donde se sale a la carretera. Poco después, se abandona por un sendero a la izquierda que va en continua pero suave subida. Se llega a un cruce de senderos, en el que se gira a la izquierda para llegar en 5 minutos a Roque Ayesa. En este punto, si la climatología lo permite, hay unas impresionantes panorámicas sobre el valle de Guimar y hasta Anaga se ve. Se vuelve sobre nuestros pasos y al llegar al cruce de senderos, girar a la izquierda, pasando por Gollada Los Pasos, y llegar a la cumbre de Montaña Ayosa que tiene vistas sobre el valle que aloja al Volcán de Arenas Negras y Cho Marcial. Se sigue en bajada algo resbaladiza por Roque Asebe hasta la carretera, donde se encuentra el Refugio Ayosa y Gollada Castellano. Se deja girando a la derecha por un sendero en el Corral de los Fariñas, que discurre a media ladera de la Montaña de las Cuevitas; este sendero a veces está muy perdido y hay que estar atentos. Al llegar a la Crucita, se toma el sendero a la derecha en bajada que es el sendero de peregrinación de la Virgen de Candelaria. Se pasa por Risco Blanco del Cedro, el Portillo de las Arenas, y en bajada pronunciada por los Escansaeros, Morro la Vieja, las Paredes, la Vuelta Grande, Pino la Mesita, y en el Lomo de Pero Gil llegando a un cruce en el que se coge el sendero de la derecha. Con subidas y bajadas a media ladera, una subida en Pasito Malo, Saltadero de los Matos, se atraviesan varios barranquillos, Lomo las Arquillas, Lomo Pinalete. Tras esto, el Barranco Madre del Agua, se pasas por el Portillo el Topo, luego se sube un poco en Lomo Blanco. Se continua por el Barranco de los Rosales, y al llegar al Roque de Aje hay un cruce. Se girará a la derecha por una pista llamada Vereda las Yuntas hasta llegar al cruce de Gollada del Pino. Y en este punto, se coge el sendero a la izquierda y se regresa al Mirador de Chipeque.

La ruta empieza desde los aparcamientos en el Mirador de Chipeque. Antes de empezar, aprovechamos para ver una panorámica del Teide.
Comienza volviendo por la carretera asfaltada rumbo a la carretera genera, para desviarnos a la izquierda, por una ladera con un sendero desaparecido pero limpio de vegetación hasta llegar a un cruce de pistas en la Gollada del Pino. Se toma una pista a la izquierda hacia la montaña de Joco, y también por pista hasta llegar a la Gollada Ayesa donde se sale a la carretera. Poco después, se abandona por un sendero a la izquierda que va en continua pero suave subida. Se llega a un cruce de senderos, en el que se gira a la izquierda para llegar en 5 minutos a Roque Ayesa. En este punto, si la climatología lo permite, hay unas impresionantes panorámicas sobre el valle de Guimar y hasta Anaga se ve. Se vuelve sobre nuestros pasos y al llegar al cruce de senderos, girar a la izquierda, pasando por Gollada Los Pasos, y llegar a la cumbre de Montaña Ayosa que tiene vistas sobre el valle que aloja al Volcán de Arenas Negras y Cho Marcial. Se sigue en bajada algo resbaladiza por Roque Asebe hasta la carretera, donde se encuentra el Refugio Ayosa y Gollada Castellano. Se deja girando a la derecha por un sendero en el Corral de los Fariñas, que discurre a media ladera de la Montaña de las Cuevitas; este sendero a veces está muy perdido y hay que estar atentos. Al llegar a la Crucita, se toma el sendero a la derecha en bajada que es el sendero de peregrinación de la Virgen de Candelaria. Se pasa por Risco Blanco del Cedro, el Portillo de las Arenas, y en bajada pronunciada por los Escansaeros, Morro la Vieja, las Paredes, la Vuelta Grande, Pino la Mesita, y en el Lomo de Pero Gil llegando a un cruce en el que se coge el sendero de la derecha. Con subidas y bajadas a media ladera, una subida en Pasito Malo, Saltadero de los Matos, se atraviesan varios barranquillos, Lomo las Arquillas, Lomo Pinalete. Tras esto, el Barranco Madre del Agua, se pasas por el Portillo el Topo, luego se sube un poco en Lomo Blanco. Se continua por el Barranco de los Rosales, y al llegar al Roque de Aje hay un cruce. Se girará a la derecha por una pista llamada Vereda las Yuntas hasta llegar al cruce de Gollada del Pino. Y en este punto, se coge el sendero a la izquierda y se regresa al Mirador de Chipeque.

Buena parte del recorrido de regreso es por el GR-TF 131.

Esta ruta es no es para iniciarse. En muchos puntos el sendero está bastante perdido y hay que guiarse con GPS, y los mojones que hay en el camino. Ruta con bastante desnivel, y con tramos donde el terreno no es del todo firme y zonas invadidas por la vegetación.