Torrebarrio - Peña Ubiña Pequeña (2.193 m) - Peña Ubiña (2.417 m)

Propuesta de Alba para ascender Peña Ubiña (2.417 m)! Y como siempre que nos proponen ascender a esta gran montaña, propuesta aceptada! Y junto a su hermana mayor, en nuestra idea está completar la entretenida Peña Ubiña Pequeña (2.193 m), que está tan cerca de da pena no disfrutar también de ella. Una jornada que promete espectáculo!

INICIO:

La ascensión a Peña Ubiña se puede realizar desde diversos sitios, siendo Torrebarrio (León) y Tuiza de Arriba (Asturias) las dos opciones más elegidas. En nuestro caso, por cercanía, comenzaremos la ruta desde Torrebarrio. En su plaza principal existe espacio para dejar el coche.

DESCRIPCIÓN:

Llegamos aún de noche a Torrebarrio, así que no tenemos demasiada prisa en prepararnos e iniciar la jornada. Según va amaneciendo, comenzamos la ruta dejando atrás una fuente y varios carteles informativos con información sobre la bonita zona que visitaremos.

Para afrontar el primer tramo de la ruta, debemos abandonar Torrebarrio hacia el sureste, cruzando un puente sobre el Arroyo El Abesedo y, justo después, desviándonos hacia la izquierda. Por este camino iremos abandonando el pueblo dejando la iglesia a nuestra derecha.

La idea de madrugar y comenzar al amanecer nace para evitar la aglomeración que sufre Peña Ubiña durante los fines de semana de verano. Iniciamos la subida, ya sin descanso y rumbo al Collado Ronzón, nuestro primer objetivo. Toda esta primera parte avanzará por una pista forestal en ascenso y con buenas vistas hacia el collado y hacia Peña Ubiña, que luce una cara suroeste brutal!

Superados los dos primeros kilómetros de ruta, la pista gira hacia la izquierda, hacia el norte, momento en el que tendremos que abandonarla y desviarnos hacia la derecha. El cómodo camino se convierte en un sendero algo más entretenido.

Desde Torrebarrio hasta el Collado Ronzón hay unos 800 metros de desnivel, así que no habrá momento de respiro. El estrecho sendero combinará zonas más tranquilas con zonas mucho más exigentes, incluso debiendo atravesar un par de canchales. El sendero nos irá brindando unas vistas preciosas hacia Babia!

Superados los últimos repechos, llegamos al Collado Ronzón, donde se nos abren unas vistas espectaculares hacia Asturias! El ritmo ha sido muy bueno, así que pronto estamos disfrutando de la altura ganada. Breve respiro y a por la primera cota del día, el Pico Solmicho, una modesta y olvidada cima. Normal! Menudas montañas tiene a su alrededor!

Unos 60 metros de evidente ascenso para llegar al Pico Solmicho (1.998 m), cumbre que ronda los 2.000 metros y desde la que obtendremos una bonita panorámica hacia Peña Ubiña y Peña Ubiña Pequeña. Fotos para el recuerdo!

En pocos minutos, pues seguimos queriendo evitar a la mayoría de la gente que accederá en breve a Peña Ubiña, continuamos el trazado descendiendo del Pico Solmicho hacia la Collada Solmicho. Alba es la primera, que busca su foto de portada!

Turno para Peña Ubiña Pequeña, una de esas montañas impresionantes y que, inmerecidamente, siempre estará a la sombra de su hermana mayor. La ascensión la podemos realizar por su cara oeste o por su cara este, siendo más sencilla esta última opción. Por este motivo, elegimos la cara oeste para llegar a la cima y la cara este para descender, por ser más fácil.

Iniciamos la subida a Peña Ubiña Pequeña por un claro sendero, rodeando un contrafuerte rocoso perfectamente visible. Una vez superado, nos desviamos hacia la izquierda y comenzamos la ascensión, siempre pegados al citado contrafuerte rocoso. El terreno es herboso y muy exigente! De momento, sendero claro y bien señalizado con algunos hitos (no muchos).

Superada la primera parte de la ascensión, nos topamos con una pared de roca que recorre gran parte de la montaña. Parece muy complicado subir, aunque sólo será una sensación. Nos vamos acercando a la pared, siguiendo algún hito esporádico.

Estamos cerca de la cumbre, pero debemos superar la parte más vertical, momento en el que se sucederán las trepadas. Imprescindible tener paciencia para buscar y encontrar la vía de ascensión más sencilla, bien señalizada con hitos. Será fundamental estar habituados a poner manos, superar zonas verticales y no tener miedo a pasos aéreos. Bastones a la mochila! Con atención y disfrutando muchísimo de la ascensión, vamos ganando los últimos metros!

Aún a la sombra, superamos la última trepada y llegamos a la arista cimera, donde volvemos a obtener unas vistas de escándalo hacia el norte. Últimos metros de puro disfrute recorriendo la entretenida arista!

Completada la ascensión, llegamos a Peña Ubiña Pequeña (2.193 m). Aunque sea menos montaña en cuanto a números, Peña Ubiña Pequeña nos brindará sensaciones únicas y una de las mejores vistas hacia Peña Ubiña. Aparece también Peña Cerreos, el Pico Fariñentu, el Pico de la Almagrera, La Mesa y gran parte del Macizo de Ubiña. Unas vistas espectaculares, también hacia tierras leonesas, pudiendo divisar el Pico Cirbanal, el Pico Morronegro, , Peña Orníz, el Pico Montihuero, la Sierra de Villabandín, toda la comarca de Babia y un sinfín de montañas más a nuestro alrededor.

Iniciamos al descenso de Peña Ubiña Pequeña recorriendo nuevamente la arista cimera, ahora algo más de distancia. Fotazas hacia Peña Ubiña! En pocos metros, hacia la derecha, encontraremos bien señalizado el comienzo de la bajada, que iniciaremos superando un pequeño destrepe.

Vamos bajando con cuidado y por un terreno pisado y bien señalizado. El sendero es estrecho y bastante inclinado, pero no ofrece ninguna complicación. Tan sólo otro pequeño destrepe nos obligará a poner alguna mano para mantener el equilibrio.

Finalizada la bajada, vamos girando hacia la izquierda, hacia el norte, para poner el rumbo en el Collado Ronzón, por donde tenemos que volver a pasar para comenzar el ascenso a Peña Ubiña.

Rodeamos La Carba por el oeste, superamos el vallado que existe y comenzamos el ascenso a Peña Ubiña, de momento por terreno muy inclinado y por un sendero claro y sin complicaciones.

La subida a Peña Ubiña está señalizada con marcas amarillas y blancas, pero debemos estar atentos, pues existen varias opciones para acometer distintos pasos. Con buenas vistas hacia Peña Ubiña Pequeña si nos damos la vuelta, vamos llegando a la zona entretenida de la ascensión, donde tendremos que superar una primera trepada y un bonito paso lateral. Máxima atención para caminar por un terreno de alta montaña y mucha piedra suelta!

Vamos avanzando sin mayores complicaciones, siempre disfrutando de una ascensión muy entretenida. Superamos otro precioso paso lateral y seguimos trepando, rumbo a la arista cimera que nos guiará hacia la cumbre de Peña Ubiña. Nos vamos cruzando con diferentes personas que también disfrutan de la montaña, unas subiendo y otras bajando.

Ya hemos superado más de la mitad de la ascensión. Seguimos superando trepadas, todas sencillas, muy entretenidas y con buenos agarres!

Finalizada la parte más divertida de la ascensión, llegamos a la espectacular arista cimera de Peña Ubiña, desde donde ya obtenemos una panorámica excepcional de la cumbre, hacia donde nos dirigimos!

Recorrer la arista cimera es un placer para los sentidos! 300 metros de suave y sencilla travesía por una de las zonas más espectaculares de la Cordillera Cantábrica! Disfrutamos mucho de las vistas hacia ambas vertientes! Simpático momento cuando nos encontramos con dos seguidores! Qué alegría y que buen rato de risas y diversión! Sin duda, por momentos como este, merece la pena todo el trabajo realizado. Queda pendiente una cerveza juntos! Últimos metros!

Finalmente, tras completar la arista cimera, llegamos a la cumbre de Peña Ubiña (2.417 m). A las vistas que ya hemos disfrutado durante la jornada, añadimos Peña Rueda, los Picos del Fontán y gran parte del Macizo de Ubiña, en especial la brillante línea de cumbres que divisamos hacia el norte. Momento para descansar, hacer unas cuantas fotos, disfrutar de las vistas y charlar junto con otras personas que se encuentran en la cima. Sin duda, momentos que sólo da la montaña!



Tras un buen rato disfrutando de la cumbre de Peña Ubiña, toca descender! Si en la subida tenemos que poner los cinco sentidos, en la bajada más aún. Terreno rocoso, inclinado y con zonas de mucha piedra suelta. Bajamos por la misma vía de ascenso, superando la arista cimera y perdiendo altura hacia el Collado Ronzón. Tenemos que superar los distintos destrepes y pasos laterales, con sumo cuidado y disfrutando mucho de la bajada y de las vistas que tenemos hacia Peña Ubiña Pequeña. Alba está disfrutando muchísimo!

El terreno va suavizando y sólo nos queda superar los últimos metros para llegar al Collado Ronzón. No nos detenemos demasiado, pues ya está casi todo hecho! Seguimos bajando hacia Torrebarrio!

Buenas conversaciones, consejos y momentos divertidos para ir desandando todo el camino, primero por el tramo de sendero y luego por la pista forestal hacia el pueblo.

Finalmente, tras completar toda la bajada, llegamos a Torrebarrio, lugar en el que arrancamos la jornada y donde daremos por concluida la ruta.

CONCLUSIÓN:

Subir Peña Ubiña (2.417 m) es sinónimo de puro disfrute! Cuarta vez que llegamos a esta emblemática cumbre y seguro que no será la última. Siempre es un placer disfrutar de una de las montañas más espectaculares de la Cordillera Cantábrica, y si le sumas la ascensión a Peña Ubiña Pequeña (2.193 m), pues te sale una jornada para enmarcar. Eso sí, imprescindible estar en forma, pues el desnivel a superar es significativo, estar habituado a terrenos de alta montaña, a pasos aéreos y a poner manos, pues ambas cumbres tendrán zonas tan entretenidas como delicadas. Gran compañía la de Alba y una ruta de esas que no se olvidan!

MÁS INFORMACIÓN:

Torrebarrio - Peña Ubiña Pequeña (2.193 m) - Peña Ubiña (2.417 m)

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Rubén Wanderlust (www.rubenwanderlust.com)