Torruella de Aragón, Ermita Virgen de los Baños, Abenozas. Circular

Hermosa ruta circular por los nucleos despoblados de Torruella de Aragón y Abenozas. Tan solo queda alguna casa en Abenozas de Abajo donde se reside.

La ruta comienza en la misma entrada de Torruella de Aragón, un camino forestal viejo parte a mano derecha y lo seguiremos, manteniendo la altura sobre el barranco de La Ribera que mas arriba lo llaman La Polvorosa. El lugar es solitario, idílico a mi gusto ya que el barranco es profundísimo y los verdes pinares son agradables a la vista además de las enormes panorámicas. Muy a lo lejos se divisa la silueta del Castillo de Fantova y también el montículo donde se sitúa Erdao.

A un km. de distancia encontramos unas rocas que cortarían el supuesto paso a vehículos. No obstante, esta vieja pista se encuentra intransitable si bien es genial para el senderismo ya que no está todavía invadida de maleza.

Encontramos un cruce de pistas y tomamos la de la izquierda, que sube con relativa pendiente por una zona mas erosionada muy vistosa, hasta alcanzar unos campos de labor que se han "comido" la pista. Por suerte han dejado el paso suficiente y me acerco a una caseta qeu tiene el tejado en buen estado y está abierta, lo cual serviría de perfecto refugio en caso de incidencias climatológicas o de otro tipo.

Sigo la marcha encontrando de nuevo el camino, otra caseta y ya se vira al Oeste para. por pista mucho mas arreglada, encarar el recto tramo hasta la hermosa ermita de la Virgen de los Baños.

Con sorpresa encuentro un grupo de cuatro personas, dos de las cuales son vecinas de mi barrio y que han venido a ver a la virgen ya que es el día de su romería. ¡Vaya sorpresa!

Vistito el interior, con esa suerte que hoy no esperaba, y continúo acompañado de este grupo hasta Abenozas, despoblado pero con una iglesia muy bonita aún en pié y en cuya fachada existe la fecha tallada en un sillar del año 1620.

Continúo a visitar Abenozas de abajo donde mis vecinas tienen la casa familiar, y luego de pasar junto a una carrasca hermosísima, alcanzo Torruella de Aragón, completamente abandonado pero de una situación sobre un acantilado del valle que es toda una sorpresa. Me subo a una prominente roca y desde alí fotografío el núcleo ruinoso y la hermosa iglasia semi hundida (La torre se conserva entera).

Un buen lugar para andar, evitando el verano porque aquí debe picar el sol.

NOTA: La pista de acceso, de 5,4 km desde la carretera de Centenera, es apta para vehículos altos o todo terreno, mi coche un C-4 picasso, sin problemas con cuidado ya que es pedregosa y tiene algún tramo empinado.