Travesía: Otsaurte -cima Añabaso- túnel de San Adrian- cima Aizkorri- Arantzazu
near Otsaurte, País Vasco (España)
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Trail photos
Itinerary description
Comenzamos en el parking de Otzaurte junto a la Venta de Otzaurte y a la Iglesia de Andra Mari.
De allí sale una pista cementada en continuo y suave ascenso entre un bonito bosque de hayas.
En varias ocasiones entramos en sendas por el bosque, monte arriba, atajando. Pasamos por el área de picnic de Beunde. Dejamos definitivamente la pista cementada y llegamos a una cima menor: el Anabaso con un vértice geodésico y los restos de lo que fue un buzón.
Seguimos por una zona de puestos de paso de la paloma y por un refugio de cazadores. Continuamos, y llegamos a la antigua casa de los Mikeletes, hoy abandonada, la bordeamos dejándola a nuestra izquierda. Ya vemos a lo lejos el túnel de San Adrián. Llegamos a él, un atractivo túnel excavado en la montaña y que guarda en su interior una sorpresa, la Ermita de San Adrián en un bonito enclave, una cueva que atravesamos para salir al punto de partida para diferentes rutas: el Aratz, las campas de Urbia, el Aizkorri..., Este último es nuestro objetivo.
Encaramos la subida de fuerte pendiente hacia él, por el calvario, camino karstico entre hayas, bonito pero no muy cómodo y un tanto resbaladizo por la cantidad de hojas de hayas caídas.
El camino cada vez es más pedregoso, un poco más de esfuerzo y llegamos a las tres Cruces de hierro medio derruidas del calvario, y de ahí a la cima, antes, un pequeño refugio, y la Ermita de Santo Cristo, unos pasos más, y en la cima. En ella una gran cruz y como buzón un hacha. Preciosas vistas.
El día hoy estaba ventoso, así que después de contemplar la belleza del paisaje ante nuestros ojos, hemos comenzado la bajada por la senda karstica que discurre paralela y debajo de todo el cresterío cimero.
La bajada al igual que la subida es durilla, además del desnivel, el terreno entre piedras no es nada cómodo.
Llegamos a un conjunto de edificaciones de cabañas y bordas, ya estamos abajo, seguimos por una cómoda pista, ya por las campas de Urbia, rodeados por preciosas montañas.
Llegamos a la fonda de Urbia, hoy cerrada, toca bokata.
Después de recuperar fuerzas, seguimos hacia la Iglesia de Urbia-Baselisa, de la que sale un bonito sendero que entre un espléndido bosque de hayas nos lleva hasta Arantzatzu, pequeño y bonito pueblo dónde está el Santuario de Arantzatzu en cuyas proximidades nos espera nuestro bus.
Preciosa y muy recomendable ruta.
El relive de la ruta en el siguiente enlace:
https://www.relive.cc/view/vXvLP1oY97v
Información de Mendikat:
Aunque no es la cima más elevada es la más popular y todo el macizo lleva su nombre: Aizkorri. La fama le viene de la ermita situada en su rocosa atalaya sobre la que se extienden las campas de Urbia y Oltza que aglutinan varias majadas donde pace el ganado. También se encuentra junto a la ermita un refugio montañero. La vertiente N de la montaña es vertiginosa, y dibuja algunas canales que permiten ciertas ascensiones invernales de limitado interés.
Waypoints
Paso canadiense. Pista de cemento.
Área recreativa de Beunde.
Sitio para pernoctar en plena sierra de Aizkorri. Mesas de picnic y un refugio libre techado con mesa y zona para hacer fuego. Había fuente, pero está anulada sin grifo. Perfecto para acometer de buena mañana andadas por la sierra.
Atajo senda derecha.
Sendero lateral izquierda.
Túnel de San Adrián.
Este paso ha tenido una trascendencia histórica tremenda como vía de comunicación entre Gipuzkoa y la Llanada Alavesa. Los vestigios de la calzada medieval que atraviesa el túnel ponen de manifiesto esta importancia. El camino de Santiago francés tenía paso por la peña de San Adrián y fue recorrido desde el siglo XI, pero de forma intensa a partir del XIII. Un refugio de la federación de montaña (denominado Mikeletes) se encuentra en el camino al paso de San Adrián. Pasado el túnel a la izquierda de la calzada se halla la fuente de Lizarrate (1030 m), donde arranca el camino a otra concurrida montaña: Aratz (1443 m).
Ermita del Santo Cristo.
La ermita de Santo Cristo de Aizkorri debe su nombre al crucifijo que allí se veneraba y que se consideraba milagroso, pues bien fuese llevado a Zegama o Araia, al final siempre aparecía en la ermita de la encumbrada montaña de Aizkorri que domina todo la tierra vasca. El diccionario de Madoz ya nos habla de esta circunstancia:
Paso canadiense, pueblo, y Santuario de Arantzatzu.
El santuario de Nuestra Señora de Aránzazu es un santuario católico mariano situado en el municipio guipuzcoano de Oñate en el País Vasco en España, donde se venera a la Virgen de Aránzazu, patrona de esta provincia, conmemorando la leyenda de su aparición en 1468. Según la leyenda, a un pastor llamado Rodrigo de Balzategi se le apareció la Virgen sobre un espino y éste, asombrado, le preguntó: "Arantzan zu?" (¿Tú en un espino?). Durante los siguiente siglos los frailes franciscanos hicieron de Arantzazu un lugar de devoción y peregrinación, y un exponente del arte y la cultura. El Santuario de Arantzazu, colgado sobre barrancos y edificado sobre roquedales en una zona agreste y natural, en el término municipal de Oñati, sobrevivió en su larga existencia a tres incendios importantes (1553, 1622 y 1834), teniendo que ser reedificado otras tantas veces. No obstante, en 1951, en lugar de seguir acometiéndose las continuas tareas de reforma parcial y ampliación, se decidió hacer una basílica nueva que fuese verdaderamente solemne por su dimensión y empaque, pero sobre todo que se expresase en un lenguaje artístico moderno, para lo cual se convocó un concurso de ideas. El proyecto ganador para la realización de la nueva iglesia fue el de Francisco Javier Sáenz de Oiza y Luis Laorga, aunque la huella del escultor Jorge Oteiza, autor de las esculturas de los 14 apóstoles de la fachada, está presente en todo el conjunto. Las puertas de hierro son de Eduardo Chillida y las pinturas de Nestor Basterretxea y Lucio Muñoz.
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