TRAVESÍA POR LA RIBEIRA SACRA: SANTUARIO DE CADEIRAS - MIRADORES - PETROGLIFOS - MOLINOS - EMBARCADERO OS CHANCÍS. 03/07/21

Esta estupenda travesía, propuesta por el presidente Miguel de la Cal González del club Peña Trevinca Barco, en un principio estaba prevista para el día 3 de octubre de 2020 y que no se pudo realizar debido a la pandemia (Covid – 19). Finalmente, la realizamos el día 03/07/21.

Participamos 18 senderistas en un estupendo día soleado, que ayudó a su realización. Continuamos usando mascarilla –donde es necesario– debido a la Covid-19.

Comenzamos la travesía en el santuario de Nuestra Señora de Cadeiras (s. XVIII), para luego recorrer miradoiros (miradores), aldeas, petroglifos y muíños (molinos) a lo largo del río Xabrega; también conocido como regato de Camilo. Y la finalizamos en el propio embarcadero de Os Chancís y su preciosa cascada. Todo el recorrido se enmarca en el corazón de la Ribeira Sacra en la comarca Terra de Lemos a la que pertenece el municipio de Sober (Lugo).

También puede interesaros la travesía con el título:

“RIBIEIRA SACRA: MIRADORES Y MOLINOS SOBRE EL CAÑÓN DEL RÍO SIL (TRAVESÍA DE SAN XILLAO AL EMBARCADERO OS CHANCÍS). 11/01/20”. Tenéis el enlace a dicha ruta al final, en “Ver más”, en letras azules después de los datos del GPS. También se puede copiar y pegar en “Busca rutas o Explora” de Wikiloc.

Recomiendo ver los vídeos para tener una mejor visión e idea del recorrido de las travesías, así como para ver los tiempos, distancias y promedios realizados al paso por las aldeas y lugares de interés.

Aclaraciones

1) En el vídeo observaréis que en el Procesador de Trayecto del GPS no aparece la hora y el tiempo total (que podéis ver al final del comentario en los Datos del GPS o se pueden hallar sumando el tiempo en movimiento y el tiempo detenido). También hay datos repetidos y otros no usuales (en mis anteriores rutas) debido a una manipulación incorrecta por mi parte y no haberme percatado de ello. No obstante, he puesto la hora en las imágenes del vídeo al situarnos en determinados lugares o aldeas gracias al track del programa CompeGPS.

2) Las señales oficiales, así como postes de dirección y orientación de senderismo PR (Pequeño Recorrido) son prácticamente inexistentes, por lo que se hace imprescindible llevar el track en el GPS.

3) En algunas zonas, los caminos carreteros y senderos estaban cubiertos de maleza, lo que nos obligó en algunas ocasiones a desviarnos ligeramente e ir paralelos al track de la ruta citada en el cuarto párrafo. Caminamos campo a través y por prados durante unos metros para volver al camino o sendero cuando se presentaban despejados.

4) Caminamos por largos cortafuegos durante unos 6 km, ya que los miradores están a lo largo de los cortafuegos, excepto los de Cadeiras y Santiorxo.

5) En la zona de los molinos, en época invernal, el río Xabrega (también conocido como regato de Camilo) puede llevar un abundante caudal y vadearlo (cruzarlo) puede presentar alguna dificultad, ya que hay que vadearlo en varias ocasiones sobre pasos de piedras.

“Santuario de A Virxe de Cadeiras

El Santuario de Cadeiras se eleva 601 metros sobre el nivel del mar, a muy escasa distancia de los acantilados que forman en este lugar los Cañones del Sil en Pinol. Como todo santuario gallego, fue construido en un lugar sagrado y milagroso para muchos con el fin de sacralizar los restos paganos que aquí se veneraban. Restos de esto son los grandes penedos junto a la iglesia de aspecto singular que eran el centro de los milagros. “Cadeiras” en gallego significa “sillas, con o sin brazos”.

Por ello debemos observar la forma de estas piedras y considerar que fueran denominadas “cadeiras”. Las rocas en Galicia siempre tuvieron un carácter místico y mágico ya que sus caprichosas formas y la situación de algunos de estos “penedos” provocaban las más variadas creencias ya desde hace varios miles de años. El santuario de Nosa Señora das Cadeiras es obra del siglo XVIII”. (Fuente: Galicia Máxica, julio 2021).

Resumen de la travesía:

• Llegamos en autocar a la parte posterior del santuario de Nuestra Señora de Cadeiras (s. XVIII). Destaca por ser un lugar de peregrinación tras los milagros atribuidos a la Virgen de Cadeiras.

• Transitamos por: caminos, senderos, campo a través, prados, bosques, cortafuegos y un poco por carreteras locales.

• Pasamos por pequeñas aldeas y un pazo de la Ribeira Sacra. Estuvimos en estupendos miradores (artificiales y naturales) sobre el cañón del río Sil. A nuestro paso encontramos: el citado Santuario, petroglifos, un castro y un observatorio de aves.

• Avistamos: un catamarán surcando las aguas del río Sil, el monasterio de Santa Cristina de Parada de Sil, aldeas al otro lado del Sil, el embarcadero y embalse de Santo Estevo (Esteban). Recorrimos 14 de los 28 muíños (molinos) dos Chancís o del río Xabrega.

• Finalizamos la travesía en el embarcadero de catamaranes de Os Chancís y su preciosa cascada del río Xabrega (o regato de Camilo) que desemboca en el río Sil.

Descripción de la travesía

El autocar nos dejó en una zona de pícnic con barbacoas, mesas, bancos y una fuente con grifos; todo ello en piedra de granito. Dicha zona está situada en la parte posterior del santuario de Nuestra Señora de Cadeiras, un bello edificio del siglo XVIII, bastante bien conservado y situado en una explanada de hierba. Enfrente hay una especie de soportales largos en forma de L. Marisol, Dina y este servidor (puede que algún compañero/a más que desconozco) nos acercamos hasta la fachada del monumental santuario para fotografiarlo y contemplarlo. Se ha convertido en un lugar de peregrinación tras los milagros atribuidos a la Virgen de Cadeiras. Luego nos unimos al grupo, que estaba a punto de iniciar la travesía.


Llegada al santuario de Cadeiras


Santuario de Cadeiras

Iniciamos la travesía siguiendo la indicación de un letrero de dirección que anuncia el miradoiro (mirador) artificial de Cadeiras – 1. Tras caminar una corta distancia, nos situamos en dicho miradoiro, que se asoma al canón (cañón) del río Sil. Al inicio, tiene un pasillo de tablas en ligero ascenso, que finaliza en el propio mirador. Su piso es de madera y cuenta con: barandillas, papelera, banco y panel informativo sobre los miradores y lugares más relevantes de la zona; así como una placa metálica con el croquis y los nombres de los lugares que podemos contemplar (como el río Sil y su cañón). Enfrente se observan la aldea de Chandrexa y Parada de Sil (parcialmente tapada por la montaña). Todos los miradores artificiales de esta ruta son prácticamente de la misma construcción y diseño por lo que, en adelante, no los describiré. Solo lo haré con el de A Cividade, que es diferente.


En el mirador de Cadeiras

Reanudamos la marcha retrocediendo hacia el Santuario y la zona de pícnic. Un poco más adelante pasamos por delante del bar “Tapería Tear”, que se encontraba cerrado. Continuamos por la carretera local y, poco después, pretendimos girar a la izquierda para seguir eltrack de la ruta reseñada en el cuarto párrafo (con fecha 11/01/20), pero el camino estaba cubierto de maleza y fue imposible seguirlo. Por ese motivo, continuamos por la carretera que atraviesa un bosque de robles mezclados con algunos pinos. Luego tomamos un camino a la izquierda con algo de matorral y pasamos cerca de la aldea de Cimadevila, que dejamos a nuestra derecha.


Por bosque

Seguidamente pasamos por la aldea de As Chousas, con escasas viviendas. Después seguimos un sendero con mucha maleza y nos vimos obligados a dejarlo y caminar al borde de los prados. Más tarde avanzamos por un camino asfaltado que nos condujo a la aldea de Pinol de Abaixo. Nos detuvimos en una casa en ruina para reagruparnos y tomamos un sendero, a la derecha de la casa en ruina, igualmente cubierto de matorral, lo que nos obligó a caminar campo a través por el lateral de unos prados paralelos al camino –sin perderlo de vista–. Retomamos el camino cuando la maleza lo permitía, alternando camino y prados en varias ocasiones (sorteando alguna pared). Acabamos transitando por un camino escoltado por pinos.


En Pinol de Abaixo

Más tarde nos desviamos a la derecha y salimos a un camino de hierba entre robles, que nos condujo a los petroglifos (grabados rupestres) que estábamos buscando. Es una gran roca granítica semienterrada en el terreno, donde se aprecian los surcos y hendiduras que grabaron hombres prehistóricos hace miles de años. Su uso como forma de comunicación data de unos 10000 a. C, aproximadamente. Hicimos las pertinentes fotos individuales y de grupo.


En los petroglifos (falta Dina)

Retrocedimos hasta el enlace anterior por un camino que atraviesa un robledal. A continuación, llegamos a la aldea de Paradela, formada por pocas casas. Al final de la aldea, destaca sobremanera un pazo o casa solariega; sobre su puerta, en piedra de granito, están grabadas unas palabras en latín y un nombre en castellano. Parece que alcanzamos a leer: “Josefa Prieta año de 1826”. En el lateral de la puerta hay una campanilla a modo de llamador.


Pazo de Paradela

Después de pasar el pazo hay una bifurcación de caminos. Continuamos por la derecha en ascenso para adentrarnos en un pinar por el que caminamos unos metros sobre una tarima de madera que sirve de mirador natural – 1, con vistas al cañón del río Sil. Seguidamente alcanzamos el miradoiro artificial de Santiorxo – 2, situado sobre una roca y asomado al canón (cañón) del río Sil. Desde allí vimos un catamarán surcando las aguas del Sil a través del cañón. Su plataforma era triangular. Hicimos las consabidas fotos individuales y de grupo.


Club Peña Trevinca Barco en el mirador de Santiorxo


Catamarán por el cañón del Sil

Dejamos el mirador y seguimos por un pinar, pronto giramos a la izquierda y pasamos por un bosque de roble. Luego entramos en la aldea de A Somoza, la cruzamos y continuamos por un sendero que estaba totalmente ciego por la maleza (lugar dificultoso donde hay que seguir el track). Por dicho motivo, nos vimos obligados a caminar por el lateral de un prado paralelo a él hasta llegar a un camino que aparece perpendicularmente y donde hay un panel de la “Ruta da Empardeada”.


Pasando por A Somoza

Más adelante, nos topamos con un poste de dirección que anuncia el castro de Vilanova. Nos desviamos a la derecha, ascendiendo con fuerte desnivel por un precioso sendero con paredes cubiertas de musgo. Encontramos algunos postes de orientación y dirección locales (color verde) y llegamos a un panel que describe el castro de Vilanova. Giramos a la izquierda y, siguiendo un estrecho sendero con mucho matorral, llegamos (algunos/as) al mismo. Consistía en un pequeño montículo entre arbolado y una pequeña pared de piedras musgosas (media derruida), que supusimos que era el castro.


Por el precioso sendero


Ruinas del Castro de Vilanova

Retrocedimos sobre nuestros pasos para seguir por un precioso bosque mixto de robles y pinos. Al borde del camino estaba el esqueleto de una bicicleta (chatarra en el monte) a la que se subió nuestro compañero Aurentino con intención de adelantar al grupo. En una bifurcación giramos a la izquierda y nos situamos en el mirador natural – 2, desde el que pudimos ver el cañón del río Sil. Continuamos la travesía por un cortafuego, cubierto en parte por maleza, para luego detenernos a la sombra de unos pinos entre grandes piedras para tomar un tentempié.


Por el bosque mixto


En el mirador natural – 2

Finalizado el refrigerio continuamos la marcha. Encontramos un camino perpendicular con un poste de dirección a otros petroglifos (a los que no fuimos por desviarse de la ruta). El cortafuego sube y baja constantemente varias lomas. En una bifurcación de un camino existe un poste de dirección que indica el mirador artificial de O Boqueiriño – 3. Poco después nos situamos en el mismo, estando sobre una elevación del terreno. Desde allí, pudimos ver el mosteiro (monasteiro) de Santa Cristina de Parada de Sil, al otro lado del río Sil.


En el mirador de O Boqueiriño


Monasterio de Santa Cristina

Descendimos del mirador y llegamos a una bifurcación en una pista forestal, que era un pequeño collado. Había unos paneles (uno con información sobre un observatorio de aves) y unos postes de dirección: hacia el observatorio de aves, hacia el mirador de A Cividade y hacia el último mirador por el que habíamos pasado. Después de ascender nuevamente, encontramos un panel de madera interactivo (cubos giratorios con fotos de aves y su descripción) para la identificación de diferentes aves. En un plano inferior está el Observatorio de Aves, que es una caseta de observación, valga la redundancia, orientada hacia el río Sil. Algunos compañeros descendieron hasta la caseta; no vieron ninguna ave, pero sí un catamarán navegando por el río Sil.


Observatorio de Aves


Catamarán por el río Sil

Reanudamos la marcha bajando y subiendo lomas hasta situarnos en un mirador natural – 3, con grandes piedras, desde donde pudimos divisar el cañón del río Sil. Luego, llegamos a una zona de pícnic con aparcamiento, donde un letrero anunciaba el miradoiro artificial de A Cividade – 4. Giramos a la izquierda y nos situamos en el citado mirador, que es diferente a los anteriores: siendo largo, rectangular, con piso de madera y un resistente armazón metálico de protección; sin bancos, panel ni papelera. Disfrutamos de sus vistas hacia el cañón del río Sil, las aldeas de Cerreda y A Alberguería y parte del encoro (embalse) de Santo Estevo (San Esteban). También vimos un gran colmenar cercado por una pared para protegerlo de los osos.


En el mirador de A Cividade


En el mismo mirador (faltan Dina y Miguel de la Cal)

Regresamos a la zona de pícnic, que cuenta con una fuente (sin agua), dos mesas, bancos de piedra de granito y dos papeleras. La cruzamos y continuamos por el cortafuego mientras seguíamos los postes de orientación PR. Pasamos junto a un manantial en el que bebió Ignacio. Luego nos situamos en otro mirador natural – 4, desde el cual vimos de nuevo: un amplio tramo del río Sil, el embarcadero y embalse de Santo Estevo y las aldeas de Cerreda, A Alberguería y Loureiro.


Vista panorámica

Poco después finalizó el cortafuego y pasamos a caminar por un sendero cubierto de piornos, por lo que nos costó abrirnos paso. Luego seguimos por un frondoso pinar y un camino forestal que finaliza al salir a la carretera local LU-P-5906. En ese punto hay un letrero de dirección hacia la aldea de A Boca a la izquierda. Giramos a la derecha para dirigirnos a un cercano gran estanque de agua en el que nos refrescamos y lavamos antes de comenzar a comer. Eran las 15:00 horas.


A través del frondoso pinar

Finalizada la comida, regresamos a la carretera teniendo enfrente el letrero que anunciaba la aldea de A Boca. En poco tiempo llegamos a dicha aldea, la dejamos atrás y tomamos un precioso sendero-camino con paredes laterales cuyas piedras estaban cubiertas de musgo verde. Allí vimos un hito y algunas señales PR que seguimos.


Dejando la aldea de A Boca


El sendero-camino

Avanzamos a través de un bonito robledal para llegar al primero de los 14 muíños (molinos) dos Chancís o del río Xabrega (de 28) que recorrimos. Están anunciados por un letrero de dirección y se ubican en cascada (uno tras otro). Un buen número de ellos están restaurados o en fase de restauración. En la fachada de algunos también había un cartel con un bonito refrán o dicho popular. Es un lugar maravilloso que cuenta con mesa, bancos de piedra y puentes de madera y que se extiende durante unos 2 km a lo largo del río Xabrega o regato de Camilo. En la mesa de dicho lugar se encontraban comiendo algunas personas.


Uno de los molinos restaurados


Río Xabrega

Pasamos los molinos uno tras otro y cruzamos el último puente de madera mientras observábamos una pequeña cascada. A continuación, caminamos al lado de un canal de agua (que surte a los molinos). Vimos algunas placas al borde del sendero con referencias a las plantas del lugar. Según avanzamos, fuimos descendiendo hacia el río. Cuando llegamos a su cauce, tuvimos que vadearlo fácilmente en varias ocasiones sobre pasos de piedras (en época invernal puede ser más dificultoso). Llegamos a una pasarela con plataforma de madera, escaleras y pasamanos, donde el compañero Ricardo Rodríguez nos deleitó con una canción de su amplio repertorio que escuchamos atentamente. Luego descendimos las escaleras y continuamos vadeando el río y recorriendo más molinos. Entramos en algunos para ver su interior y había utensilios para moler el grano.


Vadeando el río Xabrega

Estuvimos en una plataforma con poleas que antiguamente era movida por un generador eléctrico y que ahora sirve de placo de música para la romería del lugar. Continuamos avanzando junto a más molinos y vadeando el río. Cruzamos un puente de piedra y caminamos por un bonito sendero a la vera del río Xabrega.


Por bonito sendero

Finalmente, salimos a una carretera comarcal, donde hay un poste de dirección que anuncia los muíños do río Xabrega (en sentido contrario) y, tras caminar unos 130 m, vimos un letrero que anuncia el embarcadero de Os Chancís a 100 metros (teléfono 982460714, página web: www.siltrip.com) y la caseta de control e información del embarcadero Os Chancís (que estaba cerrada). Sobre dicha caseta se ubica el mirador del mismo nombre. No nos detuvimos y continuamos descendiendo por la carretera mientras veíamos un meandro del río Sil y el embarcadero de Santo Estevo en la orilla contraria. En poco tiempo llegamos al aparcamiento del embarcadero de Os Chancís, donde nos esperaba el autocar. Por la pared del aparcamiento se deslizaba la cascada del río Xabrega que caía en la cuneta. La mayoría de compañeros/as la aprovecharon para lavarse y luego se cambiaron la ropa y el calzado.


Caseta del embarcadero Os Chancís

Un reducido grupo continuamos unos metros más para descender por unas amplias escaleras de cemento mientras veíamos unas piraguas y la preciosa cascada del río Xabrega, que se desliza entre las rocas hasta la base del embarcadero y desemboca en el río Sil. Los compañeros Ricardo, Manuel, Dina y yo llegamos al extremo del embarcadero de Os Chancís y paré el track.


La preciosa cascada del río Xabrega


Embarcadero de Os Chancís


En el embarcadero - Fin de la travesía

Finalmente, el resto del grupo también descendió al embarcadero y nuestra compañera Katy se atrevió a darse un baño nadando al lado del embarcadero. Luego le hice una foto posando en la cascada. También hicimos la foto de grupo con la preciosa cascada como telón de fondo y dimos por finalizada la travesía.


El catamarán llegando al embarcadero


Katy posando en la cascada


Grupo del club Peña Trevinca Barco

Regresamos al autocar y yo también aproveche (mientras llegaba el resto de compañeros) para lavarme y cambiarme de ropa y calzado. Emprendimos viaje, pero nos detuvimos en el pueblo de Sober (Lugo) para sentarnos en la terraza del bar A Bodeguilla de Marce, tomar unas bebidas y brindar por la exitosa travesía. Después regresamos a nuestros domicilios y dimos por concluida una fenomenal jornada.


Brindando en la bodeguilla de Marce


Otra imagen del brindis


El último brindis

Gran travesía que recorre magníficos miradores a lo largo del caudaloso río Sil y a través de su impresionante cañón. Además, la ruta incluye: un santuario, bosques preciosos, petroglifos, un observatorio de aves, los molinos de Os Chancís o del río Xabrega (de gran valor etnográfico) y una preciosa cascada que podréis descubrir si transitáis por este ¡¡Buen camino!! que hoy os presento.

Un saludo cordial.

Datos del GPS:

Nombre de la salida: SANTUARIO DE NUESTRA SEÑORA DE CADEIRAS

Fecha y Hora
Día 03-07-2021
Hora de salida
09:38:55
Hora de llegada
16:09:46

Duración
07:03:51
Tiempo parado
02:22:40
Tiempo en movimiento
04:41:11

Distancias
Distancia con alturas
21.24 km (real 21.78 km)

Alturas
Altura Máxima
757 m
Altura Mínima
241 m
Desnivel máximo
516 m
Ascen.acum.
418 m
Desc.acum.
753 m
Max Pendiente
18.6 %
Min Pendiente
-20.6 %

Velocidad
Velocidad media
3.1 km/h.