Trevenque

La zona de la Fuente del Hervidero es desde hace bastante tiempo uno de los lugares con mayor actividad montañera de Sierra Nevada, debido no solo a la espectacularidad de su paisaje o la variedad de sus recorridos, también por la facilidad de acceso desde La Zubia y Granada.

Así mismo, en esta zona podremos conocer uno de los enclaves de mayor importancia medioambiental de Sierra Nevada, pues en las arenas dolomíticas de las faldas del Trevenque sobreviven endemismos únicos que han sabido adaptarse a las duras condiciones del terreno.

Dejamos el coche en el aparcamiento habilitado junto al Canal de la Espartera. Estamos a unos 1300 m de altitud.
Empezamos el recorrido por una pista que hay junto al aparcamiento, al poco la pista empieza a ascender suavemente.

Durante todo el trayecto, son permanentes las subidas y bajadas por pequeñas lomas, donde el terreno se desprende fácilmente por estar compuesto por grandes arenales.

Tras una hora y media de trayecto, llegamos a la última loma. Ésta tiene bastante inclinación, y además es muy resbaladiza debido al terreno arenoso. En la cuesta hay curiosas formaciones de piedra y roca, algunas parecen representaciones de figuras
Ya estamos en el último repecho, también con bastante inclinación. En algunos salientes, las vistas de sierra Nevada son impresionantes.

Aquí en la cumbre, Pico Trevenque (2.079 m.), entre las rocas, son curiosos los belenes ubicados.
"Rey de la baja montaña": El pico Trevenque es una pirámide caliza, de esbelta figura, y una de las grandes "clásicas" en el historial de cualquier excursionista. Para llegar a la cumbre existen varias rutas.

La panorámica desde la cumbre es amplia Debido a que la montaña
se eleva solitaria sobre los valles de Huenes y Dílar, se pueden observar la práctica totalidad de las cumbres de la baja y media montaña, así como la alta montaña y otras sierras de la provincia. Una de las actividades más interesantes es identificar, con el mapa y la brújula, las distintas elevaciones que contemplamos.

El regreso lo realizamos desandando lo andado. Hasta llegar al pino solitario, la pendiente es fuerte y el suelo muy suelto ¡Hay que ir con cuidado!.

Llegamos al final y es el momento del avituallamiento en el «Merendero Macareno», junto a la fuente del Hervidero; si es en primavera y hace buen día, bajo un frondoso nogal (Junglans regia) ¡¡conejo con ajos, habas con jamón, morcilla de cebolla, longaniza «cuanto más larga más lisa»… !Y cervecitas fresquitas¡