TRILOGIA P. BERMEJA 1. INVERNAL RODEANDO PIEDRA BERMEJA. BUSCANDO SENDAS POR EL SURESTE DE LA SERREZUELA DE LA LAGUNA

Aprovechando el pequeño descanso que el temporal de nieve nos ofrece, nuevamente salimos a explorar la serrezuela de la Laguna, en las mismas condiciones de precariedad de tiempo que en la ruta anterior, con lo que el kilometraje no puede superar los 12-13 kms y sin dormirnos lo más mínimo, si no queremos que se nos eche la noche encima.
Hoy toca la zona este, aprovechándonos de lo que hemos averiguado en la dos rutas anteriores y, con el aliciente del manto blanco que cubre gran parte de esta sierra..
Sabiendo que la parte norte –Gibrarberca- presenta nieve suficiente en sus carriles como para poner en peligro nuestra empresa, accedemos con el coche desde el este –Huelma- con la esperanza de que el camino estará despejado y en buenas condiciones. Esto se cumple a medias ya que nos tenemos que chupar andando kilometro y medio de tedioso carril hasta el cortijo de D. Domingo, teórico punto de inicio, por el barrizal que nos encontramos.
En este cortijo tomo dirección norte a través del zigzagueo del camino hasta alcanzar el de Borregueras Altas, donde nos reciben sus escandalosos perros, bien adiestrados en espantar intrusos, mas por el ruido que por la planta de los bichos. Aquí es donde realmente comienza el terreno de sierra, con una preciosa y sinuosa vereda que asciende progresivamente hacia el este, aunque enseguida se estabiliza y mantenemos altura a lo largo de todo el rodeo, pasando continuamente por pasillos entre pequeñas encinas cargadas de nieve. Esta senda, no es la única, por lo que intento coger siempre la más marcada y ancha.
Es en el momento de coger el camino que vira hacia el norte cuando la presencia de nieve se hace más palpable y los paisajes ganan en majestuosidad, con las vista al fondo de la cuerda de Mágina. Incluso los olivares, ya próximos al cortijo de Majá Trences, adquieren una belleza especial con esta cubierta inmaculada.
A partir de aquí comienza la subida continua, primero al collado-cruce donde podemos coger, a la derecha a la garita de vigilancia, al frente el camino que se dirige a la zona de Gibralberca o a barranco del Judío; o a la izquierda –que es la nuestra- en búsqueda de la base del cerro de la Laguna, atravesando otro bosquecillo de encimas de poco porte a través de los pasillos naturales, guiados por el gps, ya que en estas condiciones la vereda se encuentra a unos 20-30 cms bajos nuestros pies. Este tramo de ascenso a los pies del cerro es donde encontramos el mayor grosor en la capa de nieve, que, unido a las vistas que la altura nos permiten disfrutar, lo convierte en uno de los momentos más gratificantes de la ruta.
No hay tiempo de subir al punto geodésico, por lo que directamente utilizo la vereda ya conocida que rodea el cerro por el sur, aunque su localización no está exenta de dificultad, ya que no es muy ancha y la vegetación es muy espesa.
Una vez en el collado de la laguna tengo 2 opciones para buscar el camino que sé rodea la sierra por el sur: utilizar la vereda que desciende desde piedra Bermeja o descender esta por el norte en búsqueda de la vaguada que parte del collado de Borregueras. Decido esta última, porque aunque es mas larga, considero que el terreno es más seguro y estable en estas condiciones. Prefiero la nieve al barro.
Una vez en el camino ya no tengo más que avanzar hacia el este, con las últimas luces del crepúsculo, en busca del vehiculo.
Ruta que incluso con nieve, se hace con relativa facilidad, unicamente la bajada desde el collado de la Laguna al de Borregueras le pone un puntito mas - de ahí lo de moderada-.