Túnel, vértice geodésico - Hellín

NOTA DEL 19 OCT 2020: me informan de que el camino de bajada desde la cima hasta la vía del tren es privado (a pesar de que no hay cartel que lo indique) y que es posible ser multado si se usa. Por tanto, recomiendo subir y bajar a la cima por el mismo camino.


José Ramón, a quien debemos todas las fotos, Limón, el perro senderista, y yo emprendimos esta bonita ruta (siguiendo las indicaciones de Manuel Sagredo) una mañana de julio bien temprano, para evitar el calor en lo posible. Estuvo nublada la mañana, así que tuvimos suerte.

Acercamiento con el coche
Desde Hellín se toma dirección Agramón y desde aquí hacia la pedanía de Las Minas. Antes de llegar a Las Minas se toma el cruce que nos lleva hasta la presa del pantano de Camarillas. Tras cruzar la corta presa y el túnel subsiguiente, dejamos el coche en un anchurón que hay a la izquierda.

Ruta
Comenzamos a andar, de espaldas a la presa, y pronto (a los 70 metros) se acaba el asfalto y seguimos por un camino de tierra bastante ancho. De frente, a los 160 m desde el comienzo, nos encontramos con las vías del tren. A la derecha podemos ver la boca del túnel (por ahí terminaremos la ruta). Un poco antes de las vías, a la derecha, veremos las trazas de un sendero que asciende con mucha pendiente hacia el monte. Ese es el sendero que tomamos. Son 500 metros muy empinados pero se hacen bien, si uno va parando de vez en cuando a recuperar el aliento. Debido a este tramo califico la ruta de dificultad 'Moderada'.
El sendero se pierde de vez en cuando, pero no hay mucha pérdida (al inicio hay algunos mojones de piedra que se agradecen bastante).
El monte que vemos de frente (cuya cima es el pico Túnel) hay que bordearlo dejándolo a nuestra derecha. A la izquierda veremos todo el rato un barranco muy empinado que hay que coronar y pasarlo justo sobre su nacimiento, donde ya estaremos en un camino bien visible.
Siguiendo este camino nos situaremos en la cara sur del monte donde ya podremos atacar la cima que queda a nuestra derecha (a los 640 m desde el coche). La subida es sencilla. Se llega al vértice y se disfruta de unas vistas maravillosas del pantano de Camarillas.
Hasta aquí hemos recorrido unos 900 metros salvando una altura de 150 metros, lo que nos da un desnivel medio del 17%. Estamos a unos 510 msnm. Merece la pena el esfuerzo.
Desde la cima, mirando hacia la loma por donde hemos subido, veremos un camino ancho de tierra hacia el que hay que dirigirse, bajando y subiendo un poco después. El camino se toma a la izquierda (kilómetro 1,3 desde el coche). En esta bajada, José Ramón descubrió el escondite de una tarántula que esperaba en un hoyito en el suelo a sus presas.
Una vez en el camino, lo seguimos hacia la izquierda (hacia el sur, más o menos) hasta que, después de una curva de herradura hacia la derecha, nos incorporamos al Camino de Acarreo del Pico de Hellín (suponemos que acarreo de esparto). Lo tomamos hacia la derecha (kilómetro 2,6 desde el coche). En la cima de una loma, frente a nosotros, hemos podido ver la Casa del Pico de Hellín, ahora en ruinas, pero que bien merece una visita por lo que tuvo que ser (habría que tomar el camino de Acarreo hacia la izquierda). Nosotros lo dejamos para otra ocasión.
Siguiendo el camino de Acarreo del Pico de Hellín (que hemos tomado a la derecha), siempre en descenso, llegaremos a las vías del tren (kilómetro 4 desde el coche). Es un tramo de vías muertasd, así que no hay peligro de que venga un tren y nos dé un susto. Las tomamos hacia la derecha y caminamos sobre ellas. A nuestra izquierda podemos observar el impresionante cañón de Los Almadenes desde arriba. El río mundo al fondo del cañón, acequias con agua, arrozales, etc. Muy bonito.
En unos 400 metros andando sobre las vías se llega a la boca del túnel. Desde aquí se ve la boca de salida (el túnel es recto). Nos internamos en él y lo recorremos (mide unos 1100 metros). En este trayecto se hace necesario el uso de la linterna, para no dar pasos en falso y para observar los cadáveres de algunos animales que yacen junto a las vías (suponemos que atropellados por el tren cuando estaban en uso): un jabalí, un zorro, un perro, restos de lo que suponemos fue una oveja, etc.
A la salido del túnel tomamos a la izquierda y regresamos al coche por el tramo inicial.