Txindoki (1.346m) desde Larraitz. Subida clásica

Dejamos el coche uno de los parkines de Larraitz para afrontar la subida clásica al Txindoki. Cabe destacar que los fines de semana merecen la pena madrugar pues aparcar se puede convertir en una tarea complicada, al menos en un buen lugar.

Comenzamos la andadura cruzando la valla de inicio al Parque Natural de Aralar y los primeros metros los haremos por pista, para llegar a uno de los atajos a mano izquierda, siempre señalizados, en donde el camino ahora será de sendero. El resto del camino del camino discurrirá ya por sendero, pese a que en algún tramo cogemos de nuevo la pista del principio, pero solo en tramos muy cortos.

Tras terminar estos atajos del zigzag, cogemos el sendero principal que ira bordeando el Txindoki por su parte derecha, pasando por la fuente de Oria en donde podremos rellenar agua y dejando a mano izquierda la clásica subida Tximista del Txindoki, mucho más vertical que la clásica y quizás algo más accidentada debido a la piedra suelta, pero que sin embargo tampoco tiene una dificultad excesiva.

Pasaremos también por encima de la borda de quesos Txindoki, que será la que dará sobrenombre al monte, pues su verdadero nombre es Larrunarri. Tras pasar la misma, llegaremos al inicio de las campas de Aralar. A partir de aquí el camino volverá a ser bastante vertical y afrontaremos la última subida, en donde habrá que andarse con cuidado en algún tramo donde hay roca, ya que debido a la gran afluencia de público de esta cima, se encuentra bastante pulida.

Finalmente llegamos a la cima, destacando la proximidad de las campas de Aralar y unas vistas impresionantes desde la misma. Podemos destacar todos los montes relevantes de Euskadi, así como muchos de Navarra y al fondo los pirineos. Destaca también toda la costa Gipuzkoana. Un regalo para la vista.

La vuelta la realizaremos por el mismo camino.