Ubales, Cascayón, Los Fornos, Peña el Viento y la Rapaina. (2022-11-12)

Salida desde el aparcamiento de la carretera de San Isidro, para sin pérdida transitar por la pista Wamba hasta Collado Acebal. Cogemos el camino hacia el Lago Ubales, por detrás del refugio que hay en collado. Camino que bordea por el este el Cascayón, hasta dar con el lago. Por la derecha del lago cogemos un sendero marcado que asciende, que poco a poco se va difuminando entre monte bajo, pero que no impide ascender hasta el collado a los pies del pico. Desde el collado sendero bien marcado hasta el pico, con buzón de cumbres.
El descenso del pico se hizo de forma poco ortodoxa, bajando por varios senderos hasta el pedrero. Del pedrero hasta el refugio recomiendo buscar otra opción, pues se cruzó tramos de piornal. Volvemos al collado Acebal y cogemos un sendero muy marcado que asciende hacia el este. Cruzamos la alambrera divisoria de provincias y continuamos por camino bueno. Antes de llegar a alcanzar la sierra donde se ubica la Peña el Viento abandonamos este camino, para ascender en busca de otro sendero que nos dará acceso al collado al norte de la Peña el Viento. Antes de llegar nos acercamos a la cima de Los Fornos, en cuya cima también hay buzón de cumbres y vistas a los cortados sobre Mericueria. Retrocedemos, bordeamos un peñón y llegamos al collado. Acceso por terreno pindio el primer tramo, hasta alcanzar la zona de crestero, que seguiremos hasta la cima. Arriba buzón de cumbres y buenas vistas.
Descenso por la vertiente sur, por terreno pindio y pedregoso el primer tramo. Camino fácil luego hasta el Collado las Agujas. Desde aquí sendero muy claro para subir el último pico, la Rapaina. Arriba los restos de un buzón de cumbres y muñón divisorio.
Retrocedemos y buscamos camino que nos devuelva a Wamba. Será un camino que desciende hasta llegar a una loma inferior. Aquí giramos hacia la izquierda para seguir descendiendo por terreno limpio y a gusto de cada uno, hasta llegar al fondo del valle. Cruzamos el arroyo, en esta ocasión seco, para tras una pequeña subida volver a enlazar con la pista Wamba, que nos devuelve al punto de partida.