Ubide-Eneabe-Hayedo de Otzarreta-Humedal de Saldropo-Cascada de Ugune-Barrios de Jauregi y Ortuzar-Zeanuri

Vuelta al País Vasco desde Ermua. Etapa 179:

Comenzamos en la parada de bus del pequeño pueblo vizcaíno de Ubide. Nos adentramos en el casco viejo, en el cual vimos que casualmente se estaba celebrando una trail (la "ubidestroi", de 28km y 2000m de desnivel), y después, abandonamos la localidad, ascendiendo por una pista asfaltada.

Dicha pista nos conducirá sin pérdida alguna a las antenas cimeras del monte Eneabe, aunque si queremos hacer cumbre de verdad al monte, tenemos que desviarnos de la pista, y subir un breve repecho por la izquierda. Llaneamos por la herbosa ladera, hasta llegar ahora si al buzón del monte Eneabe (781m).

Bonitas vistas desde lo alto, pudiendo ver los montes Atxuri en primer término, Aldamin y la cruz del Gorbea, Oketa, Anboto, Urkiolamendi, Ipizte y Orixol, entre otros.

Volvemos hacia las antenas, y seguimos de frente, por la pista del cresterio, para luego bajar por un doble cruce izquierda-derecha.
Este sendero que se adentra por una zona boscosa, nos lleva a otro cruce, en el cual podemos ir a Ubide (derecha) o izquierda (Hayedo de Otzarreta). Así pues, giramos a la izquierda.

Llaneamos, para luego seguir cuesta abajo, por un sendero algo embarrado en sus zonas umbrías. Al salir a cielo abierto, tenemos una preciosa vista del macizo de Gorbea (ahora si, completo) el macizo de Itxina, el monte Urreako Atxa, y el macizo de Anboto. Por abajo, se encuentra las verdes praderas del Humedal de Saldropo.

Hacia allí vamos, aunque antes, nos desviamos del camino para adentrarnos en el corazón del pequeño pero precioso Hayedo de Otzarreta. Aquí nos quedamos largo rato, disfrutando del lugar, y buscando las mejores zonas para hacer fotos. Muy recomendable pasarse por aquí ahora en Primavera, y mejor aún, en Otoño.

Tras las fotos de rigor, volvemos a la pista, pasamos por un amplio parking, y después, giramos a la derecha, para acceder al Humedal de Saldropo. Aquí nos encontramos con un gran grupo de caballos, ya acostumbrados al paso de la gente, que incluso se dejaban tocar.

Tras un buen rato de caminata por el humedal, lo dejamos atrás, yendo primero por una pista de cemento, y después, por un sendero natural.
A continuación, debemos realizar una serie de desvíos por numerosos senderos que se internan en otro denso bosque. El objetivo, es llegar a la cascada de Uguna. No teníamos claro cuanta agua caería, pero viendo que los distintos arroyos por los que pasamos iban bien cargados de agua, esto nos aseguraba disfrutar de un buen espectáculo.

Y así fue. En primera instancia, accedemos a la cascada por la parte superior por un diminuto camino a modo de atajo (hay que cruzar el cauce del río). Luego, conectamos con la pista principal y después, hasta llegar a la cascada de Uguna, donde disfrutamos de sus 30m de caída libre. Aquí, al igual que en el hayedo, nos quedamos largo rato, fotografiando cada palmo del lugar. Ya de paso, aprovechamos la bonita estampa, el fresco y la agradable sombra para hacer un parón, y comer y beber algo.

Proseguimos la marcha, retrocediendo unos metros, para luego continuar cuesta arriba por la izquierda. Más adelante, conectamos con una ancha pista de piedras, en cual descendemos en suave pendiente. A mitad de camino, pasamos un instante por la bonita ermita de Santa Ágeda.

Luego, seguimos cuesta abajo durante un rato hasta desviarnos a la izquierda por un sendero natural. Podíamos haber seguido por la pista, pero mi intención era la de acortar un poco la trazada, así que este sendero hace la vez de atajo. No obstante, la calidad del mismo no es muy bueno, y al estar en mitad de otra arboleda, se acumulan en varios puntos bastante barro en el suelo. Aún así, en líneas generales, se puede transitar por aquí con comodidad.

Luego, giramos a la derecha, y final del camino, llegamos a una serie de casas y una carretera. Enseguida lo abandonamos, haciendo un doble giro a la izquierda.
Ahora, volvemos a ir cuesta arriba, a través de una ancha pista de piedras. Luego, giramos a la derecha, y seguimos por senda natural. Atentos al track, ya que en algún punto el camino puede dar a confusiones.

Al llegar al punto más elevado, descendemos un poco, hasta llegar a la primera de las 2 ermitas que veremos en este tramo final de ruta. Aquí existe un cruce donde os permite llegar a nuestro destino, el municipio de Zeanuri, de forma directa. Pero nosotros preferimos alargarlo un poco más, para poder ver dicha ermita y pasar por algún que otro barrio.

Caminamos por otra arboleda, hacemos una serie de pequeñas subidas y bajadas, y finalmente, llegamos a la otra ermita.
Después, el terreno pasa a ser de asfalto, y esto nos permite acceder a los barrios de Jauregi y Ortuzar.

Por último, descendemos todavía por carretera, hasta llegar a la parada de bus de Zeanuri, aunque antes de finalizar aquí, seguimos adelante para visitar el núcleo central de la localidad.


Ruta muy recomendable, por el hayedo de Otzarreta, por la cascada de Uguna, y por los numerosos y preciosos bosques, que nos aportan mucha sombra, frescura y alivio, en especial en días cálidos como el de hoy.

El tiempo dedicado a la ruta ha sido de 9h y 31min. Lo podríamos haber completado en mucho menos tiempo, pero fuimos a paso lento, y nos hemos entretenido un montón con cada punto de interés. También he tenido numerosos problemas con el móvil, más concretamente con la app de Wikiloc para grabar la ruta, y por ello he preferido crear un nuevo track, para que aparezca correctamente la trazada con sus correspondientes waypoints.