Udalaitz desde Kanpazar

Partimos del aparcamiento del merendero que hay en el puerto de kanpazar en una mañana soleada de primeros de mayo.
Nos dirigimos hacia la cantera cruzando con cuidado la carretera.
Cruzamos las instalaciones y enseguida nos adentramos en un sendero que nos conduce a través de un encinar hacia la ladera del udalaitz.
La subida es continua y empinada pero se lleva bien aunque está el suelo bastante mojado no resbala en exceso.
Llegamos a un claro pero enseguida nos volvemos a introducir en el encinar.
Una vez dejamos los árboles atrás seguimos ascendiendo por la ladera hasta llegar a una pequeña cueva donde descansamos un poco pues la subida es intensa.
Seguimos subiendo esta vez ya con terreno claro y despejado y con mucha piedra suelta.
Es una subida larga y durilla pero sin dificultad.
Llegamos al final a un pequeño collado dónde vemos a nuestra derecha la cima del udalaitz , a nuestra izquierda la cruz y en el centro las restos de una pequeña construcción antigua.
Primero visitamos la cruz después llegamos a la cima del udalaitz donde disfrutamos de las vistas y enseguida bajamos por el otro lado de la montaña cresteando un rato por un camino estrecho y con mucha piedra pero bueno con cuidado. Pasamos por una pequeña cueva y después por una más grande que nos ofrece una panorámica del anboto increíble.
Seguimos por el sendero kárstico y llegamos a otra cima del recorrido, la del Erdikoatxa, también con maravillosas vistas y seguimos esta vez ya descendiendo todo el rato, por un senderito también muy exigente para las rodillas y los tobillos que nos conduce hasta una pista más grande pasando por una charca.
Por el camino vamos atravesando bosques de pino, hayas, robles y abetos. Pasamos por un cruce que nos conduciría a Besaide y aunque merece la pena hacerlo, nosotros lo hicimos hace poco así que decidimos seguir hacia kanpazar, esta vez por una pista ancha aunque muy embarrada y llegamos de nuevo hasta el aparcamiento.
Bonito día y bonita ruta aunque es subida y bajada intensas.