Uleila del campo - Circular por GR-A 244 parcial

Bonita ruta de peregrinación desde Uleila del Campo hasta la cima donde se ubica el santuario de la Virgen de la Cabeza, o santuario de la Virgen de Monteagud.
El recorrido lo iniciamos en Uleila, en la carretera que bordea el pueblo y que nos lleva hasta un colector de agua.
Desde aquí, se nos abre un camino de subida pronunciada, con inmejorables vistas hacia todos los valles cercanos, pero eso si, como si de una metáfora de lo que supone un sentimiento religioso, la pendiente nos proporcionará las dificultades, con sus preciadas recompensas de visualización de la fauna salvaje de la zona, como pizpiretas cabras montesas y cernícalos chillones, y la dureza siempre bien guiada de las señalizaciones del sendero de gran recorrido GR-A 244 para, tras horas de camino y trabajoso ascenso, se nos brinde la recompensa de un lugar de recogimiento como es el santuario.
En nuestro caso, nos vimos un poco decepcionados puesto que en el santuario se están acometiendo unas obras de construcción de una ermita moderna, restando innumerable valor a el santuario, desde nuestra perspectiva. Aun así, las vistas y la posibilidad de descansar en un punto tan bonito mereció nuestro esfuerzo.
Ya nos queda ir bajando desde el santuario por la carretera que permite el acceso a vehículos motorizados, que si no me equivoco es conocida coloquialmente como la cuesta de la virgen. Este tramo, que todavía estará marcado durante un buen trecho por los postes indicativos del GR-A 244, estará salpicado de pequeñas construcciones a modo de refugio, sin duda puestos de caza, para aquellos que disfruten de otras artes cinegéticas que no sean las de capturar con una cámara las perdices correteando por los arcenes de esta carretera.
Pasaremos el poste indicativo de que dejamos atrás el GR-A 244 y un poco mas adelante, encontraremos la entrada a un camino forestal, dejando atrás el cemento, que nos recorrerá las fincas adyacentes a Los Medinas, preñadas de almendros, los cuales tuvimos la suerte de ver en flor con su majestuosidad de colores blancos y rosas.
Por último, tras llegar a Los Medinas, tomaremos la rambla, que está seca, para poco a poco volver a Uleila del Campo, no sin antes dejarnos algunos detalles muy curiosos como aljibes de estilo musulmán, fincas perfectamente delimitadas mediante murallas de piedra caliza que acceden a la rambla por escaleras hechas en la misma pared, los sistemas de cultivos variados de la zona y las parcelas en diferentes niveles, etc.
Al llegar a Uleila del Campo, como nos es costumbre, disfrutamos de sus calles y de su gastronomía, esta vez en un Mesón decorado al estilo medieval, donde nos sirvieron buenas tapas de brasas que hicieron nuestra delicia.