Urtemondo y Belatxikieta desde Artaun (Dima) por la PR BI-81

Hoy martes pronostican un buen día aunque caluroso y me acompaña al monte mi amigo y vecino Koldo, con el cual me unen bastantes años de aventuras montañeras. La intención es hacer la PR BI–81 o "vuelta a Galdara" desde Artaun (Dima), aunque con ascensión al Urtemondo y Belatxikieta.

Son las ocho de la mañana cuando partimos de Deusto para plantarnos en Artaun unos minutos mas tarde de las ocho y media. Para ir al barrio de Artaun primero tenemos que ir hasta Dima. Para ello partimos de Bilbao, cogemos la autopista hacia Donostia y nos salimos en Usansolo. Pasamos por Bedia y Lemoa y antes de Igorre nos desviamos por la circunvalación hasta llegar a Dima. En Dima giramos a la altura del frontón para dirigirnos a una rotonda cercana y un cruce a pocos metros. Allí un cartel nos indica la dirección de Artaun y Oba, desviándonos un poco mas adelante para llegar hasta Artaun por una sinuosa carretera.

Artaun es una aldea preciosa, arbolada, con unos caseríos bonitos, arreglados y unas vistas hacia el Gorbea espectaculares. La coqueta ermita de San Vicente con el "bolatoki" adyacente, la fuente de tres caños, el "perratoki" o potro de herrar, además del restaurante Azurmendi, donde los fines de semana sirven unas espectaculares alubiadas y, el Museo etnográfico Antzasti, son alicientes suficientes para cursar una visita al barrio.

Aparcamos el coche y pongo wykiloc en marcha para grabar la ruta pasando junto al "perratoki" y por delante del restaurante Azurmendi, con su balconada decorada en rojo por las inconfundibles rastras de pimientos choriceros.

Unos metros adelante giramos a la derecha para coger una pista cementada, pasando por la trasera del Museo Antzasti, que con sus bonitas mesas y sillas sobre el césped y bajo la sombra del arbolado le dan un especial encanto. El amplio e inconfundible camino sigue adelante y traza una curva a la izquierda empezando a elevarse. Las vistas de Artaun desde el camino son de una belleza pastoril innegable.

Tras seguir un rato en ascenso relativamente cómodo por pista cementada llegamos a un cruce estratégico donde se separan la PR BI–81, que es la que seguimos, con la PR BI–82 o "ruta de los carboneros", que parte y llega desde Oba, y que dejamos para otro día. Como nosotros seguimos la PR BI–81 giramos en el cruce a la izquierda, que está señalizado. En general podemos decir que todas estas rutas están bastante bien señalizadas.

Tras el cruce abandonamos el cemento para seguir por un amplio camino de tierra y llegamos enseguida a una bifurcación, siguiendo hacia la izquierda. En el cruce hay un indicador blanco con el nombre de la zona por donde pasamos. Encontraremos varios indicadores de este tipo por toda esta zona. En este caso pone "Akatzabarrena". Seguimos un rato ascendiendo suavemente dentro del pinar para salir a espacio abierto y llegar al poco a una balsa de agua dentro de un cercado de madera que dejamos a nuestra izquierda. A este paraje lo llaman "Odiol".

Allí mismo existe un cruce, siguiendo por la izquierda. Poco a poco el camino va entrando en el roquedo kárstico característico de toda la sierra de Legarmendi o Aramotz, donde ya desaparece el arbolado, aunque todavía se puede andar bien por el amplio camino. Vamos pensando que en no mucho tiempo tendremos que desviarnos para ascender al Urtemondo, que queda a nuestra derecha. Estamos siguiendo los traks de otra ruta grabada en Wikiloc y nos indica que en breve nos tendremos que desviar. Yo ya había subido varias veces al Urtemondo, al igual que Koldo, pero viniendo desde Belatxikieta, por lo que no estamos seguros de dónde coger la desviación, así que decidimos hacer caso a la citada ruta. Pero....¡ERROR!, como enseguida veremos.

Seguimos un rato más por el amplio camino que poco a poco se va convirtiendo en sendero zigzagueante entre rocas calizas pisadas. De repente el trak de la ruta nos dice que nos tenemos que desviar bruscamente a la derecha para enfocar el Urtemondo, que parece estar relativamente cerca. Pronto nos damos cuenta de que hemos cometido el error del día: ascender al Urtemondo por aquí. No hay camino y de vez en cuando encontramos cuatro piedras apiladas a modo de kairn y antiguas pinturas rojas y amarillas (o eso parece) en algunas rocas que están totalmente deslavadas y se confunden con líquenes, que al menos nos confirman de que alguien en su día señalizó por aquí la ascensión. A veces hay que trepar un poco o hacer verdaderos equilibrios sobre las grandes lajas de piedra para progresar, hasta que más por instinto que por las indicaciones llegamos a la cumbre del Urtemondo (788 metros), en la que hay un chico en ese momento al que aprovechamos para decirle que nos haga una foto. Las vistas son espectaculares y con el día que hace aún más.

Aprovechamos para echar unos tragos de agua ya que el calor empieza a apretar y enfocamos el descenso por la ruta que tanto Koldo como yo recordábamos, por donde habíamos subido y bajado siempre, que es por el pinar. Una vez arriba, para llegar a la parte alta del pinar desde el buzón y bajar por su senda hay que cabalgar un poco con cuidado sobre las grandes rocas calizas de la cumbre, pero es un tramo corto. Una vez que alcanzamos el pequeño y ralo pinar bajamos por él por una clara senda hasta el camino que conduce hacia Mugarrikolanda, dirigiéndonos a la izquierda para en unos pocos minutos dar con el camino que traíamos desde Artaun. En el cruce hay señales, y nos arrepentimos de no haber subido por aquí al Urtemondo, que es la vía de ascenso más lógica, más utilizada y más normal. En definitiva, que recomendamos encarecidamente a todo el mundo que desee ascender al Urtemondo que suba y baje por aquí, venga desde donde venga: tanto desde Belatxikieta, como desde Artaun o desde Mugarrikolanda.

Una vez en el cruce con el camino de Artaun dirigimos nuestros pasos hacia la ancestral y cercana majada de Belatxikieta, distante no más de un kilómetro. Por camino pisado y muy claro llegamos a su entorno pasando antes junto a una placa metálica situada en una roca en recuerdo de un tal Blas Aresti Aizagirre. Al poco llegamos al caserón donde hace años había un bar y a las campas de Belatxikieta, ascendiendo de inmediato a su cumbre (661 m) para bajar de nuevo a la campa, donde hacemos una paradita para comer un poco de fruta y beber algo a la sombra al lado de la pequeña y curiosa ermita de San Ignacio de Loyola.

Tras el refrigerio, junto a un cercano refugio llamado "Aizetsu" hay un poste de señales donde se indica la dirección a seguir para retornar a Artaun. El camino baja por espacio abierto y sinuoso, sorteando espinos albares, primeramente en dirección a Lemoa, hasta llegar en un rato a una pista de piedrilla junto a un redil de ganado, que si la seguimos hacia la derecha nos llevaría hasta el barrio de Bernagoitia. No es nuestro caso hoy, así que giramos a la izquierda para enseguida llegar a otro cruce señalizado donde nos separamos del camino que baja hacia Lemoa girando bruscamente a la izquierda en dirección a Artaun.

A partir de ahora nuestro camino casi siempre discurrirá a la sombra. La pista de piedrilla sube un rato trazando un par de curvas bajo una plantación de robles americanos que dan una magnífica sombra. En un rato salimos del bosque de robles y dejamos de ascender para acceder a espacio abierto y entrar enseguida en un pinar, ya cuesta abajo.

Solamente tenemos que seguir hasta Artaun el amplio camino bajo el pinar. Encontraremos otro poste de señales que nos indica de nuevo el camino. Ya he dicho al comienzo que la ruta esta bien señalizada. Cuando estamos bastante abajo, cerca de Artaun, tomamos un pequeño y evidente atajo que desciende unos metros para ahorrarnos una curva del camino. En unos minutos más estamos en el barrio de Artaun, aprovechando la generosa fuente para echar unos buenos tragos de agua.

Como resumen podemos decir que se trata de una ruta sencilla, de algo menos de 11 km de longitud y una ascensión acumulada de casi 600 m, que si no fuera por el tortuoso tramo de ascenso al Urtemondo por donde hemos subido nosotros la calificaríamos como una ruta fácil, pasando en este caso a ser de dificultad moderada. Ruta muy recomendable con paisajes y panorámicas excepcionales caminando por una zona kárstica como es toda la sierra de Aramotz y rodeando la famosa "Galdara" (olla en castellano), donde hace años existió una explotación mineral de de Espato de Islandia.

Y una cosa más, recordar que las o los que deseen subir a la cumbre del Urtemondo lo hagan por donde hemos bajado nosotros, que el camino esta bastante claro y es mucho mas seguro.