Valberzoso: chozo del maquis Tonino Cardero, Puente Rojadillo

Preciosa ruta que transcurre mayormente por un profundo bosque de robles y nos premia en su final con el puente romano Rojadillo y algunas pozas del río Camesa. Hicimos esta ruta en uno de los pocos días de mucho calor (+35°) por estos lares y la sombra del bosque la hizo muy agradable.

Aparcamos el coche en Valberzoso. Pero recomiendo seguir la carretera 1 km y pico mas y aparcar en el lado izquierdo, donde hay un descampado y empieza el camino hacia el robledal. Es el GR1 y está señalizado con rayas blanco y rojas.

Después de un corto tramo despejado enseguida entramos en un profundo bosque de robles. Caminamos sobre una pista forestal con bastante vegetación. Hay muchos robles viejos con extrañas formas que recuerdan a cuentos fantásticos. Los próximos kilómetros son una constante subida, pero bastante llevadera.

Después de 2km de ascenso llegamos al escondite del maquis (guerrilla antifranquista) Tonino Cardero, que está muy bien conservado. Seguimos unos 3 km más y salimos del bosque a una pradera. Desde aquí divisamos el Valdecebollas y el mirador del Golobar.

En este punto nos damos la vuelta y bajamos hasta el cruce dónde está el desvío a la izquierda hacia el puente romano Rojadillo que salva el río Camesa. Después de un corto chapuzón en una de sus pozas (agua muy fría) volvemos hasta Valberzoso

Una vez finalizada la marcha, subimos hasta el minúsculo pueblo de Salcedillo, el último pueblo que pertenece a la provincia de Palencia antes de Cantabria. Almorzamos en el único Mesón ( Calderón). Todo un espectáculo: local pequeño, su dueño, Miguel Ángel, un one man show (cocina y despacha). No esperéis elegir la comida. Os va a poner lo que él ha preparado ese día y punto y pelota. Eso sí, todo rico y en un ambiente muy rustical. Volveremos :-).