Valderejo. Portillo Lerón, Recuenco, Ermita San Lorenzo.

Casi todo el territorio del Parque Natural de Valderejo pertenece a la provincia de Araba. Su Centro de Interpretación se encuentra en Lalastra y es desde el parking que encontramos a la entrada del pueblo donde comenzamos nuestra ruta.
Importante avisar que uno de los tramos tiene el acceso prohibido entre el 1 de enero y el 15 de agosto para preservar la temporada en la que los buitres están sacando adelante a sus pollos. Es por ello que la ruta completa solo se puede realizar al final del verano o durante todo el otoño si bien hay alternativas para evitar este tramo y que permiten hacerla (al menos una parte) en cualquier época del año.
Las rutas más conocidas en el Parque de Valderejo discurren por el desfiladero del río Purón (partiendo también desde La lastra o desde Herrán -Burgos-). Son todas muy recomendables pero en esta que se describe aquí caminamos por un paisaje completamente diferente y no menos interesante.
Tened en cuenta que tomamos altura en un pequeño tramo al comienzo de la ruta (sin grandes pendientes) y la perdemos al final (también de forma suave). En el resto del recorrido el trayecto dibuja una especie de gran herradura muy llana (con una ligerísima elevación para llegar al Recuenco) desde la que tenemos casi permanentemente una visión abierta hacia valles y cadenas de montañas. Si tenéis la suerte de que os sale un día claro y con un leve viento sur como el que tuvimos nosotros, la marcha se convierte en una auténtica delicia.
Tomando el Recuenco como el punto medio aproximado de la ruta, en la primera parte nos vamos a encontrar con bastantes puntos de interés:
- El Portillo Lerón y unas pinturas rupestres que han tenido que ser protegidas con un metacrilato al que la intemperie le ha hecho perder su transparencia y a través del cual yo no conseguí identificarlas a pesar del cartel explicativo. En este punto está, para mí, el panorama más bello de toda la ruta.
- Un poco más adelante nos detendremos junto al Menhir del Gustal. Su descubrimiento, su reconstrucción y su posible razón de ser conforman un buen relato.
- Alejándose un poco del borde de la planicie veremos los restos semirestaurados (con un panel explicativo) de una cabaña de mestas. Un poco más adelante llegaremos al punto más alto de la ruta y de todo el Parque de Valderejo, El Recuenco.

En la segunda parte nos encontramos con un terreno casi completamente llano y más fácil de caminar. Sus puntos más relevantes son:
- La ermita de San Lorenzo. Cuenta con una pequeña zona protegida que la hace ideal para descansar y tomar el bocadillo. Tanto si lo que toca es protegerse del sol, de la lluvia o del viento.
- La bajada desde la ermita atraviesa un bosque de pino salpicado de otras especies y con alguna mancha extensa de hayas como la que rodea el pueblo abandonado de Villamardones. Las construcciones derruidas están siendo absorbidas por la vegetación dibujando un escenario que sería muy del agrado de los escritores románticos del siglo XIX. Por si fuera poco, un árbol rodeado de leyenda como es el tejo, parece presidir toda la escena.
- Más adelante, muy cerca de la pista que nos lleva ya hacia La lastra, tenemos un molino que aprovechaba el agua del Purón y en el que su restauración ha dejado a la vista todo el sistema de las muelas y la turbina que era movida por el agua.
- Terminamos la ruta donde la empezamos, en Lalastra. Bonito pueblo que cuenta con el Centro de Interpretación del Parque y un pequeño museo etnográfico. Merece la pena reservar un poco de tiempo para cada uno de ellos porque en el primero está muy bien explicado el espacio natural y en el segundo la acción humana sobre él.