Valle de Lecrín: Melegís - Embalse de Béznar - Barranco del Chite - Talará - Lecrín - Murchas.

El Valle de Lecrín fue una zona estratégica en forma de pasillo natural entre Granada, Alhama, la Costa y la Alpujarra y por ello durante el dominio árabe se conformó como un espacio fronterizo donde se construyeron una serie de bastiones defensivos que controlaban el paso de mercancías y personas, de los que todavía se conservan innumerables restos. Mucho antes de eso fue lecho submarino del Mar de Tetis como atestiguan los fósiles que pueden encontrarse por toda la zona. Además, este valle es una zona fértil donde predominan los frutales, naranjos y limoneros, cuyo aroma acompaña al caminante sea cual sea la ruta que escoja para perderse en esta maravillosa comarca. Con esas características, en este lugar se puede elegir entre un interminable número de rutas de distinto perfil, arqueológico, botánico, fluvial, geológico, etc.

En nuestro caso nos limitamos a realizar una primera tentativa en la zona, en la que recorrimos parte del perímetro del Embalse de Béznar, desde el pueblo de Melegís hasta la desembocadura del Río Chite y después subimos por el Barranco que forma este Río hasta el pueblo de Talará, para volver a bajar a nuestro punto de origen pasando por las cercanas poblaciones de Lecrín y Murchas.

Durante la primera parte del recorrido transitamos un sendero bien definido con vistas al Embalse que solo en algunas zonas se cerraba entre cañas. Al llegar al Río Chite nos metemos en un profundo Barranco en el que inicialmente destacan una serie de álamos y almencinos centenarios, para después ceder el protagonismo a los naranjos y limoneros. En todas las rutas que habíamos visto se tomaba un desvío para visitar el pueblo de Chite, pero nosotros decidimos seguir río arriba hasta que nos encontramos incapaces de cruzarlo y tuvimos que seguir por medio de varías fincas y albercas para alcanzar la carretera cerca del Puente de Talará. Desde aquí llegamos a Lecrín donde paramos a tomar unas cervezas y después bajamos a Melegís entre los frutales de la vega del Río Torrente donde, ahora sí, nos detenemos en su precioso lavadero público y en su bonita iglesia, antes de dar por finalizada la ruta frente a otras cervezas con sus generosas tapas.

Una única advertencia en caso de realizar esta ruta, en el Barranco del Chite se cruza en múltiples ocasiones el río, en época estival lleva muy poca agua y no hay problema; en otras épocas con el caudal mas abundante hay que tenerlo muy en cuenta.