Valle de los colores y acantilados de Jaizkibel

Comenzamos esta ruta en el km 9 de la carretera de Jaizkibel Gi-3440 junto a un panel que señaliza itinerarios y descendemos hacia la costa.
Nuestro vehículo a quedado aparcado junto a la carretera unos kilómetros más hacia Ondarribia para tenerlo más cerca al finalizar la ruta.
En el primer tramo compartimos ruta con el Gr-121, talai bidea, aunque un poco más adelante lo abandonamos por la izquierda y caminas siguiendo las marcas blancas.
Pasamos junto a las ruinas del caserío Gaztarrotz y dejándolo a nuestra derecha continuamos por la senda. Unos metro más adelante tomamos el camino de la derecha pasando por un estrecho pasillos de rocas.
La clara senda continua en descenso hasta las primeras y coloridas rocas, clara señal de proximidad al precioso valle de los colores.
Merodeamos sin rumbo definido disfrutando de este peculiar paisaje hasta que comenzamos a caminar en paralelo al mar por la zona de rocas. El terreno con sus acantilados nos obliga a girar a la derecha y ascender hacia el interior. Un poco más adelante nuestra senda comienza a bajar a la izquierda, seguimos con marcas de pintura blancas y atravesando el rio gaztarrotz pasamos al lado contrario de su cauce, no sin antes disfrutar de un inesperado espectáculo de slackline con varias cintas cruzando este barranco para la práctica de este deporte. Continuamos la senda con marcas blancas que zigzaguea al borde del mar mientras disfrutamos de varias figuras geológicas talladas en las rocas que rodean la senda. Aunque nos encontramos varios caminos que se alejan hacia el interior, nosotros continuamos al borde de los acantilados hasta la playa de Sisurko donde comenzamos a subir hacia el interior, enlazando con un nuevo tramo del gr-121 que nos acerca de nuevo a la carretera de Jaizkibel, unos kilómetros más adelante que el comienzo de esta ruta.
Solo queda caminar hasta nuestro coche por esta carretera o por alguno de los muchos caminos que transitan paralelos a la misma.