VELILLA DE LA PEÑA - REBANAL - GRAJERAS - CUETO PALOMO - RINCADA - CRUZ

Esta ruta es fruto de combinar una ya subida a Wikiloc (desde aquí agradecer su autoría), de unir ésta con otra que yo había diseñado por mapas y de un final improvisado y exitoso.

El inicio de la ruta lo hallamos en Velilla de la Peña (o de Tarilonte). Entramos en la localidad y la cruzamos del todo. Hay un amplísimo espacio para aparcar junto a un cruce de caminos.

En el cruce de caminos vemos que hay dos carriles a la izquierda. Por el de la derecha de ellos comenzaremos y acabaremos por el de la izquierda.

Ya a pie, y por el carril, ganamos unos cien metros de altura llegando a su fin y a la base de la montaña. Ahora viene lo bueno: Monte a través ganamos 400 metros de altura en menos de dos kilómetros para alcanzar la primera peña o alto. Uno más y nos dirigimos a coronar el Pico Rebanal, teniendo Peña Redonda a tiro como optativa cordal.

Nosotros no vamos a Peña Redonda, sino que giramos a la izquierda dirigiendo nuestros pasos a coronar el alto de Las Grajeras, que nos ofrece una excelente panorámica.

Descendemos algo monte a través hasta alcanzar un carril que más allá irá por la ladera de la Sierra de la Peña.

En una bifurcación con anexos y enormes bloques de piedra tomamos el carril de la derecha. Si tomásemos a la izquierda podríamos acortar la ruta. El alto de Cueto Palomo, el de más altitud de la ruta, nos espera.

Tras recreanos con las vistas encaminamos nuestros pasos por la cuerda de la sierra hacia el alto de Rincada, donde hallamos un vértice geodésico.

Ahora toca alcanzar la ermita y el refugio del Cristo de la Sierra, que logramos gracias a carriles y un postrer y no incómodo cortafuegos. De ahí al Santuario de Nuestra Señora del Brezo, donde encontraremos el primer punto de agua de la jornada, esto es, a los 23 kilómetros, así que que cargad con suficiente agua al principio. El líquido elemento que mana de la fuente del santuario está bien fresco y el lugar invita a un receso en el camino.

Desde el santuario podéis, si no queréis ascender más, continuar por la pista de la izquierda, que os llevará a una mina exterior cuyo camino de acceso desde el pueblo alcancé yo, más adelante. Recuperaréis desde ese punto mi track.

Yo me encontré con fuerzas y ascendí a la Peña de la Cruz, primero por un exquisito sendero, ultimando éste con una serie de hitos, y después monte a través. Aparecía de vez en cuando un anárquico hito.

Desde esta postrera cima descendí por el sitio que iba encontrando más cómodo. Al llegar a un bosque decidí obviarlo y continuar por el claro. Así llegué a la carretera de acceso a la mina, carretera que dejaremos ya muy cerca del pueblo por el carril que se dirige a la primera bifurcación del itinerario.

La he establecido como difícil por el desnivel acumulado, pero en ningún momento hay ningún tipo de dificultad ni riesgo.

Completísima y muy entretenida ruta que espero disfrutéis tanto o más que yo.