Ventoso, circular desde P. Vallegón, Sámano

Ventoso
Circular desde Sámano

Bilbao, a 6 de diciembre de 2017.
La excursión de hoy sale desde el polígono de Vallegón en el municipio de Sámano, en las inmediaciones de Castro Urdiales.
Es un recorrido que discurre todo el rato por pista, por lo cual a alguno le resultará aburrido, pero las vistas por el cordal seguramente compensen esta sensación.
En la zona alta del polígono aparcamos el coche y cruzamos el arroyo Tabernillas para situarlo a nuestra derecha. Comenzamos el paseo por una pista con un cartel que nos habla de una zona de escalada y de la restricciones para proteger la anidación de rapaces.
Pasamos por unas formaciones rocosas que me recuerdan a los acantilados al borde del mar y sus rocas erosionadas.
Nos encontraremos con unas cuantas chabolas, algunas de ellas con escandalosos perros, pero sin contratiempos.
Circulamos un rato cerca del arroyo. Hace un frío del carallo y por eso hemos salido con todo puesto y zapateando rápido, tanto que en menos de media hora hemos hecho algo más de tres kilómetros y ya estamos cerca de la cantera de Santullan. Ahora me sobra todo, guantes gorro, Gore, Forro, pero no me quito nada con lo cual la sudada es importante.
Pasamos la entrada a la cantera y cambiamos de pista, ahora algo más ancha y con un desnivel mas continuo. Llegamos a un collado en el que vemos un refugio muy protegido. Nosotros seguimos todo el rato por pista aunque en algún momento podíamos haber cogido un pequeño atajo. En esta zona el sol nos da de cara y resulta bastante molesto.
Al cabo de casi 7 kilómetros de pista nos situamos debajo de la cima. Dos opciones seguir por pista y rodear la cima o seguir la vía recta y en un kilómetro de repechon llegar al refugio que hay en la cima. Elegimos esta ultima.
Hoy tenemos mucha suerte no hace viento, casi ni brisa, y las vistas son fabulosas en todas las direcciones. Llama la atención el manto blanco del cordal de los montes de Ordunte.
Ya esta hecho lo más duro, y no ha sido pa tanto.
Ahora a disfrutar del paseo por el cordal, eso si, por una pista embarrada hasta los topes. Seguimos el camino del gasoducto, y en el camino observamos dos “hitos” o mejor dicho dos “monolitos” que recuerdan los “miliarios romanos”, no en vano alguno ha interpretado que por aquí discurría una senda romana. No tengo claro este aspecto, ni he encontrado informacion fidedigna al respecto.
Lo que sí es más que evidente y hay varios restos es que este cordal fue un lugar de mucha importancia, al ser el primero en línea recta con el mar, para que nuestros antepasados levantaran varios menhires, y de hecho queda en pie el Ilso de Anguia.
También podremos observar restos de las trincheras de la guerra civil.
En este trayecto pasamos por la cima de Pajares y el Alto de Anguia.
Poco después de rebasar éste tomaremos la pista de bajada al polígono. Está muy embarrada pero hemos tenido la suerte de que está duro, quizás por el frio y no nos resbalamos demasiado.
La bajada es más corta, unos 4 kilómetros en los que bajamos 600 metros de desnivel.
Enseguida entramos en un bosque de eucaliptos que no dejamos hasta llegar al coche.
Bueno pues eso es todo amigos.
Un buen paseo para una mañanera con una vistas fabulosas.
Hasta otra , nos vemos en el monte.