Vía Verde de Linares, Camino Natural Vía Verde del Guadalimar, Fuentes y Vértice Geodésico Cruz de la Langosta

Hace unos meses pasé junto al cartel del Camino Natural Vía Verde del Guadalimar (que se ha ubicado sobre el trazado de la antigua línea de ferrocarril Baeza-Utiel) y quería recorrer al menos una parte de la misma.

Partiendo del aparcamiento que hay junto al Polideportivo de San José, dirigiremos nuestros pasos hacia la Vía Verde de Linares. Esta primera parte de la ruta no presenta ninguna dificultad, seis kilómetros en suave descenso, con buen firme y disfrutando de las vistas.

Una vez terminada esta vía verde, seguiremos descendiendo por un camino y, tras cruzar por un puente el trazado ferroviario, encontraremos el inicio del Camino Natural Vía Verde del Guadalimar. El inicio es impresionante ya que se accede de inmediato al magnífico viaducto de Los Barros, construido en curva y que ofrece una espléndida vista sobre el río Guadalimar.

Superado el viaducto, la vía verde continúa en busca del paso alternativo bajo la nueva autovía A-32. A la salida del paso inferior tomaremos la pista izquierda. Este tramo, es compartido con otros vehículos y discurre paralelo a la autovía unos 200 m hasta retomar de nuevo la traza original perfectamente indicado.

El tramo siguiente transcurre por la llana vega del margen izquierdo del Guadalimar, entre hileras de olivos, almendros y campos de cereal. Aquí la vía describe una larga recta a nivel y cruza dos carreteras de escaso tráfico hasta el puente sobre el profundo barranco del Arroyo de Ibros. Finalmente se sumerge en un túnel de 350 metros, recto y no muy iluminado (aunque con las linternas de los móviles nos ha sobrado).

A la salida de este primer túnel la vía se adentra en el tramo más variado, rico y diferente de toda la ruta: sotobosque de álamos, olmos, fresnos, sauces y demás especies que crecen junto al río Guadalimar; un corredor ecológico tan rico y variado que da nombre a esta ruta.

En el empeño de acomodarse al contoneo del Guadalimar el trazado se aterraza y se eleva en talud en la orilla izquierda, y, a falta de sustento, echará mano de un largo viaducto curvo desde el que, gracias a su baja altura, se tiene la sensación de navegar sobre el río. Sin duda, éste es un mirador de excepción tras el que nos introduciremos en el largo y segundo túnel (296 m).

A la salida del mismo, la vía reaparece en un panorama más abierto, donde el cercano Guadalimar se tamiza por el olivar. Será un pequeño paréntesis antes de convertirse nuevamente en un balcón al curso del río. Desde el área de descanso se ofrece una imponente perspectiva del puente metálico del ferrocarril activo Madrid-Almería sobre el curso del Guadalimar, hacia el que dirigimos nuestros pasos.

Para llegar al mismo hay que avanzar por la vía verde hasta una zona que actualmente está en obras, pero fácil de reconocer por una especie de león de piedra que se ha colocado. Allí, nos iremos desviando a la derecha hasta dar con un paso sobre una gran acequia (casi acueducto) que nos impide el paso. Ya en el camino, nosotros hemos seguido prácticamente hasta el puente y al desviarnos hacia el mismo por los olivos, nos hemos encontrado una importante zanja que baja hasta el cauce, con bastante maleza, así que hemos tenido que bajar, pasar bajo el puente y subir por el otro lado del mismo.

A pesar de que la parte de abajo del puente es bonita, creo que es mejor opción ir junto a las vías del tren (EXTREMANDO LAS PRECAUCIONES PUES SE TRATA DE UNA LÍNEA EN USO) desde el mismo momento en que salimos de la vía verde.

El puente moderno tiene una pasarela peatonal, pero en la misma, igualmente recomiendo extremar la precaución y ante la duda, no pasar. El suelo de la pasarela es de rejilla, así que ojo si tienes vértigo.

Justo al pasar el puente nos encontramos a la derecha la Fuente de la Chopera, con un abundante caudal hoy. Tras verla, cruzamos las vías en dirección a la Fuente de la Casablanca, hoy con aguas bastante claras. Volvemos sobre nuestros pasos hasta el paso a nivel y desde allí seguimos paralelos a la vía del tren hasta llegar a un bonito túnel, por el que las atravesaremos.

Subimos ya hacia Linares, primero junto a la valla de Cástulo y luego por olivares, hasta toparnos con la A-32. En ese momento giraremos a la izquierda para hacer la última subida hasta el Vértice Geodésico Cruz de la Langosta, dicen que punto más alto de Linares.

Las vistas desde el mismo son sorprendentes, desde el Castillo de Baños de la Encina, Sierra Morena, hasta Úbeda y Sierra Mágina.

Ya solo queda dirigirnos hacia Linares en busca del vehículo, cruzando un par de túneles.

AVISO IMPORTANTE: Hay que tener en cuenta que este track se debe utilizar como referencia y bajo su propia responsabilidad. No soy guía de montaña y esta ruta solo es un reflejo de mi experiencia al realizarla. Igualmente, tener en cuenta que este track se debe utilizar como referencia. El campo es un elemento vivo que va cambiando continuamente, que los recorridos, señalización y, cualquier otro aspecto pueden sufrir variaciones por la mano del hombre y/o de la propia naturaleza.