Xalón Activo Nº4: CENTRAL RÍO BLANCO

En esta ocasión os llevamos por las alturas del angosto valle por el cual discurre el jalón dibujando giros ininterrumpidamente desde la central de Río Blanco hasta llegar a Somaén.
En está ruta hay que tener cuidado con la orientación al principio de la misma cuando pasamos las vías del tren justo debajo del castillo de Somaén, es en este tramo donde se localiza la parte más técnica y complicada de la ruta pues en ella se supera prácticamente todo el desnivel de la ruta y el camino no resulta muy evidente lo que puede llegar a despistarnos y hacernos desviar del camino correcto.
El inicio de la ruta discurre por la base de la majestuosa Peña la Miel siendo zona de asentamiento y cría del buitre leonado.
Como hemos comentado antes la ruta no es muy evidente y existen otras sendas que nos pueden llevar a la confusión por ello deberemos estar atentos durante este tramo y seguir siempre la senda más pegada a la base de la peña.
Una vez superada la peña entraremos al valle de el Hornillo donde podemos ver la senda que nos llevará hasta un repecho que una vez superado llegaremos al sendero que nos llevará a la central de Río Blanco sin complicaciones, en este tramo existen unos cuanto mojones de piedras que nos indicarán el camino correcto.
En varias ocasiones podemos asomarnos a los salientes de las rocas para contemplar las vistas del angosto valle que dibuja el Jalón dando giros ininterrumpidamente hasta llegar a Somaén.
Los contrastes del verde de las riberas del río Jalón con el tono pardo de las rocas y montañas crean unos rincones y unas hermosas vistas.
En el saliente de lo que recibe el nombre de La Curva podemos distinguir los cimientos de un torreón que se utilizaba para comunicarse con la antigua torre restaurada de una antigua fortaleza árabe, lo que es ahora el castillo de Somaén.
Siguiendo por la senda llegaremos a la Central del Río Blanco donde encontraremos una balsa de agua rodeada de vegetación, todavía se pueden observar en estos parajes al águila, el buitre, el arrendajo, el abejaruco...
Estas aves anidan en estos lugares y para ello necesitan del necesario silencio y respeto por su hábitat.
A pocos minutos de la balsa podemos encontrar una necrópolis (siglos IX-XI) que está formada por un conjunto de tumbas excavadas en la roca. Están orientadas en dirección oeste-este, y los restos que se han encontrado mostraban unos enterramientos sencillos sin apenas objetos.
En el paraje y alrededores de esta zona se encuentra la salida del Río Blanco en forma de cueva para terminar en la balsa antes de ser reconducido al Río Jalón. También están las antiguas minas de hierro abandonadas con peligro de desprendimientos que se producen de forma natural. La vuelta de la ruta transcurre por el mismo camino empleado para la ida y nos permitirá volver a pasar por los rincones que más nos hallan llamado la atención para disfrutar de esta ruta tan recomendable y poco conocida.