Marina Alta: Vall de Laguar

Vall de Laguar: Situado a una media de 500 metros de altitud, se eleva entre dos sierras que conforman este hermoso valle. A un lado el Barranco del Infierno, maravilla natural, formada por el rio Girona, que separa la Sierra de la Carrasca o de Ebo (de 1000 m s. n. m.) de la Sierra del Migdia y atraviesa todo el valle hasta llegar al embalse de Isbert. Al otro lado, como un auténtico caballo dormido, la Sierra del Cavall Verd o Sierra del Penyó (de 800 m s. n. m. de altitud), con multitud de fuentes y manantiales.
Dejamos los vans en el parking del polideportivo de Murla, ensillamos los caballos y salimos al camino de la Cruz para girar enseguida hacia el Tossal del Port, entramos en una pinada y al poco nos topamos con un sólido pero viejo muro, 3 metros de alto, garitas de vigilancia en las esquinas, fruto del miedo y el rechazo que un siglo atrás generaba en las poblaciónes cercanas la lepra, más de 3 km de muro rodean las más de 7 hectáreas donde se alberga el Sanatorio de Fontilles, dedicado desde 1909 a erradicar esta enfermedad en España y en el mundo entero.
Tomamos una senda que cruza campos abandonados para salir al carrer de Sant Antoni, 100 metros de asfalto y entramos al camino que baja al barranco de Fontilles, tras cruzar el lecho del barranco tomamos una senda pegada al muro de Fontilles, 500 metros de senda para salir al camino que rodea el Garroferal y asciende por el barranc de las Hortes hasta la Font del Gel, donde abrevaron los caballos, las altas temperaturas y el denso pelaje del invierno les inducia a ello, seguimos ruta, dejamos a nuestra derecha el camino que lleva al Camping Vall de Laguar tomando el camino de la izquierda que cruza el barranc del Moro para subir a Fleix, uno de los pequeños pueblos recostado sobre las laderas de la Serra del Penyó y asomado al profundo barranco que tiene escavado el rio Girona a la altura de la presa de Isbert, barrera de contención de las turbulentas aguas que acumula el rio en épocas de “gota fría” responsables de varias inundaciones en las poblaciones cercanas a su desembocadura.
Cruzamos Fleix por sus pintorescas calles junto a su iglesia dedicada a Santa Teresa y San Pascual Bailón, dejamos el pueblo por el carrer Font y seguimos ascendiendo por la margen izquierda del barranc del Moro hacia el Pla de Rebens hasta alcanzar la cota de los 580 metros de altitud desde donde disfrutar de unas magníficas vistas del profundo valle y un horizonte azul en su cercana desembocadura, decidimos hacer un alto y tomar un tentempié estábamos en el ecuador de la ruta, a partir de ahora todo será descenso, pasada la Font del Penyó y su pequeña área recreativa con un par de mesas para el pic-nic, tomamos una senda a mano izquierda señalizada como PR que se adentra en un pequeño bosque de pinos y carrascas, bonita senda aunque no recomendable para caballos y jinetes con poca experiencia, no es obligado hacerla el camino sigue haciendo un bucle de unos 700 metros, seguimos bajando por buen camino hasta la zona del Garroferal donde tomamos otra senda que llanea por la Portella hasta las Penyetes de Bou a 391 metros de altitud donde gira para descender rápidamente al Cami de Sant Antoni donde enlazamos con la senda junto al muro de Fontilles próximos ya al parking donde dejamos los vehículos.