PASEITO POR LA AXARQUÍA

Entretenida ruta con un 97% de asfalto y algún tramillo sin asfaltar, no buscado adrede, sino porque el asfalto se termina, y que se puede realizar perfectamente con neumáticos de carretera ya que las partes no asfaltadas no suponen ninguna dificultad.
Es una ruta para hacerla sin prisas, para disfrutar de su infinidad de curvas y de paisajes. He marcado unos miradores que pueden suponer un punto de reagrupamiento si váis con algún zumbao de la velocidad con ganas de arrastrar rodilla o como una excusa para encender un cigarrillo mientras contemplas el entorno, por ejemplo.
Parada obligada es en El Acebuchal, una pequeña aldea que en otros tiempos fue refugio de los maquis. A nosotros nos pilló una romería y tuvimos que “hacer tiempo” tomando unas cervezas y, como somos de Graná, la cerveza no se toma a palo seco, siempre bien acompañada de una “tapilla”, así que pedimos pan con aceite.
Cómpeta, Canillas de Albaida, Árchez, Salares, Sedella… son bonitos pueblos de la Axarquía donde no vamos a encontrar problema en parar en cualquier restaurante para callar al estómago. Ojo, no os pongáis “pollúos” a comer que quedan muchas curvas por delante.
Una vez dejemos atrás Canillas del Aceituno abandonamos la carretera que traíamos para aprovechar las pistas, hoy asfaltadas y hormigonadas que nos llevan hasta Alcaucín, desde donde iremos junto al río Cárdenas también por antiguas unas pistas de tierra que ahora se encuentran asfaltadas y que nos sacarán a la A-402 pasado Ventas de Zafarraya.
Antes de finalizar la ruta, una parada obligada en una cafetería de Alhama de Granada para degustar “Las Almendradas”, un dulce típico que no debes dejar de probar porque, sólo de pensarlo se me hace la boca agua, nunca imaginaste tanto sabor encerrado en esa pequeña pasta.

Es una ruta para hacerla sin prisas, aunque te lleve todo el día, disfrutando de cada curva, de los pueblos por donde discurre, de los paisajes…
Espero que os guste.