2010-05-24 Viaja Alcarria 365 Km literarios (III): El Olivar - Moratilla de los Meleros 88 km
near El Olivar, Castilla-La Mancha (España)
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Itinerary description
3ª Etapa: El Olivar - Moratilla de los Meleros 85 Kmt:
Madrugo, mañana fresca y soleada, paseo por el pueblo solitario, me acerco a la cruz de piedra (hierro) desde donde se me ofrece una vista espectacular del embalse de entrepeñas y la sierra sobre la que destacan las tetas de viana. De regreso, la casera ha preparado un desayuno impresionante, embutidos, tostadas, miel, zumos y dulces de la alcarria etc, hasta rebosar. Nos ha regalado un tarro de miel a cada uno, muy amables, la casa esta estupenda.
Todos a la ruta previo paso por la cruz de piedra. Dejamos el pueblo por dos lavaderos, e iniciamos el descenso divertdo por senda estrecha que la tormenta ha embarrado. A tras queda el Olivar, parece asentado sobre cientos de bodegas que se ubican bajo la cruz de piedra. Me divierto en esta bajada Carlos me sigue, el suelo esta resbaladizo y la bici se va de atrás, el barro ha bloqueado la rueda de los mas lentos. A mitad de descenso entre los matojos salen varias liebres, en lo alto, a lo lejos dos rebecos corriendo. Como todo lo bueno se acaba el descenso llega a su fin, el asfalto nos devuelve al viaducto sobre el embalse. Continuamos por el, algún monolito recuerda el camino de D. Camilo, como es el caso donde se echo una siesta bajo un espino. Dejamos de lado varias urbanizaciones, alguna de ellas llama nuestra atención, tienen por entrada grandes anclas. Dejamos el asfalto por camino de tierra, ascendemos hasta dar vista al pueblo de Pareja, en un pequeño cerro gris, el camino con grandes surcos y rodadas permite alegrias las justas. Entramos en Pareja, calle en cuesta que nos deja en la Plaza Mayor, Plaza de la Constitución es ahora su nombre, con su augusta olma en mitad, la famosa olma de la plaza de Pareja, donde reza un placa de baldosas frente a un viejo arbol herido por el fuego. Tomamos agua y unas fotos, la plaza en obras, no hay apenas gente en la calle, el servicio de limpiezas y poco mas. Vemos algunos de los escudos de armas, desgastados e irreconocibles, que andan repartidos por las distintas calles. Dejamos Pareja entre olivos y frutales, el pueblo que atrás queda presenta desde el camino a Casasana una buena vista. El camino se empina y endurece, es amplio y se convierte en una senda en ascenso por una loma desconchada que se antoja dura solo apta para los mas fuertes. El camino duro por pendiente pero limpio. Como escribio D. Camilo
“, …se sube por el atajo de Roblegila, endemoniado, lleno de piedras como un canchal, y muy pino…”
Tras un ultimo esfuerzo tocamos el asfalto a la mismas puertas de Casasana, el pueblo a nuestra izquierda nos muestra la iglesia, el esfuerzo de la subida nos deja exshaustos junto a la fuente y el lavadero sobre el petril de la carretera descansando y tomando algún fruto seco que extraemos de la furgoneta mientras hablamos de cuando las bicis tenian que llevar matricula… ¡Realmente hay gente muy mayor entre nosotros, je je...!.
Dejamos el pueblo por camino de tierra en buen estado, poco antes de llegar a Corcoles atravesaremos un trigal en descenso con las plantas altas que resulta una gozada. Damos vista a Córcoles, a lo lejos las ruinas del monasterio imponentes de Monsalud, solo quedan en pie los muros verticales, algun que otro arco y un poco de tejado. El sol pega fuertemente, continuamos por caminos. Cruzamos la carretera de Corcoles a Sacedon el camino se empina a traves de zonas montesas tipicamente Alcarreña. La tierra seca a pesar de la lluvia, aunque es probable que aquí no haya caido ni una gota de agua como nos confirman posteriormente en Alhondiga, el suelo color ocre rojizo como si de arcilla se tratara, los arboles parecer churruscados bajo el sol es zona de monte. Nos agrupamos, sacamos fotos a unas flores malvas muy vistosas con alguna mariquita. Coronamos el alto y damos vista entre olivos a un nuevo mar, ¿o es el mismo?, estamos entre los embalses de Entrepeñas y el pantano de Budia. Afrontamos una bajada por buena pista hasta las proximidades del pueblo. Accedemos a Sacedón por un arrabal, entre basura, pasando bajo la carretera por tunel.
Visitamos la iglesia y poco mas. Nos sentamos en una terraza junto a la plaza de toros, tomamos unas cañas y unos huevos cocidos a modo de pincho.
Sacedon es hoy un pueblo centrado en el turismo, por aquello de las aguas del embalse tan cerca de Madrid, tan próximo a Guadalajara. De unas tierras tan áridas y secas como las de la Alcarria se ha obtenido un balneario. Los nuevos tiempos se deja ver en las calles y plazuelas de la villa, en los establecimientos, preparados para las necesidades veraniegas. Me quedo con ganas de ver la imagen del antiguo pueblo de campesinos, el del barrio de la Fuente o el de la Cara de Dios, centro de callejuelas concurrentes, donde apenas se deben de advertir los efectos del turístico en torno al pantano, la pequeña ciudad, la de otros tiempos, con sus encrucijadas y rincones pueblerinos de sabor rural, con sus rejas y balcones. Sacedon curtida y destruida en la guerra civil guarda mil y un leyendas la Virgen del Socorro, la Cara de Dios, etc. etc. que nos podrian trasportar a mil y un lugares de este paraje encantador. En lo alto del cerro un grandioso monumento al Sagrado Corazón de Jesús. El embalse de Entrepeñas, se construyó para producción de energía eléctrica represando las aguas del río Tajo en un lugar angosto de su trayecto. Lugar rodeado de leyendas por lo tenebroso de su entorno. En la parte baja de las llamadas peñas del Infierno se encuentra aún el viejo puente de piedra que cruzaba el río. El panorama, a pesar de la construcción del embalse, residencias y jardines accesorios, continúa siendo de singular belleza.
Dejamos Sacedon por carretera hasta un mirador en el que nos detenemos, bajamos a un cargadero de mineral y vemos el embalse en todo su esplendor. Continuamos atravesando un tunel bajo la montaña. Dejamos el embalse de Entrepañas tras cruzar su presa y girar a la derecha en descenso por una buena carretera a la busca de Auñon, a nuestra derecha impresionantes cortados de arenisca llenos de pinos enmarcan el cauce del rio, son de gran fuerza y belleza paisajistaica. Abandonamos la carretera principal con la vista puesta en Auñon, sol de justicia, iniciamos ascenso al pueblo, entramos a su plaza mayor en marcada por su iglesia con abside redondo y un ayuntamiento con forma tipica de la zona. A la entrada marcas y señales de rutas senderista y de BTT que en algún caso coinciden con nuestro destino. Dejamos el pueblo por carretera, el calor es sofocante. Campos de olivo son nuestros compañeros. Tras la subida, bajada al fondo del valle a la vera del río entrando al pueblo de Alondiga próximos a un pequeño parque donde juegan a la petanca y en que se ve una picota de piedra junto unos bancos del mismo material, un pequeño parque sombrío y fresco, nos detenemos, a la sombra. Localizamos el centro del pueblo, una pequeña plaza con una fuente de varios caños, un árbol en un circulo de piedra que nos sirve de asiento, no se trata de una plaza porticada. Comemos en un bar en la plaza mientras baja el sol, nos atiende una chica rumana que se desenvuelve con soltura, mientras prepara la comida, nos sirve cañas, pone la mesa, nos damos un pequeño baño en la fuente, tomamos mas cañas, paseamos por el pueblo. Hablo con unas personas autóctonas del tiempo y del pueblo. De regreso otras cañas y nos sentamos a comer. Ha preparado rápidamente para todos, espaguetis a la boloñesa, lomo frito con patatas, helados, vino, gaseosa, cafés por 71 euros.
Dejamos Alhóndigas camino de Berniche por una buena pista en ascenso por la orilla contraria y en sentido inverso al que veníamos. En el camino una persona con muchísimas cabras, mas de 600 cabezas, nos saluda, Jorge habla afablemente con él. El cabrero y el viajero. Entramos en Berniche próximos al cementerio y a la Ermita de la Virgen del Collao. Subimos al pueblo, visitamos su iglesia y la plaza mayor. Tomamos camino de Peñalver,subimos al altiplano, verde sembrado de cereales muy bonito, el camino ameno nos deja frente al pueblo del mielero. Peñalver, en un enclave hundido entre riegas, descendemos al río y subimos a ver al mielero. Conversamos con una anciana quien nos indica que ayer estuvieron muchos “carreristas” por esta pista. Visitamos la plaza, típica de esta zona con sus zona porticada y el reloj del ayuntamiento. La picota de Peñalver nos despide y da paso a una buena pista de tierra entretenida que en unos 10, 11 kilómetros de buena marcha nos deja en Tendilla donde tomamos unas cañas. El pueblo es curioso, Don Camilo. lo define como
“… Un pueblo de soportales planos, largos como una longaniza y estirado todo lo largo de la carretera…”
Plaza amplia y porticada, con referencia en sus fachadas a sus hijos en la aventura americana. Damos una vueltecita, referencia de Don Camilo a su amigo Pio Baroja y su olivo. Tras el descanso dejamos el pueblo por una empinada pista que se hace durilla. La pista nos deja en Fuentelviejo, donde paramos muy poco tiempo a ver una fuente con una escultura de un labrador sobre la misma. A dos kilómetros mas o menos una fuente en la carretera nos invita a detenernos lavar un poco la bici y beber, estamos próximos al final del día. Continuamos ruta hasta Moratilla de los Meleros, estamos rotos y secos. Nada mas entrar en el pueblo, sentados en la cera, tomamos varios quintos de cerveza. Es el atardecer, las golondrinas revolotean como locas hacia el W.
Falta Toño no ha llegado, nos extraña, no conseguimos comunicar con el. Por fin llega y tenemos una pequeña y bociferada charla que termina en eso, nada de otro mundo. J. A. describe este episodio de esta manera, parado en Fuentelviejo,
“Se ven dos grandes antenas parabólicas, ¿buscaran vida en otros planetas?, ¿serán de vodafon?. Tengo plena certeza de que aun no han pasado por aquí. Estas esperas me ponen nervioso. ¿Si han pasado y no estaba?. ¿Si necesitan algo?, son pueblos mudos silenciosos, vacíos de gentes. Cada ruido diferente al trinar de los pájaros indago y observo. ¿Serán ellos?. La telefonía no vale nada por aquí…” “…20:30 llama Morcate, tras mas de 20 intentos de comunicación localizo a alguno, ya están en Moratilla, son la pera, iva de jefe…. Y como un spunick….”
El alojamiento hoy es una casa completa de varias plantas, en superior, en la habitación tienen un futbolín, dardos … juegos y dos camas, muy bonito. A mi me ha tocado la habitación infantil muy decorada con muchos muñecos y una camita blanca. La dueña de la casa nos ha regalado un bote de miel a cada uno, ha estado de turismo en Asturias en Taramundi. Tras la ducha y el cambio de ropa salimos a dar una vuelta, tomar unas cervezas y cenar al bar de las escuelas. Nos atendió un camarero rumano muy amable, quito la TV y nos ofreció un recital con el DVD de sevillanas y música flamenca, hasta que debió ver nuestras caras y le dijimos que éramos de Madrid para arriba, entonces saco los chotis y la zarzuela. La cena se fue animando con los kilómetros de la ruta y la disgregación del grupo en minúsculos grupitos de varias excursiones tipo corte ingles, al gusto del consumidor. Al salir nos fuimos a la casa pero…. las llaves, donde están las llaves… las llaves nos mantuvieron un rato a la fresca.
Resumen:
El día de BTT ha sido bueno,etapa larga, con alguna subida durilla, sol esplendido, comida muy apañada en Alhóndigas. Despiste en el final del día que hizo dejar la furgo olvidada con Toño. El camino bueno y rápido de rodar, buenas pistas. No hay averías reseñables. Casa completa muy bien, la cena bien.
Madrugo, mañana fresca y soleada, paseo por el pueblo solitario, me acerco a la cruz de piedra (hierro) desde donde se me ofrece una vista espectacular del embalse de entrepeñas y la sierra sobre la que destacan las tetas de viana. De regreso, la casera ha preparado un desayuno impresionante, embutidos, tostadas, miel, zumos y dulces de la alcarria etc, hasta rebosar. Nos ha regalado un tarro de miel a cada uno, muy amables, la casa esta estupenda.
Todos a la ruta previo paso por la cruz de piedra. Dejamos el pueblo por dos lavaderos, e iniciamos el descenso divertdo por senda estrecha que la tormenta ha embarrado. A tras queda el Olivar, parece asentado sobre cientos de bodegas que se ubican bajo la cruz de piedra. Me divierto en esta bajada Carlos me sigue, el suelo esta resbaladizo y la bici se va de atrás, el barro ha bloqueado la rueda de los mas lentos. A mitad de descenso entre los matojos salen varias liebres, en lo alto, a lo lejos dos rebecos corriendo. Como todo lo bueno se acaba el descenso llega a su fin, el asfalto nos devuelve al viaducto sobre el embalse. Continuamos por el, algún monolito recuerda el camino de D. Camilo, como es el caso donde se echo una siesta bajo un espino. Dejamos de lado varias urbanizaciones, alguna de ellas llama nuestra atención, tienen por entrada grandes anclas. Dejamos el asfalto por camino de tierra, ascendemos hasta dar vista al pueblo de Pareja, en un pequeño cerro gris, el camino con grandes surcos y rodadas permite alegrias las justas. Entramos en Pareja, calle en cuesta que nos deja en la Plaza Mayor, Plaza de la Constitución es ahora su nombre, con su augusta olma en mitad, la famosa olma de la plaza de Pareja, donde reza un placa de baldosas frente a un viejo arbol herido por el fuego. Tomamos agua y unas fotos, la plaza en obras, no hay apenas gente en la calle, el servicio de limpiezas y poco mas. Vemos algunos de los escudos de armas, desgastados e irreconocibles, que andan repartidos por las distintas calles. Dejamos Pareja entre olivos y frutales, el pueblo que atrás queda presenta desde el camino a Casasana una buena vista. El camino se empina y endurece, es amplio y se convierte en una senda en ascenso por una loma desconchada que se antoja dura solo apta para los mas fuertes. El camino duro por pendiente pero limpio. Como escribio D. Camilo
“, …se sube por el atajo de Roblegila, endemoniado, lleno de piedras como un canchal, y muy pino…”
Tras un ultimo esfuerzo tocamos el asfalto a la mismas puertas de Casasana, el pueblo a nuestra izquierda nos muestra la iglesia, el esfuerzo de la subida nos deja exshaustos junto a la fuente y el lavadero sobre el petril de la carretera descansando y tomando algún fruto seco que extraemos de la furgoneta mientras hablamos de cuando las bicis tenian que llevar matricula… ¡Realmente hay gente muy mayor entre nosotros, je je...!.
Dejamos el pueblo por camino de tierra en buen estado, poco antes de llegar a Corcoles atravesaremos un trigal en descenso con las plantas altas que resulta una gozada. Damos vista a Córcoles, a lo lejos las ruinas del monasterio imponentes de Monsalud, solo quedan en pie los muros verticales, algun que otro arco y un poco de tejado. El sol pega fuertemente, continuamos por caminos. Cruzamos la carretera de Corcoles a Sacedon el camino se empina a traves de zonas montesas tipicamente Alcarreña. La tierra seca a pesar de la lluvia, aunque es probable que aquí no haya caido ni una gota de agua como nos confirman posteriormente en Alhondiga, el suelo color ocre rojizo como si de arcilla se tratara, los arboles parecer churruscados bajo el sol es zona de monte. Nos agrupamos, sacamos fotos a unas flores malvas muy vistosas con alguna mariquita. Coronamos el alto y damos vista entre olivos a un nuevo mar, ¿o es el mismo?, estamos entre los embalses de Entrepeñas y el pantano de Budia. Afrontamos una bajada por buena pista hasta las proximidades del pueblo. Accedemos a Sacedón por un arrabal, entre basura, pasando bajo la carretera por tunel.
Visitamos la iglesia y poco mas. Nos sentamos en una terraza junto a la plaza de toros, tomamos unas cañas y unos huevos cocidos a modo de pincho.
Sacedon es hoy un pueblo centrado en el turismo, por aquello de las aguas del embalse tan cerca de Madrid, tan próximo a Guadalajara. De unas tierras tan áridas y secas como las de la Alcarria se ha obtenido un balneario. Los nuevos tiempos se deja ver en las calles y plazuelas de la villa, en los establecimientos, preparados para las necesidades veraniegas. Me quedo con ganas de ver la imagen del antiguo pueblo de campesinos, el del barrio de la Fuente o el de la Cara de Dios, centro de callejuelas concurrentes, donde apenas se deben de advertir los efectos del turístico en torno al pantano, la pequeña ciudad, la de otros tiempos, con sus encrucijadas y rincones pueblerinos de sabor rural, con sus rejas y balcones. Sacedon curtida y destruida en la guerra civil guarda mil y un leyendas la Virgen del Socorro, la Cara de Dios, etc. etc. que nos podrian trasportar a mil y un lugares de este paraje encantador. En lo alto del cerro un grandioso monumento al Sagrado Corazón de Jesús. El embalse de Entrepeñas, se construyó para producción de energía eléctrica represando las aguas del río Tajo en un lugar angosto de su trayecto. Lugar rodeado de leyendas por lo tenebroso de su entorno. En la parte baja de las llamadas peñas del Infierno se encuentra aún el viejo puente de piedra que cruzaba el río. El panorama, a pesar de la construcción del embalse, residencias y jardines accesorios, continúa siendo de singular belleza.
Dejamos Sacedon por carretera hasta un mirador en el que nos detenemos, bajamos a un cargadero de mineral y vemos el embalse en todo su esplendor. Continuamos atravesando un tunel bajo la montaña. Dejamos el embalse de Entrepañas tras cruzar su presa y girar a la derecha en descenso por una buena carretera a la busca de Auñon, a nuestra derecha impresionantes cortados de arenisca llenos de pinos enmarcan el cauce del rio, son de gran fuerza y belleza paisajistaica. Abandonamos la carretera principal con la vista puesta en Auñon, sol de justicia, iniciamos ascenso al pueblo, entramos a su plaza mayor en marcada por su iglesia con abside redondo y un ayuntamiento con forma tipica de la zona. A la entrada marcas y señales de rutas senderista y de BTT que en algún caso coinciden con nuestro destino. Dejamos el pueblo por carretera, el calor es sofocante. Campos de olivo son nuestros compañeros. Tras la subida, bajada al fondo del valle a la vera del río entrando al pueblo de Alondiga próximos a un pequeño parque donde juegan a la petanca y en que se ve una picota de piedra junto unos bancos del mismo material, un pequeño parque sombrío y fresco, nos detenemos, a la sombra. Localizamos el centro del pueblo, una pequeña plaza con una fuente de varios caños, un árbol en un circulo de piedra que nos sirve de asiento, no se trata de una plaza porticada. Comemos en un bar en la plaza mientras baja el sol, nos atiende una chica rumana que se desenvuelve con soltura, mientras prepara la comida, nos sirve cañas, pone la mesa, nos damos un pequeño baño en la fuente, tomamos mas cañas, paseamos por el pueblo. Hablo con unas personas autóctonas del tiempo y del pueblo. De regreso otras cañas y nos sentamos a comer. Ha preparado rápidamente para todos, espaguetis a la boloñesa, lomo frito con patatas, helados, vino, gaseosa, cafés por 71 euros.
Dejamos Alhóndigas camino de Berniche por una buena pista en ascenso por la orilla contraria y en sentido inverso al que veníamos. En el camino una persona con muchísimas cabras, mas de 600 cabezas, nos saluda, Jorge habla afablemente con él. El cabrero y el viajero. Entramos en Berniche próximos al cementerio y a la Ermita de la Virgen del Collao. Subimos al pueblo, visitamos su iglesia y la plaza mayor. Tomamos camino de Peñalver,subimos al altiplano, verde sembrado de cereales muy bonito, el camino ameno nos deja frente al pueblo del mielero. Peñalver, en un enclave hundido entre riegas, descendemos al río y subimos a ver al mielero. Conversamos con una anciana quien nos indica que ayer estuvieron muchos “carreristas” por esta pista. Visitamos la plaza, típica de esta zona con sus zona porticada y el reloj del ayuntamiento. La picota de Peñalver nos despide y da paso a una buena pista de tierra entretenida que en unos 10, 11 kilómetros de buena marcha nos deja en Tendilla donde tomamos unas cañas. El pueblo es curioso, Don Camilo. lo define como
“… Un pueblo de soportales planos, largos como una longaniza y estirado todo lo largo de la carretera…”
Plaza amplia y porticada, con referencia en sus fachadas a sus hijos en la aventura americana. Damos una vueltecita, referencia de Don Camilo a su amigo Pio Baroja y su olivo. Tras el descanso dejamos el pueblo por una empinada pista que se hace durilla. La pista nos deja en Fuentelviejo, donde paramos muy poco tiempo a ver una fuente con una escultura de un labrador sobre la misma. A dos kilómetros mas o menos una fuente en la carretera nos invita a detenernos lavar un poco la bici y beber, estamos próximos al final del día. Continuamos ruta hasta Moratilla de los Meleros, estamos rotos y secos. Nada mas entrar en el pueblo, sentados en la cera, tomamos varios quintos de cerveza. Es el atardecer, las golondrinas revolotean como locas hacia el W.
Falta Toño no ha llegado, nos extraña, no conseguimos comunicar con el. Por fin llega y tenemos una pequeña y bociferada charla que termina en eso, nada de otro mundo. J. A. describe este episodio de esta manera, parado en Fuentelviejo,
“Se ven dos grandes antenas parabólicas, ¿buscaran vida en otros planetas?, ¿serán de vodafon?. Tengo plena certeza de que aun no han pasado por aquí. Estas esperas me ponen nervioso. ¿Si han pasado y no estaba?. ¿Si necesitan algo?, son pueblos mudos silenciosos, vacíos de gentes. Cada ruido diferente al trinar de los pájaros indago y observo. ¿Serán ellos?. La telefonía no vale nada por aquí…” “…20:30 llama Morcate, tras mas de 20 intentos de comunicación localizo a alguno, ya están en Moratilla, son la pera, iva de jefe…. Y como un spunick….”
El alojamiento hoy es una casa completa de varias plantas, en superior, en la habitación tienen un futbolín, dardos … juegos y dos camas, muy bonito. A mi me ha tocado la habitación infantil muy decorada con muchos muñecos y una camita blanca. La dueña de la casa nos ha regalado un bote de miel a cada uno, ha estado de turismo en Asturias en Taramundi. Tras la ducha y el cambio de ropa salimos a dar una vuelta, tomar unas cervezas y cenar al bar de las escuelas. Nos atendió un camarero rumano muy amable, quito la TV y nos ofreció un recital con el DVD de sevillanas y música flamenca, hasta que debió ver nuestras caras y le dijimos que éramos de Madrid para arriba, entonces saco los chotis y la zarzuela. La cena se fue animando con los kilómetros de la ruta y la disgregación del grupo en minúsculos grupitos de varias excursiones tipo corte ingles, al gusto del consumidor. Al salir nos fuimos a la casa pero…. las llaves, donde están las llaves… las llaves nos mantuvieron un rato a la fresca.
Resumen:
El día de BTT ha sido bueno,etapa larga, con alguna subida durilla, sol esplendido, comida muy apañada en Alhóndigas. Despiste en el final del día que hizo dejar la furgo olvidada con Toño. El camino bueno y rápido de rodar, buenas pistas. No hay averías reseñables. Casa completa muy bien, la cena bien.
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Hola:
Me llamo Mikel Azkorra Larrondo y estoy preparando mi viaje veraniego y tengo previsto llegar a Sacedón desde la zona de la presa y quería saber si tras la zona de los miradores y cruzar la carretera, hay algún espacio para poder superar la valla que hay en el acceso a la carretera antigua. En el Street View me da la sensación de que hay un hueco en una de las esquinas, pero querría confirmarlo contigo, ya que he visto que pasaste por ahí.
Es en el kilómetro 35 de esta ruta que compartiste con todos aquí, en wikiloc: 2010-05-24 Viaja Alcarria 365 Km literarios (III): El Olivar - Moratilla de los Meleros 88 km.
Muchas gracias y para lo que necesites desde Bizkaia.
Hola Mikel, Podría decirte cualquier cosa pero prefiero serte sincero, he revisado mis anotaciones y los documentos y papeles que guardo de la ruta junto con las fotos, no encuentro nada que indique que en aquel momento hubiera alguna paso cerrado, con esto no quiero decir que sea así, pues ya han pasado unos años y no me recuerdo al 100% de que sea como te digo. Lo siento, si pudo ayudarte en cualquier otra cosa aquí me tienes . Gracias
un saludo
Gracias de todas formas. Como tengo que pasar por ahí, si está cerrado iré por la carretera actual.
Lo mismo, si necesitas algo desde el norte, aquí me tienes.
Un abrazo.
Persona agradable y atenta