2014-06-02 Circular por las Merindades. GR 85 (I): Quintanilla del Rebollar - Villasana de Mena

Etapa 1º Quintanilla del Rebollar-Villasana de Mena.

Llegamos de Gijón sobre las 11:30 de la mañana a la casa del parque de Quintanilla del Rebollar. Se encuentra cerrada. Iniciamos ruta. Esperábamos que el día de hoy no fuera duro sino mas bien un aperitivo para entrar en las Merindades mañana con fuerza. Iniciamos senderos que nos llevan por el cañón del Trema hasta Cornejo, mas tarde por el desfiladero de la Hoz a Homillalatorre. Este tramo para calentar pierna por monte bajo con bastante piedra en ascenso y senderos con una bajadita corta pero divertida de piedra. Desde Homillatorre a Espinosa de los Monteros nada reseñable, pistas buenas de tierra. Espinosa de los Monteros, bajo la Torre de Los Velasco, en el área recreativa nos bañamos en las piscinas naturales(sin poner), bajo las cataratas que forma el río y comemos las vianda que afablemente pone a nuestra disposición el conductor. Recorremos el pueblo, las casas blasonadas y la plaza mayor, un café y seguir ruta. Dejamos Espinosa siguiendo buenas pistas, atravesamos varios pueblos, la ruta es tal como esperábamos sin grandes sobresaltos hasta que nos damos de bruces con la explotación de la madera y los madereros que hacen imposible a la altura de "los saltos de agua" transitar, Realizamos un paso con la bici de la mano por una vaguada, pero el camino finalmente se cierra en el desmonte. Por un lado una cortada al río con un túnel de agua y por el otro maleza y árboles caídos. Buscamos salida sin dejar de visualizar el avance del camino que perseguimos, finalmente nos metemos entre la maleza atravesamos bosque entre zarzas, maleza y árboles caídos, por fin después de mas de una hora de búsqueda damos salida al laberinto a lo que parece ser una pista muy trabajada por las maquinas. Portaremos arañazos durante toda la semana por las Merindades. Varios pinchazos obligan a parar la marcha. El camino que se abre ante nosotros es pista embarrada en descenso hasta cruzar el río, marcada por la extracción de la madera que hace las delicias de los que gusta patinar y hacer equilibrios y disgusta a lo antibarro. Nos las damos felices una vez superado este tramo que dejamos subiendo por un camino con el río a un lado y varias cataratas que alegran la vista, cuando coronamos y suponemos un descenso vertiginoso y divertido la cosa se complica el camino esta embarrado y lleno de huellas de ganado que hace que en muchos puntos la rueda se incruste casi hasta el eje. Otro par de pinchazos. Dejamos el barro para pasar a una bajada un poco trialera, de piedra que por fin permite una alegría aunque esta termina enseguida en Arceo. Resta asfalto y pista sencilla hasta Villasana de Mena donde hicimos noche en el Hotel Cadagua. Finalmente hoy ha sido mas duro de lo esperado por los contratiempos, hemos llegado sobre las 20:45 con las maquinas llenas de barro y la necesidad de lavar junto con algunos problemas mecánico que solventamos. El paisaje bonito con los cortados a la vista si bien no nos hemos metido mucho a ellos aun. El día se deja atrás con una buena ducha, el deleite de la gastronomía local, degustación de croquetas, morcilla frita, lechazo en horno de leña con ensalada y hojaldre con crema tostada, vino de la tierra y por supuesto una distendida conversación entre colegas.