2015-9-19 Somiedo I (brañas):Villar de Vildas-Peral-Puerto-Cueta-Valle de Lago-Pola

Ruta NO circular con salida en Villar de Vildas y final a Pola de Somiedo, dificultad alta, tanto física como técnica. Son unos 1900 m de ascensión positiva en 46 km de recorrido, con varios tramos no ciclables. Ruta impresionante que contiene puertos de alta montaña, parajes deshabitados, algo de asfalto, paisajes de belleza sin igual, gastronomía, repechos potentes, subidas largas y larguísima bajada final que hace las delicias de cualquier biker.
Dejamos Gijón sobre las 7:45, nos reunimos en Villar de Vildas junto a un café 12 + 1 (furgón) listos para iniciar ruta. Mañana fría con algo de niebla que presagia un día soleado.
A las 10, ya sobre las bicis, abandonamos Villar de Vildas, ascendemos por una pista hormigonada con algún repecho fuerte, atravesando la niebla hasta la braña de la Pornacal, que atravesamos por entre los teitos. Nos detenemos a curiosear los mismos y hacer unas fotos. Hemos superado las nubes y la vista es espectacular, verdes montañas contra el cielo azul intenso y la niebla blanca rellena el fondo del valle. Continuamos recorriendo el valle en sentido longitudinal hacia la braña de los Cuartos. Cruzamos un grupo de novillas con el vaqueiro y su hijo que se muestran muy orgullos de su ganado. A nuestra derecha una cascada de agua destaca entre los prados. Dejamos a la izquierda el camino que hemos de tomar tras visitar la braña los cuartos. Los cuartos es una braña más sencilla que la Pornacal con teitos redondos. Retornamos sobre nuestros pasos y tomamos la pista que en un corto tramo se vuelve senda nada mas cruzar un riachuelo, y mas tarde pradería que sube zig zageante por el margen izquierdo de la riega hasta lo mas alto, es 1,7 kilómetros de porteo arrastrado con una elevada pendiente, 55 minutos después no estamos en lo mas alto pero si en el collado de la Enfistiella, cambiamos la vista de valle y el camino se hace ciclable. Ha sido durillo. Si un valle es bonito el otro no le va menos. Seguimos subiendo, mas fácilmente y ya sobre las bicis, a un lado una bebedero con una charca semi-seca marca el inicio del descenso a la Peral, es un tramo entre piornos, de llaneo poco marcado y campo a través. Al final de este tramo un bebezón con agua fresca nos da vida, luce el sol, no hay una nube, abunda el ganado en especial vacas y novillos, se adivina la pista que nos ha de llevar tras un largo descenso a la Peral, se trata de un pista hormigonada a tramos, que a veces abandonamos para cortar los zig-zag por los prados buscando mas diversión si cabe.
La vista del pueblo de la Peral contra los contrafuertes del puerto no deja indiferente a nadie, si bien el pueblo luce más bonito desde la carretera que sube al puerto. En la Peral nos encontramos con el furgon de apoyo que nos da agua fresca, acuarios, fruta, chocolate y frutos secos. En esta breve parada una rueda revienta mientras estamos departiendo.
Salimos a la carretera que sube desde Pola de Somiedo al puerto (AS-227) recorremos unos 3 km de asfalto en suave pendiente que nos dejan en el puerto, Poco mas adelante abandonamos la carretera por una pista ascendente próxima al cementerio. Aquí nos abandonan 4 personas, continuamos 8 +1( la furgo ha de dar un largo rodeo para llegar a la Cueta). La pista con alguna que otro repechón avanza en busca del collado, en este tramo, un rebaño de cabras protegido por un grupo de mastines que nos rodea y acojonan mientras el pastor pasa olímpicamente de ellos, nos hace sufrir y perder el norte, salvo al hombretón del grupo. Por fin el tío reacciona y volvemos a la senda buena. Parada para quitar el miedo donde “doc” aprovecha para realiza una cura de emergencia en una espinilla. Lleva de to….le coloca un aposito “salvaslip”…..y pista.
Próximos a cruzar un riachuelo que cierra una portilla de alambre, la abrimos cruzamos el mismo y damos al collado donde iniciamos un corto pero entretenido descenso a la Cueta de Babia, el pueblo más alto de la provincia de León.
Entramos por la “fuente divina”, sobre la mesa, en el exterior de bar, próximo al río, nos disponemos a comer lo que lleva la furgo apoyado por un poco de queso de cabra, cerveza bien fría, postres caseros cafés y chupitos. La sobremesa es amena y no tenemos prisa, el día lo merece, y el lugar también.
Tras la misma retomamos la ruta, la arrancadera cuesta pero el paisaje y el día lo merecen, algún repecho potente, en una larga subida que se corta con una avería, rotura de cadena, reparamos y continuamos pero al poco otra vez. La cadena rompió como consecuencia de haber perdido los tornillos de fijación del los platos. Nos damos cuenta que faltan 2 y los otros dos están a punto de caerse, reparamos y rezamos para que con este apaño podamos concluir la ruta. La ascensión se hace mas dura próximos al prau Chaguezos donde bajo los contrafuertes se encuentra un refugio, a partir de aquí el camino enrasa por sendas de ganado técnicas y complejas de ciclar. Próximos a coronar hay un tramo prácticamente imposible de rodar habiendo que superarlos empujando la bici. Caen las sombras y el contraste realza más si cabe el paisaje. Hoy hemos tenido a vista varios de los picos importantes de la cordillera, el Cornon, los Albos, peña Orniz,…..Concluido el mal paso solo resta dejar volar la bici y disfrutar de la técnica y la velocidad, bajamos hacia la braña de Murias Chongas, a nuestra derecha dejamos una represa que aporta agua al lago para el aprovechamiento hidroeléctrico por parte de nuestra empresa y patrocinadora EDP. Nos paramos a ver la peña del pescador de “pescanova” mas adelante desechamos el camino que nos llevaría al lago del valle. Continúa un largo y espectacular descenso hacia el Valle, Coto y la Pola de Somiedo. Unos primeros kilómetros por la margen izquierda del valle hasta casi coincidir con la pista principal, abandonamos la misma para seguir mas a la izquierda por la margen izquierda del río que cruzamos por puente. Unos kilómetros poco técnicos pero divertidos que nos dejan en la iglesias del Valle, no entramos al pueblo, las vistas del mismo son bonitas, continuamos y a la salida de Valle, a la vista del embalse da inicio a una trepidante bajada bordeando el “castillo” peña así llamada por la zona, fuertes pendientes, tramos de piedras, un río, un viejo puente de piedra, bosque, murias, musgo, algo de barro y mucha diversión nos llevan a el pueblo de Coto, se trata del hayedo más extenso del parque natural. Creemos concluida la diversión pues salimos a carretera… pero no, tras una curva, el cementerio y un nuevo camino, varios kilómetros de adrenalina más para completar un día esplendido de bici, compañía y buenas sensaciones. Pola Somiedo, damos por concluida esta primera jornada a la que resta ducha, cena, diversión y un sueñecillo. Mañana las maquinas estarán dispuestas para una nueva aventura.
Salvo que se disponga de un plumin muy afilado o se fuere un escrito avezado resulta muy difícil describir este paraje y trasmitir la sensaciones que se tienen en estas rutas cuando el sentimiento de la bici no son kilómetros por kilómetros… lo he intentado.