2017-11-14 Románico Palentino-Cantabro I

Esta ruta se incluye en un grupo de 4 rutas circulares por el románico Palentino-Cántabro que ha servido de hilo conductor para rodar por la montaña Palentina y el nacimiento del Ebro.
Esta primera ruta se centra básicamente en visitar las capillas del románico palentino, bordeado el embalse de Aguilar de Campoo visitando las múltiples iglesias. La ruta discurre por la planicie palentina por buenas sendas sin dificultades técnicas con continuas subidas y bajadas no muy intensas, pero si constantes entre pinares, robles y campo abierto. El paisaje se ve mejorado con las cumbres nevadas.
Es de tener en cuenta el tiempo invertido en la ruta pues hay multiples paradas que alargan la ruta en el tiempo considerablemente, por ello, quizás esta no sea la época más recomendable por las horas de luz, aunque si lo es por la limpieza del ambiente, sin nieblas, sin nubles, sin contaminación y cielo muy despejado.
Llegamos a Aguilar de Campoo, al monasterio de Santa Maria La Real donde nos alojamos, un sitio con encanto y muy buena atención personal, las habitaciones pequeñas pero distintas a lo habitual…
Tras dejar las cosas y montar la bicis iniciamos ruta hacia la cabecera de la presa, iniciando asi erróneamente la salida que teníamos prevista, …después todo es seguir ruta de iglesia en iglesia como si de “tomar” cromos se tratara.
Es de mencionar, al menos en esta época, que no se ve gente en los pueblos, no hay bares abiertos ni lugares para comer nada, es imprescindible llevar avituallamiento.
A la tarde, con la caída del sol hemos visto en el bosque dos venadas que han huido a nuestro paso y en la zona de Montecillo otros dos pastando en campo abierto.
Las iglesias están muy bien conservadas y disponen de carteles informativos, así mismo más de una dispone de teléfono para llamar a el/la guardesa y visitar su interior. La ubicación de algunas iglesias es espectacular. Varias necrópolis rupestres acompañan los emplazamientos. Es de reseñar la cantidad de cementerios adosadas a las propias iglesias, pequeños y bien atendidos.
Desde Vallespinoso de Aguilar, tras visitar la ermita de Sta. Cecilia decidimos irnos a la carretera pues la noche se viene encima.
La ruta está muy en boga gracias a Calleja y su programa “voy volando” como así nos indican en el hotel.
Ruta bonita y entretenida si bien de las 4 rutas que componen este grupo esta es quizás la menos atractiva desde el punto de vista de la bici.