2017-11-16 Romanico Palentino Cantabro III: Bisontes-Invernal-Brañosera

Esta ruta se incluye en un grupo de 4 rutas circulares por el románico Palentino-Cántabro que ha servido de hilo conductor para rodar por la montaña Palentina y el nacimiento del Ebro.
La tercera ruta es la más dura, la más bonita a nivel de bici y en la que se encuentra el techo de estos 4 dias.
Dejamos Aguilar de Campo siguiendo la carretera principal hasta Matamorisca, población que ya vistamos junto a su iglesia el primer día de ruta. Poco más adelante dejamos el asfalto para recorrer un tramo del primer día que nos llevara hasta Bustio de Santillan, con sus iglesias, labrador y homenaje a la mujer, y a Villanueva de la Torre donde abandonaremos definitivamente el camino conocido para subir a Monasterio por una pista asfaltada que deja a un lado la ermita de Sta. Marina. A medida que ganamos altura las vistas se hacen más amplia hasta llegar a Monasterio donde nos rencontramos con el románico en el Monasterio-Iglesia de la Asuncion, el mirador del Campuco y un pequeño y emotivo recuerdo a una mujer de 103 años. Llama nuestra atención una llábana en lo alto de la montaña de buenas dimensiones sobre el cielo azul. Aquí un cambio de planes sobre lo inicialmente previsto (San Martin de Parapertu) nos lleva a Muda con su iglesia, el mirador de Maria Auxiliadora con su ciento y muchas escaleras y posteriormente a San Cebrian de Muda donde se encuentra el centro de interpretación del bisonte europeo y motivo por el que hemos cambiado la ruta. Tras subir al centro nos encontramos, que se trata de una reserva, para visitarla admiten grupos mínimos de 4 personas a 17 euros/persona y sobre todo…en esta época está cerrado…si nos hubiéramos informado antes…No nos lamentamos pues la ruta que se abrió ante nosotros fue espectacular. Nos encontramos con un tractor que resulta ser el encargado de llevar comida a los bisontes, preguntado nos indica que es una reserva y que no se puede pasar pero que quizás los veamos desde el camino. Iniciamos un largo ascenso que nos ha de llevar a la invernal por un bosque perfectamente conservado, con un colorido otoñal, pisaremos nieve a más de 1600 mts y veremos la calera de Brañosera como si de un cuento de bosque encantado se tratara.
Al poco de comenzar la subida una fuente alargada en la que nos paramos a tomas unos frutos secos y unas manzanas, poco después el desvío a la reserva marcado con un importante cartel, allí se indica la existencia de un vallado electrificado, nos metemos unos metros por la pista desde la que vemos varias construcciones de madera y nos volvemos, llega el encargado dando viajes con alimento para los bisontes…no podemos pasar ni visitar. Iniciamos un tramo de ascenso continuado sin descanso por lo que será lo más bonito de la ruta hasta llegar a la confluencia con el GR1 y el camino que sube desde Parapertua, aquí las vistas son impresionantes y dan idea del tamaño de este espectacular hayedo. Seguimos subiendo, una vez superado el bosque, el piorno y la nieve hacen su aparición, nos cruzamos con las caballerizas azuzadas por un todo terreno. Una cabaña es la única construcción que vemos en todo el camino. Coronamos en la invernal, pradería abierta en la que se cambia de valle y en la que se encuentra un cargadero de ganado. No sopla el viento, no hace frio, sol espléndido, cielo azul, algo de nieve y un largo camino en descenso se abre ante nosotros. Bajada sin grandes dificultades, entretenida, se inicia con alguna placa de hielo y nieve, nos adentramos de nuevo en el bosque que toma su máxima expresión a la altura de la Calera de Brañosera. Espectáculo de colores, rincón de bosque de postal, limpio saneado, un gozo para los sentidos, bajo un árbol, semidespistada, a la derecha de la calera, una pequeña capilla con una diminuta virgen. Larga parada, muchas fotos. A la vista, en la otra ladera, Brañosera, primer ayuntamiento español
“La Carta Puebla que el conde Munio Núñez otorgó en el año 824 a los pobladores de Brañosera hizo que este pequeño pueblo de la provincia de Palencia pasara a la historia. Hoy, más de mil años después, sus habitantes lo celebran con orgullo cada 13 de octubre”.
Nos vamos continuando descenso a través del bosque hasta encontrarnos con la carretera en Barruelo de Santullan donde encontramos un bar a orilla de la carretera para reponer fuerzas e intentar cargar el GPS (no fue posible). Desde aquí retomamos el románico por varios pueblos, jugando con caminos, carretera y vías de tren. En Villavega de Aguilar encontramos el teleclub abierto donde nos ponen a cargar el GPS un poco mientras nos hidratamos, solo nos llegara hasta poco más allá de Nestar…. Sin GPS y próxima la noche optamos por irnos al carril bici que discurre paralelo a la carretera que nos ha de llevar a Aguilar de campo a entrar próximos a Sta. Cecilia y el castillo. Nos han quedado por ver las dos últimas iglesias ….San Antonio de Padua…”la mía” … lo siento a la fuerza ahorcan.
Ruta que discurren completamente por buenos camino, no presenta dificultad técnica, aunque físicamente es exigente.