4/2016-Miranda Ebro-Haro-Cuzcurita-Sto. Domingo Calzada-Ezcaray

La etapa no presenta dificultades en su recorrido, puesto que la ascensión final desde Castañares de Rioja hasta Ezcaray se realiza por una vía verde, con una pendiente media propia de este tipo de pistas (3%).
Se deja Miranda de Ebro bordeando el río Ebro por una pista (en algunos tramos sendero) de 7 kilómetros hasta Ircio. El Mirador de Castilla de esta localidad permite disfrutar de excelentes vistas panorámicas del valle del Ebro en estas latitudes.
Hasta Haro se circula por carretera. Las abruptas montañas de los riscos de Bilibio, donde se ubica la ermita de San Felices, proporcionan la excusa para realizar una breve parada y recrearse con la belleza del entorno.
La ruta discurre por los alrededores de Haro, pedaleando en un inconcluso trazado circular por carreteras, pistas y caminos. Se transita por La Bastida, San Vicente de Sonsierra – pueblo cargado de historia, con su castillo y su iglesia guardianes del valle desde los alto del otero –, Briones, con parada en el Museo Vivanco de la Cultura del Vino (visto únicamente su exterior), Caslarrena y Ciburi.
En Cuzcurrita de Río Tirón se reponen fuerzas en Casa Guillermo a base de un menú de degustación de múltiples platos – 24 indica la propaganda, algunos menos son los contabilizados realmente --. Pese a algunos modos no muy adecuados del responsable del establecimiento en las postrimerías del ágape, resulta una opción más que aceptable para degustar las vianda y caldos que allí se ofrecen. Una siesta reparadora en la vereda del río Oja Glera, a los pies del puente de piedra y de la iglesia, pone fin a esta parada.
La llegada a Ezcaray se realiza por una vía verde, paralela al cauce del río Oja, por un entorno agradable y sin dificultad alguna.
Apartamentos Rincones del Vino es el lugar de pernoctación. Antigua fábrica textil, fue restaurada y convertida en edificio de apartamentos con dependencias espaciosas, dotadas de todo lo necesario para la estancia de uno o más días. Dispone de lavadora y secadora de uso gratuito y manguera para limpiar las bicis. A todas luces recomendable si se circula por la zona.
La visita al más que interesante y señorial casco histórico y el disfrute de su tapeo ponen fin a una jornada relajada e interesante, bañada por el sol, intenso en algunos momentos. Lo mejor, sin duda la compañía del grupo y de cada uno de sus integrantes. Bien comidos, bien bebidos, bien acompañados… ¿Alguien da más?