Acebuche Bike Monterrubio - Puerto de la cabra (Quintana)

Pufff!!!! Posiblemente la ruta más chunga que he hecho en los 3 meses que llevo con la bici.
Salimos de la iglesia de Quintana de la Serena después de haber sufrido varias peripecias automovilísticas para llegar allí.
Fuimos por caminos muy comodos como el barco que esta en medio de una calma chicha que muy pronto se convierte en tempestad.
Empezamos a subir a partir del kilómetro 3, una subida que te va acercando a una sierra, la que ves venir inexorable y por la que no queda más remedio que pasar.
2 kilometros al 12% (a mi se me hizo el 40% o el 50% o el 60% o yo que se), con camino descarnado y piedra suelta que me hacían sentir que mis piernas no eran mias.
Cuando ya parece que se ha acabado por que empieza una bajada, te vienen otros 200 metros que te dejan bien suavecito.
Luego enfrentamos la bajada, en la que tampoco podias descansar porque era la bajada mas técnica a la que me he enfrentado y en la que habia que estar 100% concentrado.
Una vez terminamos esto y con ganas de que el despertador no me hubiera sonado llega un terreno en el que se alternaban tramos comodos con repechos cortos de 200-300 metros que eran autenticos muros y que hicieron que me comiera y bebiera todo el arseñal de barritas y aquarios que llevaba a cuestas.
Sabíamos que aun quedaba el Puerto de la Cabra que según nos habían dicho, era durísimo. El grupo de Quintana y nuestro integrante mas en forma subieron por un cortafuegos pero mi religión me impedía hacer tal burrada y los otros integrantes del club subimos por otro camino "más comodo" con una pendiente media del 8% y máxima del 15%. Depués ya todo recuperación hasta Quintana por buenos caminos.
Decir que a mi la primera subida se me hizo más dura que el puerto de la cabra. lo bueno es que para el último puerto hay varios caminos distintos para subir, por lo que en función de como llegues puedes optar por subidas más suaves o más empinadas.
Decir que aunque parezca que ha sido el infierno, hemos vuelto bastante contentos y también decir que la gente del club de Quintana subían los puertos y los repechos como profesionales, por lo que achaco la dureza a que nuestra forma física todavía deja mucho que desear.

En fin, volveremos pero no creo que en los proximos 3 meses, primero tengo que olvidarlo.