Boo de Piélagos-Las tetas de Liérganes.

Ruta que nos lleva desde Boo hasta Liérganes por carreteras secundarias hasta Astillero y por la antigua general de Santander a Bilbao, pasando por Heras, Solares y La Cavada. Este tramo se podría realizar perfectamente por caminos mas rurales pero, la falta de tiempo recomendaba una vía más rápida.

En el pueblo de Liérganes se ubica esta montaña tan característica de la zona, (aunque en realidad son dos), denominadas las tetas de Liérganes, como ya se puede uno imaginar debido al parecido antropomorfo que poseen, aunque su nombre original fue Picos de Busampiro. Lo constituyen dos cimas denominadas Cotillamón y Marimón, quedando el final de la carretera entre estas dos cumbres. Justo en la cima podemos apreciar unas maravillosas vistas del pueblo de Liérganes, Peña Cabarga hacia la derecha, y si el día es claro se puede observar al fondo la ciudad de Santander con su preciosa Bahía.

La subida es de 6,5 kms y es a partir de los primeros 500 m cuando encontramos las primeras rampas duras. Continuamos la ascensión con pendientes que sobrepasan el 12% y el 13% en varios tramos hasta el kilómetro y medio donde suaviza un poco, sobre el Km 2'6 tomamos una curva de herradura con valores del 16% que enlazan 100 m más allá con otra del 14% y que nos llevan hasta el tercer kilómetro donde encontramos un merecido descanso de poco menos de un kilómetro donde una pequeña cuesta de unos 150 m, con un trocito del 12%, nos vuelve a dirigir a otra bajadita esta vez más corta de unos 300 m y a partir de ahí comenzamos de nuevo a subir, justo en el momento que encontramos un pequeño cruce a la derecha y que dejamos pasar dirigiéndonos hacia la cima en una rampa del 10% que enlaza con una curva de herradura del 13%. A partir de ahí el camino suaviza entorno al 5-6%, hasta adentrarnos en el último kilómetro donde la carretera se vuelve bastante tosca, con muchos socavones y grava suelta que entorpece la marcha pero donde no podemos parar ya que vuelven las rampas a ponerse entre el 11 y 12% con algún punto cercano al 16%, ya casi en la cima, una bajadita que nos lleva hasta el otro lado del valle, donde realizamos una pequeña ascensión de unos 100 m hasta llegar a un pequeño mirador.

Las vistas desde el mirador son increibles y sólo por ver el espectáculo merece la pena la ascensión.

Unas fotos de rigor y vuelta para casa, esta vez bajando hasta Pámanes y cogiendo la parte sur del macizo de Peña Cabarga hasta Obregón, desde donde subios hasta Riosapero, llegando después a Parbayón, donde procedemos a ascender el Alto del Churi, desde cuya cumbre descenderemos a Puente Arce y de allí, paralelos al río Pas, hasta el punto de origen.

La hidratación no es problema por la cantidad de puntos de agua que hay en la ruta.