BTT Circular a Mampodre desde Las Salas

Vuelta al macizo de Mampodre, en este caso, desde Las Salas.
Salimos de este pueblo, dirección Lois, camino de Llorada, ahí se gira a la izquierda para coger el camino que, a través de la collada de Lito, nos lleva hasta Acevedo. No hace falta llegar a este pueblo, si bien , merece la pena pasar a verlo. Ahí giramos a la izquierda, y enfilamos por un camino que va hacia Mampodre. Al final el camino se pierde entre los prados, ahí hay que superar una collada, serperteando como se puede. Una vez en el alto, fijarse que el track hace un bucle, coger el que sale a la izquierda, por el lomo, para bajar hasta el camino que va a Maraña. No hace falta hacer esa vuelta, ahí me lie para encontrar el camino.
Una vez en Maraña (se puede y se debe parar en el albergue La Parada, para repostar), cogemos el camino de Riosol, y enseguida vemos una nave ganadera muy grande a la izquierda. Cogemos por ese camino (fijarse que yo me pasé para arriba, no hacerlo). Este camino nos lleva a la collada de Tronisco. Ya casi arriba hay dos pasos: uno por el que subí y me volví a bajar (es que utilizan los 4x4, se ven muy bien las roderas por la hierba), y otro, cogiendo una vereda a la izquierda un poco antes de ese subida, por la que va el track . Esa vereda nos lleva al camino que baja hasta Cofiñal. Tremenda bajada.
Cofiñal , Lillo y Solle, ya por carretera, no queda más remedio. Una vez en Solle, seguimos el camino que sube por el río arriba, pasamos una collada, tras unas rampas que nos harán “echar los bofes”, que da vista el magnífico valle de Linares. Cruzamos pegando a los corrales, el camino gira un poco a la derecha y luego a la izquierda para pasar por otra vallina que no vemos desde los corrales. A partir de ahí la senda por prados y piornales. En algunos tramos no queda más remedio de echar pie a tierra, pues los piornos nos impiden ir montado en la bici, pero es poco tramo.
Llegamos a la collada de Linares, con unas vistas espectaculares, y bajamos de frente. Cuidado con esta bajada, tiene muchas piedras. Al llegar a una revuelta, donde se ve una caseta y un pilón, bajamos por ahí (ojo, no seguimos el camino principal, que remonta a la izquierda). Al principio medio senda, luego camino, nos lleva a Lois de nuevo (aquí ya se puede repostar sin miedo, en el bar La Cátedra de la montaña), pues ya es todo bajar hasta Las Salas.