Cádiz - Polvorines de Punta Cantera - La Casería de Ossio (San Fernando), 2020-08-19

Fácil e interesante ruta por la Bahía de Cádiz, entre la capital gaditana, los Polvorines de Punta Cantera y la Casería de Ossio. La ruta transcurre por carril-bici, pistas y senderos y es bastante llana. Nuestro objetivo es enlazar en bici desde Cádiz con una corta ruta que ya habiamos realizado a pie por Punta Cantera y la Casería.

Salimos de Cádiz-Estadio por carril-bici hasta la pista del antiguo Cordel de Cádiz o Camino de Santibáñez, paralela a las vías del tren. Pedaleamos en dirección a San Fernando deteniéndonos en varios puntos de interés paisajístico y cultural: el Amarradero de Santibáñez, el Molino del Arrierillo (pendiente de restauración) junto al Marambay, y la Salina de Dolores. Desde todos ellos, tenemos buenas vistas al interior de la Bahía y las marismas.

Al llegar a San Fernando, bordeamos Bahía Sur por el sendero de las marismas hasta llegar al Caño Herrera, donde se conservan los restos de un antiguo Molino de Mareas. El conjunto está construido en piedra ostionera.

Continuamos por los estrechos senderos de los Polvorines de Punta Cantera entre lentiscos y acebuches (!cuidado con algunos restos de alambrada a los lados! ). Observamos distintos tipos de polvorines: los más antiguos y con más interés arquitectónico son los de San Bernardo y San Jerónimo, del siglo XVIII; los demás son de hormigón y pertenecen al siglo XX. En el extremo de Punta Cantera, nos detenemos a contemplar sus interesantes murallas, garitas y el Muelle de la Pólvora de S. M. (siglo XVIII), que tuvo un papel destacado en la defensa del comercio con América. Además, la Bateria de Punta Cantera participó activamente en la derrota de la flota francesa de Rossilly en la batalla de la Poza Santa Isabel, a principios de la Guerra de Independencia (1808).

Más adelante, encontramos otra construcción de gran interés histórico, un Muelle del siglo XVII con sillares de piedra ostionera bien encajados. Esta construcción parece tener raíces romanas.

Finalmente, llegamos a la Casería de Ossio, un lugar con un encanto especial. Después de contemplar sus pintorescas construcciones a la sombra de altos eucaliptos, y las bellas vistas al saco de la Bahía, emprendemos el regreso.