Camino de Guadalupe II, La Mata Villar del Pedroso

Pedaleando por una pista asfaltada, con buena temperatura atravesamos aldeas olvidadas hasta del tren que pasa por ellas. En Erustes comenzaron a aparecer bancos de Arena que dificultaban nuestra marcha, uno detrás de otro lo que nos hizo esforzarnos mas de la cuenta y no se nota en el perfil. Tuve que volver sobre mis pasos para recuperar la Lumix que se había caido en una parada. Curiosa zona con muchas higueras y fábricas de higos secos. Después de Cebolla nos acercamos al Tajo. Desapareció la arena pero el camino tenía mucha hierba lo quelo hacía mas entretenido y mas duro. Llegamos a Talavera, un horror atravesar ciudades por el centro . Salida por pistas que llevan a la ruta del Ferrocarril de la Jara hasta Calera y Chozas. Comiendo nos dimos cuenta todo lo que faltaba para llega a nuestro destino de hoy, habíamos perdido mucho tiempo con problemas hasta Talavera.
La tarde comenzó a buen ritmo, alguna colina pero casi todo plano hasta Oropesa que merecía una mejor visita . Salimos por la Ermita de Peñicas, tramo hasta Alcolea del Tajo por dehesas, no perder, zona virgen con grandes fincas que han conservado el paisaje. Paramos a reponer fuerzas en el bar El Parador donde Sorci tuvo la buena idea de dejar sus alforjas tipo trailer, no se que hubiera pasado si continua con ellas. Quedaba otra parte muy bonita pero la mas dura al final del dia, subida por camino sin desbrozar después de Puente del Arzobispo, menos mal que no había abrojos. Por sendas y caminos poco transitados y con continuos toboganes llegamos por fin a Villar del Pedroso casi a las 9 pm donde pernoctamos.
Fueron 110,8 km y 820 m engañosos de desnivel